domingo, 31 de julio de 2011

Sentido de pertenencia

La elección de hoy en Buenos Aires es otra estación rumbo a los comicios nacionales de octubre y por eso mismo, atravesada por la tensión entre los dos proyectos de país en pugna.

Se puede ganar o perder un distrito electoral, pero sería una tragedia imperdonable desandar 8 años de profundas transformaciones políticas, económicas y culturales protagonizadas por el conjunto del pueblo.

Todo el espacio construido, en cada lugar, contribuye a ese desafío mayor.

Reafirmamos un criterio: el movimiento nacional y popular está en plena disputa política con sus principales adversarios. Ya superó su estado de asamblea interna.

Está haciendo política a cielo abierto. En los barrios, en las fábricas, en las aulas, en las calles. En el gobierno nacional. En los gobiernos provinciales y comunales.

El movimiento siempre disputó poder sin pedir permiso a los viejos dueños del poder económico mediático. Es conciente que no está dirimiendo una elección cualquiera.

Se batalla para acrecentar las bases de sustentación del proyecto de país por el que dieron su vida muchos patriotas desde hace doscientos años.

Visto así el marco general, va de suyo que nuestro genuino sentido de pertenencia nacional se enfrenta a los intereses que intentan diluir y negar ese sentido.

Nosotros queremos cruzar Los Andes.

Ellos, bajo el mando de Magneto y Biolcati, jugar a la mancha venenosa.

El movimiento nacional es un sueño colectivo, una mística de lo popular, un proyecto de país inclusivo.

Envuelto en esas consignas, resumidas en la alegría de la juventud cuando agita con orgullo la bandera de la patria, el movimiento marcha con sus contradicciones a cuestas, con sus asignaturas pendientes, con sus interrogantes, pero sobre todo, con sus certezas y su propia identidad, hacia el 14 de agosto primero y hacia el 23 de octubre después.

“De casa al trabajo y del trabajo a casa”, pero haciendo política. De la manera más inteligente y eficiente, porque la meta es una sola: ganar las elecciones.

Nada ni nadie puede desviarnos de esa meta estratégica y todas las energías deberán ser puestas allí.

Del lado del proyecto neoliberal y de exclusión social, Biolcati ya lanzó su “grito de guerra” en la Sociedad Rural, encarnando las cientos de tapas de Clarín contra el gobierno de Cristina.

Saben que están en problemas.

Carecen de una masa crítica social como la que tuvieron con Braden y la Unión Democrática. A eso apuntaba el Grupo A en el Parlamento, pero se fisuró en menos que canta un gallo. Además, los vientos de la historia soplan en dirección a la integración y la igualdad de los pueblos de la América del Sur.

El paso de Cristina en Perú y en Brasil, habla de ello.

Néstor Kirchner resumió las nuevas tareas a fines del 2009: “Debemos tomar clara conciencia de que es fundamental organizar la voluntad en idea, organizar la idea en acumulación de poder y organizar la acumulación de poder en el instrumento transformador que definitivamente nos permita cambiar la Argentina y dar la batalla, con todas nuestras fuerzas, para que ese cambio sea profundo y no tenga retrocesos.”

En la misma sintonía, Cristina denomina a esta etapa “La institucionalización del proyecto nacional, popular y democrático”. Y agrega: “La institucionalización de un modelo de país es cuando se hace carne en el conjunto de la sociedad porque visualiza que ese es el camino más acertado como país y como nación”.

Para lograrlo, todos debieran estrechar filas en torno al objetivo común, evitando perderse en los laberintos con que a veces los provocan.

La ornamentación y el estilo de nuestra campaña emplearán, seguramente, las maneras más eficientes y modernas para convocar el mayor espacio social posible.

Se trata de ganar, no de hacer “una buena elección”. Pero sin renunciar a las convicciones ni a las banderas que se recuperaron con el liderazgo de Néstor y Cristina.

El supuesto “fenómeno” Miguel del Sel confesó que desde su partido, el PRO de Macri, votará por Duhalde.

Hace política en representación de lo peor de la vieja política con Duhalde, Momo Venegas o Barrionuevo, el que se presentaba como “recontra alcahuete de Menem”.

No hay un retroceso en la conciencia social ni en el valor que recuperó la política.

Es lo que pretenden instalar ellos.

Sí se está prefigurando el escenario donde volverán a dirimir en las urnas dos proyectos de país: el nacional, popular e inclusivo y el proyecto neoliberal.

