viernes, 30 de agosto de 2013

Cuando suenan las sirenas



La presidenta inauguró ayer la feria industrial de Berazategui.
En medio de su discurso sonó una fuerte sirena que cubrió todo el ambiente.  Y Cristina reflexionó al instante: “cuando yo era joven, el sonido de una sirena me hacía esconder debajo de la cama. Hoy la escuchamos y sabemos que es el cambio de turno en una fábrica del barrio. ¡Miren cuánto cambio el país de los argentinos!”.
Por allí transcurre la vida en este tiempo histórico.
Vaya con la semanita que hoy culmina su trajinar de agosto.
Pasemos lista.
En los EE.UU., un puñado de jueces acompañó el reclamo carroñero de los fondos buitres pretendiendo que Argentina retroceda al peor momento de su reciente historia.
Pero a ese pasado, que como dice Cristina está a la vuelta de la esquina, no debemosniqueremos volver nunca más.
En el Palacio de Tribunales se realizó la audiencia pública convocada por la Corte Suprema para escuchar las voces que expresan el litigio entre el Grupo Clarín y la democracia. Y si fueron dos mujeres las que descollaron en la primera jornada, Cynthia Ottaviano y Alejandra GilsCarbó, en la de ayer deslumbróotra mujer llamada Graciana Peñafort Colombi, en representación del Estado a través del AFSCA.
Maravillosa.
Con valor y respeto supo corregir una pregunta envenenada que presumía la intención del gobierno de quitarles licencia sólo al Grupo de Magnetto. Y Graciana respondió: “Debo notar que en su pregunta hay un error. No se desea reducir al Grupo Clarín, sino que lo que busca tener esta ley es un mercado desconcentrado”.
¡Ole!
Ahora sólo resta esperar que la Corte falle en la misma dirección que los vientos de la democracia. Y no a favor del vozarrón del que siempre se creyó el patrón de la vereda.
El otro punto nodal fue el anuncio de la presidenta de eximir del pago del Impuesto a las Ganancias al 90 % de los trabajadores y al casi 100 % de los jubilados.
¡Otro ole!
Y aquí queremos hacer una última reflexión.
La oposición, como la Gata Flora, salió mayoritariamente a ningunear la decisión diciendo que es “una medida electoralista”.
O sea. Si el gobierno no hace nada con el mensaje de las urnas es un gobierno indolente. Pero si el gobierno escucha ese mensaje es “electoralista”.
Pónganse de acuerdo.
Pero además ¿qué hay de malo ser electoralista en democracia?
¿Acaso es mejor ser destituyente?
¿O acaso se olvidaron que la primera verdad del peronismo dice que la verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del pueblo?
Argentina rechazó una invasión imperial a Siria y la presidenta recibió el afecto de los artistas populares.
Y todo sucede aquí. En la Argentina de todos y de todas.