En medio de esta complejidad caótica que plantea la oposición y el poder económico que lo esponsorea, la candidatura de Cristina se encamina a la victoria.

No hay que perder la noción de historicidad ni el contexto histórico que estamos atravesando. Cuando esa noción se diluye, cualquier barquinazo es posible. Es entonces cuando los análisis discurren sobre la “subjetividad” del votante, que esconden, en verdad, la propia subjetividad del comentarista.

Sólo la memoria nos hará libres.

La Argentina fue el mejor ensayo de las políticas neoliberales a escala global en los años noventa. Antes y después, la frustración radical.

Pero ¿qué fue de la vida de los neoliberales en estos últimos años? ¿Se mudaron de país? ¡No! Están entre nosotros. A veces agazapados y a veces, no.

Conservan el poder usurpado con la dictadura cívico militar.

Ahí están los Blaquier para demostrarlo en toda su crueldad.

La nueva matriz social argentina cruza las coordenadas que vienen de largas décadas de opresión y hegemonía cultural colonizante, con las coordenadas que emergen a partir de la asunción de Néstor y Cristina Kirchner.

La puja entre los dos proyectos de país acontece en esa realidad compleja.

Hay olor a cosa vieja en esas factorías punteriles que representan los intereses de aquellos que se negaron históricamente a sumarse y mucho menos a subordinarse a un modelo de país igualitario y soberano. Aunque ese modelo fuese exitoso en lo económico. No les importa ganar más, solamente. Les importa dominar el país.

Que ellos “ataquen”, Durán Barba dixit.

La generación del Bicentenario defenderá el orgullo de tener Patria.


Miradas al Sur, domingo 31 de julio de 2011

viernes, 29 de julio de 2011

El rigor del destino


Amanece en la gran ciudad.

Hoy es un viernes de vigilia para esperar un nuevo domingo de elecciones.

A votar de nuevo, se ha dicho.

A horas de la segunda vuelta, el pesimismo de la inteligencia indica que hay resultado cantado, mientras que el optimismo de la voluntad, empuja a creer que nada es imposible, que todo está por ocurrir recién ahora.

La historia de la humanidad se hizo en la forja del optimismo. Siempre.

La campaña sucia contra Daniel Filmus sigue su curso. Las empresas relacionadas con Durán Barba en esa maniobra artera ya están detectadas por la justicia.

En algunos barrios humildes se oyeron voces de vecinos denunciando intentos de extorsión del voto.

“Voy a saludar a la víctima” dice Macri en un pasillo y extiende la mano hacia Filmus.

“Esa es la nueva política”, dirá indignado Carlos Tomada.

Si hubiese quemado un cajón, como lo hizo Herminio en la antigüedad, a Macri lo hubiesen aplaudido desde Clarín.

Y él hubiese dicho con un globo en la mano: “muchachos, paren con la crispación”.

Amanece en la ciudad y una buena parte de la ciudadanía, sentirá que afila su decisión como para ir a una batalla épica.

Otra parte le bajará el pulgar a la nueva Argentina que sigue naciendo, pese a ellos.

Y festejarán no se sabe qué.

Sólo creen en el viento de cola como factor de cambio. Como si todo lo que tienen les viniera de arriba.

Otros dudarán, “con este si, con este no, con este señorito me caso yo”.

Dos proyectos de ciudad se enfrentan para gobernar la Ciudad de Buenos Aires.

Y esta vez no hay tercera posición. Aunque la disfracen.

O estás por la igualdad. O estás en contra. Que cada uno se haga cargo de su opción.

“El rigor del destino” es una bella y conmovedora película de ese enorme director argentino que fue Gerardo Vallejo.

Todo lo que usted quiera saber sobre el significado de las palabras epopeya y dignidad, lo encontrará en ese film tan hondo como despojado.

¿Por qué le rendimos homenaje hoy?

Porque nos duelen los compatriotas muertos en Jujuy, allí donde los poderosos aun se creen feudales.

Y porque uno no elije siempre dónde vivir, pero sí elije cómo quiere vivir.

Como los personajes de ese film.

Además, sólo la memoria nos hace libres. De eso se trata esta encrucijada.

Uno quiere vivir con dignidad, justicia, educación, salud, libertad, trabajo, soberanía. Con igualdad.

Y lo quiere hacer en una ciudad sin basuras y sin corruptos.

A veces el voto es una opción de vida, más que una simple boleta electoral.

A veces la voluntad mueve montañas. Y si no alcanza, que alcance para seguir mirando a los ojos a los compañeros y a los vecinos del barrio.

Honrar la democracia es honrar la vida, antes que nada.


El Argentino, viernes 29 de julio de 2011

jueves, 28 de julio de 2011

Moción de privilegio


Daniel Filmus presentó una moción de privilegio en el Senado para denunciar la campaña sucia del macrismo, de la que fueron victimas él, su padre y la ciudadanía.

Mauricio Macri buscó ganar votos difamando a su adversario con una falsa encuesta. Una estafa y un agravio para la democracia.

Cada uno decide su voto en libertad. Pero después deberá contarle a su conciencia republicana si apoyó o repudió semejante fechoría.

León Arslanián ofreció una conferencia junto a Filmus dando detalles del probable delito cometido por la mano derecha de Macri, Durán Barba y otros de igual catadura.

Que nadie se sienta ofendido. Pero estamos indignados en nuestra condición de ciudadanos.

A esta democracia la venimos construyendo entre todos para vivir con más justicia y mejor calidad institucional.

Y sin embargo el domingo se podrá votar a un candidato procesado por espiar a sus propios vecinos y parientes y que de acuerdo a las leyes, puede terminar en prisión.

Acordamos con ese axioma que dice que a la derecha “hay que ganarle en las urnas”. Pero ojo, porque con ese mismo criterio, algunos criminales fueron “indultados” en el cuarto oscuro.

Bussi y Patti, entre ellos. O los genocidas que apoyaron a Del Sel.

Una cosa es ser de derecha o izquierda y otra muy distinta, un delincuente.

La democracia no se fortalece votando a un candidato procesado y ahora involucrado en esta campaña sucia.

Si algo aprendimos como sociedad, es respetar el mandato de las urnas.

Ganando o perdiendo.

Uno puede analizarlo fríamente o llenarse de bronca o alegría, según el resultado.

Pero el voto no se mancha, diría el Diego.

Sabiendo de los antecedentes de Macri, a llorar a la iglesia si es que después termina preso y Durán Barba es hallado culpable de esta amoralidad.

Atravesamos el mayor bombardeo mediático antigubernamental de los últimos años.

Atacan al gobierno con el mismo empeño con que protegen a Macri.

Para la corporación mediática y la variada gama de dirigentes opositores, “todo está mal en la Argentina”.

Crean mediáticamente un clima de falsa “crispación” y se autoproponen luego como una oferta de “paz y amor”.

Primero te rompen el farol y luego te venden la lamparita. Viejo truco.

Sin embargo, las distintas mediciones sobre la economía nacional dan resultados positivos.

No hay ningún sector social, del campo, la industria, el comercio, que pueda demostrar lo contrario.

El alto nivel de turismo local y consumo interno, lo demuestran.

¿Y entonces, cómo se explica esta “crispación”?

Acertó: es un año electoral y el poder económico que no tiene límites en su voracidad, no cuenta con una estrella política ganadora.

Calma. La desesperación es mala consejera.


El Argentino, jueves 28 de julio de 2011

miércoles, 27 de julio de 2011

La noche que volvió Evita


Era la 20:25 horas de ayer cuando la más ancha de las avenidas, se llamó a silencio con un largo aplauso.

Un momento conmovedor que sólo expresan las mayorías cuando se lo proponen, hablando y cantando en la consigna de los que se reconocen con una sola palabra: Compañeros.

Todos miraban el edificio del Ministerio de Desarrollo Social como si esperaran que ella salga a saludarlos desde una ventana, allá en lo alto.

Cristina, la Presidenta de los argentinos, parecía no caber en su propio cuerpo mientras miraba el cielo.

O la bandera, que era lo mismo en ese instante.

Cuando el inmenso paño se desplegó para dejarla ver, sentí que el corazón no me cabía adentro.

Y lo invité a volar.

Era ella nomás. Era Evita, la mujer de nuestras vidas, la apasionada ternura militante. Ya no tendremos que valernos sólo del carbón y la tiza para pintar su nombre en las paredes y decirles a los desesperanzados que ella marcha aquí, al lado nuestro, “como bandera a la victoria”.

Ella, que denuncia a los falsarios sin disimular su indignación descamisada.

Ella, que un día mira al norte y abundan las voces denunciando las viejas injusticias y marcan con el viento implacable de los siglos: aquí los explotados, allá los explotadores.