El Argentino, viernes 30 de agosto de 2013






jueves, 29 de agosto de 2013

Una audiencia con perfume de mujer



Cuando la Defensora del Público, Cyntia Ottaviano, miró imperturbable a los miembros de la Corte Suprema y les dijo: “Ahora es tiempo que la Corte decida ¿Quién es David y quién es Goliat? Para esta Defensoría del Público no hay dudas, las audiencias lesionadas por una concentración abusiva, depredatoria y cruel, son el David de esa historia”, la piel de la democracia se erizó de emoción y de nuevas convicciones.
Es por aquí que podemos y debemos. Adelante, pues.
Ya habían pasado a exponer, antes de ella, distinguidos amigos del Estado nacional, es decir del pueblo, y los defensores del capital monopólico y concentrado del Grupo Clarín.
Pero la claridad y la bravura de esa mujer que fue capaz de decir tantas verdades en un par de minutossin abandonar la cordura y la sonrisa, hizo que el solemne silencio que imponía el Palacio se llenara de voces y aplausos y de una lágrima furtiva, quizá, en nombre de tantas luchas populares que precedían ese emotivo momento.
Se dio tiempo para transmitir las palabras que desde el pie  vienen reclamando desde hace muchos años por el cumplimiento efectivo de la ley de medios y para acuñar conceptos medulares como: “Traigo la perplejidad del público, que espera saber cuánto tiempo es necesario para la aplicación de una ley antimonopolios. Es tiempo de terminar con las posiciones dominantes o monopólicas, de considerar la información como un derecho y no como una mercancía”. Y siguió de modo categórico: “Estamos ante un grupo comunicacional que cuando tuvo el mandato de informar, silenció un genocidio. La información pertenece al público, no a los periodistas ni a los empresarios”.  
Otra mujer, la Procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, fue la que coronó brillantemente una audiencia signada por la defensa deun derecho a la libertad, de un lado y la defensa de la rentabilidad empresaria, del otro.
En la calle, la gente se iba sumando hasta llenar la plazadonde al fin de la jornada seguiría emocionándose, esta vez con las palabras de Martín Sabbatella.
Hoy continuará la audiencia pública. Después, el reloj caminará con paso de cangrejo para los cortesanos. Es tiempo de descuento para todos, pero mucho más para quienes se arrogan el derecho de decidir por sobre la decisión que ya tomaron, hace cuatro años, los genuinos representantes del pueblo, que son los diputados y senadores de la nación.
“Que dios los ilumine”, les deseó Cynthia Ottaviano en el final de su conmovedor mensaje.
Y desde el llano agregamos: que dios y la democracia y la voz del pueblo y la historia y la patria y la Constitución Nacional y la decencia y la verdad y la ética los ilumine en la decisión que tomen.

El Argentino, jueves 29 de agosto de 2013



miércoles, 28 de agosto de 2013

La ley que escribió el pueblo


En el Palacio de Tribunales hoy se desarrollará la audiencia pública entre Clarín y el Estado nacional. 
En la calle, al mismo tiempo, será mucha la gente que participará de la Jornada Popular en defensa de la ley de medios de la democracia. Es decir, de la misma ley que se expondrá, en sus partes duras y blandas, en la audiencia convocada por la Corte Suprema de Justicia.
Allí estaremos. Adentro y  afuera del Palacio.
Adentro, porque esta vez el Estado somos todos. Y así lo deben sentir  los representantes de nuestro destino colectivo que sabrán defender allí lo que el pueblo decidió hace ya cuatro años.
Afuera, tal como reza la convocatoria de hoy,  a partir de la mañana y hasta que las velas ardan, habrá música en el aire.
Que para mí, es la palabra del pueblo argentino, diría el General.
Cuando los pueblos hacen su camino con sus propias manos, cuando construyen una casa, una escuela o una ley que los beneficia, sólo hay lugar para la alegría.
Que el odio y el rencor se abstengan este día. Ya tienen bastante con la representación de intereses que sólo buscan la rapiña, el saqueo, el monopolio y la violación que ejercen a diario contra la Libertad de expresión.
No abundan los ejemplos como los que nos lega la construcción de esta ley de medios.
Nació de un puñado de hombres y mujeres libres y fue creciendo al cobijo de la democracia. Y luego fueron miles. Y luego fueron millones los que la apoyaron. Y fue una presidenta, tenía que ser mujer, la que finalmente parió el proyecto concebido desde el pie y lo envió al Congreso para que lo acunen y le otorguen un nombre y le dieran su documento nacional de identidad.
Pese al camino recorrido, de nuevo esta ley es obligada a mostrar su DNI.
Así lo quiso la Corte.  
Alguien dirá: “pero ya la votó el Congreso, ya es ley, ya nació, sólo hay que hacerla cumplir”…y tendrá  razón. Pero la razón, como la verdad, tiene enemigos poderosos; tan poderosos, que les dan la chance de pelar por el título aunque no estén en la categoría ni den en la balanza ni tengan en regla sus papeles.
Ya está. Que la próxima audiencia sea para notificarnos lo que decidan  7 hombres y mujeres en nombre de la ley.
La luz ya iluminó la caverna. La podrán debilitar o apagarla nuevamente. Pero eso sí: ahora ya sabemos de qué caverna se trata. La vida y la luz están del lado de los pueblos.
O sea. Del lado del más débil.
Cristina y el Pepe se abrazaron ayer en Montevideo y fue como si volviera Artigas. 
Al final del día, la Presidenta anunció otra buena nueva para los trabajadores: casi el 90 % de ellos y casi el 100 % de los jubilados no pagarán Impuestos a las Ganancias.
En la vida hay que elegir.  Y Cristina elige.

El Argentino, miércoles 28 de agosto de 2013


martes, 27 de agosto de 2013

El fin de la inocencia


Cuando Carlos Melconián, el economista del PRO, dice lo que dijo ayer, que los fondos buitres son unos buenos tipos que sólo quieren cobrar lo que la Argentina les debe y que la que está en falta es Argentina porque “es un país garca”, nos preguntamos razonablemente: ¿este señor está cual lobo estepario, solito su alma, ladrándole a la luna? ¿O tiene atrás suyo más  gente con la cola sucia alentándole a que diga lo que dijo?
Cuando López Murphy dijo hace unos días, que después que se vaya el kirchnerismo del gobierno habrá que retornar a sus hogares a los genocidas presos por delitos de lesa humanidad ¿está tan solo como se cree? ¿O hay mucha gente con el alma sucia y las manos manchadas de sangre alentándolo?
Cuando Elisa Carrió compara a la Presidenta con Isabel Perón y su colega Jorge Yoma dice que si no se cambia de modelo, el gobierno se cae ¿están diciendo en nombre de un conglomerado de poder mayúsculo que entramos a la etapa final de esta democracia inclusiva?
Cuando la Corte Suprema falla a favor de la Sociedad Rural y en contra del Estado democrático y le da igual representatividad al pueblo argentino y al monopolio Clarín en la convocatoria a la audiencia pública del miércoles 28 ¿está empujando al hastío colectivo a una sociedad que no está decidida a retroceder un centímetro en su calidad representativa, republicana, federal y democrática?
Cuando los jueces de la Cámara de los EE.UU. fallan en contra de la Argentina y direccionan ante la Corte Suprema de la potencia del Norte para que nos termine de arrojar a un nuevo incendio social con otra crisis letal devenida de la deuda con los fondos buitres ¿accionan solos o están estimulados por intereses locales y trasnacionales que alientan desde Buenos Aires el caos y el escarmiento a la Argentina por el proyecto de país implementado en esta última década?
Y cuando Lanata en representación de  Magnetto insulta y ofende a la Presidenta, a  la memoria de Néstor Kirchner, a una parte importante de este pueblo, a las Organizaciones Sociales y comunitarias que parió la patria en estos años y a los jóvenes de La Cámpora que dan lo que no tienen  cuando de militar por el prójimo se trata ¿están de nuevo provocando a la respuesta violenta como tantas veces lo hicieron en la historia?
Esta columna se declara desde hoy, columna libre del pecado de inocencia ante estos tipos. Y ante  la inocencia de los que se ponen del lado de los buitres para ver si pescan algo en las aguas revueltas que resulte de una Argentina que se caiga nuevamente del mapa.
Se llamen como se llamen esos tipos opositores.
Se digan de la progresía o de Mongo Aurelio.
Nos están atacando.
Digo. Por si no nos dimos cuenta.