Señales de rebeldías tan antiguas como las de Tupac Amaru, Belgrano y San Martín.

Como si hoy dijéramos: Aquí el proyecto nacional y popular. Allá el proyecto de un país para pocos.

Y ella dice: “Yo no concibo la patria sin el pueblo; nosotros somos el pueblo y yo se que estando en pueblo alerta somos invencibles porque somos la Patria misma”

Era ella nomás, con esa imagen suya tan bella y victoriosa, tan compañera nuestra, tan plebeya como sus cabecitas.

Desde ahora y para siempre alumbrará ese sur tan olvidado, tan humillado.

“Yo pertenezco a mi pueblo, me confundo con él, soy una de ustedes, un corazón de mujer que en el día difícil y amargo de la derrota, ha sacado fuerzas de su flaqueza y ha luchado y se ha impuesto por el futuro mejor de su país, de su pueblo”.

Las antorchas y las banderas de los pibes de La Cámpora, de los sindicatos, de las organizaciones sociales, de la cultura, de los artistas populares, las Madres y las Abuelas, se apretujaban el alma para saludarla.

Como si ella estuviera. Y no se equivocaban.

Gracias a Daniel Santoro y a Alejandro Marmo. Y gracias a los laburantes que la trajeron de nuevo hasta nosotros.

Muchos de ellos no disimularon el llanto de emoción mientras colocaban amorosamente en su lugar, cada tramo de esas toneladas de hierro con que dibujaron a la Eva de los Humildes que ayer volvió, como vuelve siempre cuando su pueblo la llama.

Pero es de vos que no se vuelve, Eva Perón, Evita.


El Argentino, miercoles 27 de julio de 2011

martes, 26 de julio de 2011

Evita de los humildes


Hoy es un día donde la memoria colectiva se enciende solita.

Cada 26 de Julio se nos estruja el alma despidiendo a Evita, una y otra vez.

“Eterna en el alma de su pueblo”, dice el locutor. Y enjuagamos una lágrima.

Nunca estuvo tan cerca de los argentinos como en estos años.

La Asignación Universal por Hijo, la recuperación de 5 millones de empleos y la administración estatal del ahorro de los trabajadores, son derechos reparados por Cristina, inspirados en esa enorme fuente de justicia, llamada Evita.

La historia la impulsó junto a Perón y su pueblo hacia delante. Y ella impulsaba a la historia, con amor y con pasión.

Su mirada sonriente, plena de ternura, nos acompañará desde hoy, allí donde sembró una lección de militancia: “Renuncio a los honores pero no a la lucha”.

El edificio que habita Alicia Kirchner, sede del Ministerio de Desarrollo Social, portará cual faro eterno, la templada sonrisa de la Evita de los Humildes mirando al sur y la Evita encendida de bronca y dolor por las injusticias, mirando al norte de la gran ciudad.

Marmo y Santoro son los autores de esta huella cultural impresa en la piel memoriosa de los argentinos.

Y el Clarín sigue mintiendo.

No constituye una novedad, pero merece una respuesta.

Cuando termina una elección la política acostumbra preguntarse: ¿qué obtuvo cada participante como resultado concreto? ¿Un diputado o dos, el gobernador, uno o dos senadores?

Se dice que los votos, en tiempos de cambio y transición histórica, van y vienen.

Por eso hay que pesar en una balanza lo que queda del día.

En Santa Fe, el Frente de Binner cayó 20 puntos en relación al 2007; obtuvo raspando el mandato a gobernar cuatro años más.

El Frente para la Victoria obtuvo el triunfo de María Eugenia Bielsa en la elección Legislativa, con 28 diputados y 11 senadores.

¿Del Sel, el cómico del Pro? Nada. No se llevó nada. Sin embargo el monopolio tituló otra realidad, mentirosa como siempre.

Los opositores corrieron a sacarse la foto, con Bonfatti, algunos y con el Midachi otros.

Duele la derrota de un dirigente de la talla de Agustín Rossi; pero no habría que perder de vista el triunfo logrado en las elecciones legislativas por el kirchnerismo santafesino.

Perdieron el Ejecutivo, ganaron el Legislativo. No es un dato menor.

Como dijo Abal Medina, el que más perdió fue el socialismo de Binner y su socio ya divorciado, el radicalismo de Ricardo Alfonsín.

La trepada de Del Sel no es para subestimarla: es la nueva derecha queriendo vaciar de contenido a esta democracia.