El Argentino, martes 27 de agosto de 2013




lunes, 26 de agosto de 2013

La lección del Gaucho Rivero


El 26 de agosto de 1833 amaneció más frío que nunca en las Islas Malvinas. Los gauchos liderados por Antonio Rivero se movieron sigilosamente por los caminitos de Puerto Soledad, según el plan que acordaron días antes. Tomarían la comandancia británica de las Islas y los principales establecimientos del lugar, como el almacén de ramos generales, bajarían del mástil la bandera inglesa, izarían la argentina y darían vivas a la patria esperando que ese grito soberano llegue un día al continente.
A principios de ese año, el 3 de enero para ser más precisos, la corbeta británica Clío había intimado a rendirse al coronel argentino José María Pinedo. Y entonces Pinedo reunió a los criollos y les dijo que no tenía fuerzas suficientes para resistir el ataque colonialista de la flota inglesa, formada por la Clío y otro buque de guerra más adentro del mar.
El oficial argentino se rendiría así nomás, sin disparar un solo tiro y regresaría de inmediato a Buenos Aires. Los gauchos murmuraban por lo bajo haciendo notar su descontento. Pinedo les ofreció volver a bordo de la Sarandí con él. Los gauchos se negaron. Rivero dijo que su patria estaba allí, en Malvinas y que ofrecían sus vidas para defenderla. “Cuente con nosotros, coronel”.
Pero la formación profesional de Pinedo le hacía definir que la relación de fuerzas entre ambos bandos, el inglés y el argentino, favorecían claramente al inglés.
“¿Y la patria?” preguntó Rivero. Y se quedó al frente de sus gauchos.
Nunca nos enseñaron que durante todo ese año de 1833 y hasta el 18 de marzo de 1834, un puñado de gauchos aguantó los trapos allá en Malvinas.
Del 3 de enero al 26 de agosto, el día de la revolución de Rivero, en Malvinas flamearon ambos pabellones, el inglés y el argentino. Era un poder dual el que mandaba en las Islas. Pero ese equilibrio,  inestable como todo equilibrio, se rompió un día como hoy de 1833: sólo flameó en adelante la bandera argentina.
¿Saben quién lo testimonió?: el naturalista inglés Charles Darwin, que cuando llegó en marzo de 1833 no pudo evitar que su dibujante oficial, Conrad Martens, retratara nuestra enseña patria flameando en Malvinas.
Darwin cuenta que fue cordialmente invitado a comer un asado con cuero con los gauchos.
Gloria y honor al Gaucho Rivero y a los patriotas de Malvinas. En este día y siempre.
La Academia de Historia registró el hecho histórico. Pero aclarando que eran gauchos matreros, ladrones, asesinos, ladinos y corruptos a los que sólo motivaba la ambición del oro y el dinero.
El 18 de marzo las tropas inglesas derrotaron a Rivero.
Se dice que murió peleando en el Combate de la Vuelta de Obligado.
Perdió una batalla, pero construyó la historia.

El Argentino, lunes 26 de agosto de 2013


domingo, 25 de agosto de 2013

El único voto útil es el voto kirchnerista


Bastaron dos semanas para que la oposición dilapide el capital que creyó ganar la noche electoral del pasado 11 de agosto. Desde entonces no hicieron más que emborracharse de vana gloria en el cuartel general de su comandancia, que como es público y notorio, está en los estudios y madrigueras de la corporación mediática. Consumieron y consumaron por adelantado lo que ya nos demostraron en el 2009 cuando en un instante que creyeron eterno, entraron angelados a las puertas del Congreso para desplumarse luego y mostrarse como lo que son.
Lo que antes gastaron en dos años, Grupo A mediante, ahora lo gastaron en dos días. 
Si hasta hace poco se decía en recoletos espacios que los peronistas eran los incorregibles, hoy habrá  que admitir que a esta oposición no la corrige ni el mismo diablo.
Si se los mira bien, son previsibles: siempre cometen los mismos errores. La naturaleza fugaz de su frágil constancia se conforma de una pizca de egocentrismo desbocado, ausencia de proyectos colectivos y orfandad de criterios para diseñar sus propios argumentos. Sólo saben esperar la tapa de Clarín para salir a replicar a los cuatro vientos el  guion del día cual si fuese la verdad revelada del  señor de los anillos. Eso sí: cada opositor le imprime su tonada. Algo es algo.
Batallones aislados y patrullas perdidas, a la hora de atacar al gobierno democrático son todos para uno y uno para todos;  pero cuando deben administrar las pequeñas batallas que dan por ganadas antes de tiempo, adolecen de la capacidad y la virtud que le es propia a los que saben gobernar los dones que otorga la victoria. Ellos también son lo que son: el eco vago de un país pasado, pero que sin embargo, no está pisado.
Por eso declaran en estos días que su máxima meta es evitar la re-re-elección de no se sabe quién y asaltar la presidencia de la Cámara de Diputados si ganan en octubre.
Ahora bien: cuando están frente a los poderosos dicen todas sus verdades sin tapujo alguno. Hay que anotarlas. Hay que difundirlas poniendo el  texto literal y engominado que sale de sus bocas. Hay que identificarlos frente al pueblo mostrando al que votó al kirchnerismo y al que no lo votó, el peligro que se cierne si le dan más combustible en las urnas, porque “total, el aire es gratis”. 
Y no se trata de elaborar una estrategia del miedo, como temen algunas almas buenas. Se trata simplemente de advertir que tengamos cuidado antes de caer en la emboscada y no avisar una cuadra después cuando hayamos perdido el honor y la soberanía, Aerolíneas e YPF, la AUH , los Derechos Humanos y el Fútbol para todos.
Si en la noche de la rabia que destilan esos medios todos los gatos son pardos, es imprescindible munirse de farolas y linternas que alumbren con su luz el color de cada uno.
Massa es Macri. Y Massa y Macri son Duhalde. Y todos juntos son Magnetto. Y si sumamos a Wall Street, que también se emborrachó por una noche, tendremos a la vista el pasaje de ida a los años noventa, con su cirugía mayor sin anestesia, su endeudamiento al FMI y sus descuentos a  salarios y  jubilaciones. Que nadie alegue después “por qué no me avisaron”.
Por eso lo que hizo Oscar Parrilli y lo que hace Cristina vía twitter cantando las verdades con nombre y apellido, es por donde se lo juzgue un acto  luminoso. Hay un sector social que nunca baja de las tribunas. Sólo mira y  juzga desde las butacas. Y no es para enojarse. Es así nomás. Pues bien, que haya salido el Secretario General de la Presidencia a gastarse el feriado para mostrar y demostrar con documentos en mano que es toda una mentira la operación de Lanata, hace que propios y ajenos tengan elementos para cotejar.
Si no fuera así, quedaba  sólo un clarín aturdiendo en medio de la noche.
Así como la oposición se gastó rápidamente  la bocanada de aire que creyó ganar en las PASO, el kirchnerismo recuperó y coronó con creces la iniciativa política apenas 10 días después del recuento de votos. Ocurrió en Rio Gallegos, Santa Cruz, como debía ser. La presidenta descorrió los cortinados y al pie de esas represas tan patagónicas como sus nombres, “Néstor Kirchner” y “Jorge Cepernic”,  le puso el cuerpo al asunto frente a los titulares del poder económico y del poder que emana de la representación genuina de los trabajadores.
Mirándolos a los ojos, la presidenta reafirmó que el proyecto de un país para todos y no para unos pocos, no se toca ni se tocará mientras el kirchnerismo sea elegido por el voto popular. La hoja de ruta es clara: salimos de un muelle donde se apretujaban millones de hambrientos y desocupados, de obreros mal pagados y empresarios destrozados y con todos a bordo llegamos a un puerto donde comemos casi todos, trabajamos casi todos, nos educamos casi todos y nos curamos casi todos. Por todos los “casi” que perduran dolorosamente hay que insistir en el rumbo echando leña a la caldera para llegar más rápido a destino, corrigiendo por aquí y por allá todo lo que haga falta.
Por eso el único voto útil es el voto kirchnerista. Dicho sea así, sin ambigüedades.
¿O qué voto lo sería si nos hace perder  las conquistas sociales de estos últimos años?
Dame una propuesta y construiré una oposición, diría don Jauretche.
Que cada uno asuma su responsabilidad.
Quienes apostamos a un país donde la vida valga un beso, una caricia, una ley de medios, un mejor transporte aéreo y  ferroviario en manos del Estado, un poema, una flor, una fábrica recuperada, sabemos cómo votar y cuidar lo conquistado.
Pronto sabremos si la Corte está con la democracia o con los monopolios.
A prepararse, no para resignarnos a un posible fallo injusto, sino para revertir victoriosamente otra causa perdida; como enseña un poema de Ana Pérez Cañamares:
Hay que “…excavar trincheras con palas, lápices y saxofones… Llegará el enemigo y no entenderá nuestro lenguaje. Les será imposible la conquista: ellos no aman a los perros mestizos ni arrancan orgasmos a las palabras. Perderemos la guerra de las mayúsculas, pero la vida está de nuestra parte: lloramos y celebramos la brizna”.


Miradas al Sur, domingo 25 de agosto de 2013

viernes, 23 de agosto de 2013

Si quieres la paz prepárate para la paz


La presidenta Cristina Fernández de Kirchner pasó en cuestión de horas de un Dialogo nacional en Santa Cruz, a una Conferencia continental para la Proscripción de las Armas Nucleares en América Latina y el Caribe.
Habría que saber unir ambos momentos para descubrir la clave común que surge desde allí.
Esa clave común es la incesante búsqueda de resolver todos los conflictos, sean grandes o pequeños, nacionales o globales, por una sola vía: la paz.
El discurso presidencial de ayer, en ese sentido, fue rico en conceptos sobre el derrotero que recorre el mundo desde hace al menos medio siglo a esta parte. Allí está el texto para su lectura y análisis. Sólo queremos subrayar la advertencia sobre el holocausto social, más que el nuclear, que irremediablemente se impondrá si los gobiernos no trabajan para el bienestar de sus pueblos antes que para aplicar los anacrónicos e inservibles planes de ajuste recomendados por los organismos del dios dinero. 
Europa no es el camino. Las recetas del FMI ni del Banco europeo, mucho menos.
En tiempos de la guerra fría, hace muchos años, se predicaba por derecha y por izquierda, que para ganar la paz había que prepararse para la guerra. Y así nos fue. 
Los pueblos aprendieron de la dolorosa experiencia transcurrida desde entonces. Pero los sectores más poderosos, los dueños de ese mundo donde se mezclan impúdicamente intereses financieros, armamentistas, narcotraficantes y mediáticos, no sólo que no aprendieron nada del pasado, sino que continúan alimentando y alimentándose de la hoguera del odio y la desesperanza que ellos mismos encienden.
Hagámonos un par de interrogantes:
¿Acaso se le puede creer al gobierno del Reino Unido cuando habla de paz y al mismo tiempo sigue invadiendo nuestro mar en las Malvinas con un  arsenal nuclear capaz de hacer volar a todo el continente en un par de minutos?
¿Acaso se les puede creer a los que aquí en nuestro país declaman sobre la necesidad de ejercitar el dialogo pero el único lenguaje que emplean recurrentemente es con el dedo del medio apuntando hacia arriba y contra todo aquel que piensa distinto?
El empresario Eduardo Eurnekian, uno de los dirigentes que participó del encuentro entre la presidenta y representantes  empresariales, bancarios y sindicales en Rio Gallegos, le espetó ayer al aire al empleado de Magnetto, Jorge Lanata: “Ustedes agrandan todo, ustedes quieren sangre, ustedes no quieren paz social, dejame de jorobar”.
Digamos que el hombre se hartó de la prédica violenta de algunos medios y periodistas. 
Calma. Hay un gobierno y un pueblo que hace rato aprendieron que para ganar la paz, sólo hay que armarse de ideas.
Lo dijo ayer Cristina.


El Argentino, viernes 23 de agosto de 2013

jueves, 22 de agosto de 2013

Pasan cosas raras últimamente


¿Alguien  puede explicar con fundamentos cómo es posible que la Corte Suprema  falle a favor de una entidad privada como la Sociedad Rural contra la cosa pública que administra el Estado?
La mayoría de los cortesanos rechazó ayer  la presentación del gobierno por la simple razón de haberla entregado con 48 horas de retraso.
¿A eso se le llama extemporáneo  y no es  extemporáneo  que en pleno siglo XXI la organización de los terratenientes se haya apropiado desde hace décadas indebidamente de una propiedad que le pertenece a los argentinos por derecho propio? ¿Y no es extemporáneo que la justicia tenga aprisionada cuatro años a la ley de medios de la democracia? ¿O sea que los ciudadanos de a pie deben esperar  8.760 horas para que se cumpla una ley y la justicia no puede tolerar ni 48 horas de espera?
Pasan cosas raras últimamente.
¿Alguien puede explicar  cómo se entiende la fuga de los genocidas del Hospital Militar y la de los 13 delincuentes del penal de Ezeiza sino es con la complicidad del propio personal civil o militar que allí ejerce su tarea?
Sergio Massa debería dar cuenta de ese perverso mensaje que difundió en su campaña de que no hay que hablar más del pasado. ¿Sabe qué Massa? En la Argentina, su país, mi país y el de 40 millones más, el pasado no se quedó en la era del hielo, sino que convive con nosotros y cincha de la cuerda a cada rato para volver atrás. ¿Cómo se explica, sino, que haya 400 pibes que siguen desaparecidos de su identidad y que Papel Prensa que sí tiene identidad siga en manos de quienes la usurparon en tiempos de la dictadura?
¿Alguien puede explicar  cómo es que una encuesta privada arrojó como resultado que el 61% de la población apoya todo lo realizado por el kirchnerismo en estos años y que sin embargo los opositores digan muy sueltos de cuerpo que “hay fin de ciclo”?
¿Alguien puede explicar  cómo es que Mauricio Macri prohibió a Tecnópolis en la Ciudad que gobierna y resulta que ya la visitaron 10 millones y medios de personas desde que  abrió hace apenas dos años del otro lado de la Gral. Paz?
Todo es así en esta época.
“No hay dialogo”, aúllan los amotinados en Clarín. Y allí está la presidenta  dialogando con empresarios, banqueros y sindicalistas reunidos en el sur de la patria para debatir sobre el presente y el futuro al pie del primer ladrillo de las represas nacionales más importantes de la Argentina. No hablaron a la vera del incendio tan temido, como alerta Magneto a través de Lanata, sino desde la realidad de un país que sigue creciendo.
Hay tanta libertad que cualquiera puede mentir impunemente por la tele y de allí ir a tomarse un baño turco hasta el próximo programa.
Es raro, no?

El Argentino, jueves 22 de agosto de 2013





miércoles, 21 de agosto de 2013

Entre las represas y el túnel


En medio de la feroz balacera mediática contra el gobierno nacional y particularmente contra la Presidenta, nos empeñamos en seguir hablando de las cosas buenas que nos pasan.

El país que hoy pondrá en marcha la construcción de las represas “Presidente Néstor Kirchner” y “Gobernador Jorge Cepernic” sobre el río Santa Cruz, es el mismo país que en estos últimos años construyó escuelas, universidades, hospitales, caminos y…Tecnópolis.

El modelo de desarrollo inclusivo está allí; sólo hay que mirarlo para comprobar que los argentinos fuimos capaces de construir desde las cenizas del 2001 este país que hoy somos.

Anote un dato: la construcción de estas represas permitirá producir una energía de 1740 megas y por tanto, evitará la actual importación de combustible que en la actualidad demanda una inversión presupuestaria anual de 1.100 millones de pesos. 

Los argentinos ganamos otro escalón en nuestra soberanía, pero también ganamos en términos de inversión pública eficiente.

¿O no era “la eficiencia” lo que tanto preocupaba a muchos republicanos en el discurso? 

Fíjense, por si tienen dudas, que en apenas 4 años más se recuperará la inversión estatal inicial para esta mega obra.

Por todo esto es que el Ministerio de Planificación Federal debió salir a rebatir ayer todas y cada una de las mentiras publicadas por el socio de Clarín, el diario La Nación.

La Patagonia ya no estará aislada del resto de sus regiones hermanas. Por el contrario, ofrecerá la energía que produzcan sus represas para más obras y empleos y para cambiar definitivamente la matriz energética argentina.

Es una buena ocasión, la de hoy, para que los factores reales de la producción y el trabajo se reúnan con la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, a delinear el país que se viene con este proyecto gobernando.

De las represas patagónicas al túnel por el que fugaron 13 presos en el penal de Ezeiza hay la misma distancia que media entre la Asignación Universal por Hijo y los 5 millones de empleos recuperados, con la fuga de genocidas en el Hospital Militar, el hackeo a la página web de la Presidencia de la Nación, la amenaza opositora de asaltar la presidencia de la Cámara de Diputados en caso de ganar en octubre, la ofensa de Lanata y de Nelson Castro a la figura presidencial y las afirmaciones de López Murphy contra los juicios de lesa humanidad y augurando que “cuando termine el kirchnerismo habrá espacio para otro tipo de enfoque y otra realidad”.

O sea.

El país real construye represas. El país del pasado amenaza con volver a amnistiar genocidas.

Ya lo dijo Videla, el Kirchnerismo es lo peor que les pasó. 

Por eso hay tanto alboroto en algunas jaulas. 

 

El Argentino, miércoles 21 de agosto de 2013

 

 

 

 

 

martes, 20 de agosto de 2013

La derecha amotinada



El comunicado oficial del gobierno y las declaraciones del Secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, desmontando una por una las mentiras proferidas el último domingo por el empleado de Héctor Magnetto, Jorge Lanata, nos exime de mayores comentarios sobre el hecho en sí.
Quizás alcance con decir por enésima vez: Clarín miente.
Por si alguien dudaba, nos parece que queda claro que el Grupo Clarín mató definitivamente lo que de periodismo le quedaba, para convertirse en el principal operador de la derecha amotinada en la Argentina. 
Y esa derecha no soporta ver a Cristina Fernández de Kirchner gobernando el país. Porque esa derecha no se banca ninguna democracia que no sea la que puedan dominar y domesticar a su antojo.
Pensemos juntos:
Un día culminará el mandato de Cristina. Y vendrá otro presidente o presidenta a gobernarnos con mandato popular. Pues que vayan sabiendo los que se anotan en la carrera que si osan hacer la mitad de lo que hizo el kirchnerismo en estos años, el monopolio también vendrá por ellos y su descendencia. Y le dirán “corruptos”, “ladrones”, “lavadores de plata”, “zurdos”, “subversivos”, “bipolares”, etc. etc.
Porque la ecuación del conflicto no es: “Clarín contra el gobierno K y viceversa”.
No, no. La cuestión es mucho más seria y profunda. Es el conflicto del poder corporativo mediático representado por Clarín, contra la democracia, contra el pueblo y contra la nación argentina.
La figura tan utilizada por algunos dramaturgos en distintas obras épicas le viene como anillo al dedo: son el enemigo del pueblo. Ese que cuando sale el sol en la aldea, grita desaforado “ojo que se viene una tormenta”. Y cuando la gente celebra como si fuera fiesta una victoria colectiva, dice con malicia y por lo bajo “no festejen tanto que volverán a perder”.
Clarín atenta contra la esperanza y el sentido de comunidad que recuperamos.
Cuídese de ellos. Vienen por todos nosotros.
Por eso son una amenaza contra la democracia.
Sigamos pensando:
Si Clarín demostró tener tanto poder en la justicia como para retener cuatro años en la gatera de la historia a la ley de medios de la democracia ¿cómo se explica que nunca hayan presentado una prueba judicial y nunca hayan logrado la condena de ningún acusado de corrupción por el Grupo?
Recordemos su modus operandi. Van a 20 lugares y en ninguno de ellos pueden demostrar nada de nada. Todo verso.
Lo más canalla y miserable es lo que hacen con la memoria de Néstor Kirchner.
¿Sabe por qué lo atacan? 
No sólo porque el próximo 27 de octubre votaremos honrando su memoria, sino porque Kirchner ordenó descolgar los cuadros de los socios genocidas del monopolio.
Por eso se amotinan en Clarín    

El Argentino, martes 20 de agosto de 2013