Ojo al piojo.

Y a seguir avanzando que el mandato sigue:

“Yo se que ustedes recogerán mi nombre y lo llevarán como bandera a la victoria”


El Argentino, martes 26 de julio de 2011

lunes, 25 de julio de 2011

Una epopeya en Buenos Aires


Hoy lunes, se inicia el desafío lanzado por Daniel Filmus frente al Obelisco: “Esta es la semana de la epopeya. De lo que parece imposible. La semana donde tenemos que ser fieles a lo que nos enseñó Néstor: en la Argentina de hoy, no hay nada imposible”

Visto los resultados de ayer en Santa Fe, queda claro que en la Argentina disputan dos proyectos de país y que terminarán por definir la contienda en octubre próximo.

¿Cuál es la diferencia electoral entre ambos contendientes?

Que el Proyecto nacional y popular se manifiesta a través de una misma expresión en todo el país, el Frente para la Victoria, mientras que sus opositores lo hacen en un conglomerado tan contradictorio de fuerzas partidarias que disputarán entre ellos mismos en las Elecciones Primarias el 14 de agosto y en las Presidenciales del 23 de Octubre.

Por otra parte, el modelo nacional concibe a la política como herramienta para la transformación, mientras que el modelo que responde al poder económico mediático del Grupo Clarín, apuesta al vaciamiento y la negación de la política, para reemplazarla por la agenda que impongan desde ese poder.

Desde esta mirada abarcadora resultan valiosas y decisivas todas las batallas políticas que se libren a lo largo y ancho del país.

En la mayoría de las provincias el triunfo corresponde y corresponderá a las fuerzas locales identificadas con el proyecto nacional. Pero en otros territorios, la victoria consiste en la construcción de espacios de confluencia que robustezcan el proyecto general, aunque los votos no alcancen para ganar una elección local.

La tensión de esta pugna, que atraviesa nuestra historia como pocas veces antes, también se manifiesta en el discurso opositor del jefe de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati.

Acompañado por Carrió, Macri, Duhalde y Alfonsín, el ruralista hizo campaña desde la oposición antikirchnerista.

El ministro de Agricultura, Julián Domínguez reflexionó: “Mientras Biolcati hablaba y mentía nosotros firmábamos en China ocho convenios para beneficiar al país y a los productores. Plantear el debate a “civilización o barbarie” representa llevar a la Argentina a la edad de piedra”

Un dato a tener en cuenta: El valor de la cosecha trepará a los 41.000 millones de dólares, el más alto en términos históricos según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal.

¿Por qué atacan entonces los patrones rurales?

Por lo mismo que ataca Macri: para demoler todas las conquistas del modelo nacional que lidera Cristina, para indultar a los genocidas, para reprivatizar Aerolíneas y las jubilaciones con la vuelta del negociado de las AFJP.

Todo esto es lo que está en juego este año.

Y por eso es una epopeya nacional.


El Argentino, lunes 25 de julio de 2011

domingo, 24 de julio de 2011

Desafíos y litigios de una épica nacional

“Yo creo que estamos ante un momento épico. Y recién comienza”.

Lo dijo Néstor Kirchner en un Seminario realizado el 25 de noviembre de 2009.

Un momento épico que no cesa. Que inspira los mejores estímulos para las elecciones de hoy en Santa Fe y para el domingo próximo en la Ciudad de Buenos Aires.

Y en las que Agustín Rossi y Daniel Filmus serán abanderados de esa verdadera gesta.

Un momento épico que no se lleva bien con la desigualdad social, con la distribución inequitativa de la renta ni con la sumisión a la desesperanza ni a ninguna potencia extranjera.

Y que sacando a luz esos litigios, avanza y profundiza el modelo con Cristina al frente.

Un momento épico que sólo admite la voluntad de triunfar en representación de los más humildes. Aunque se pierda una partida.

Aprendimos hace mucho que lo único invencible es la estrategia liberadora cuando la decide un pueblo. Ella abarca al conjunto de los factores y sujetos que se despliegan contra toda forma de injusticia.

Para esa estrategia democrática y participativa, todos los espacios conquistados tienen su importancia. A veces son completos. A veces son parciales. Pero todos son importantes.

Un momento épico que se explica desde la pasión y la identidad con la propia historia, pero que también habla como categoría política. Lejos de un mero voluntarismo cerril, se trata de entender las coordenadas que revelan esta coyuntura y la etapa política por la que atravesamos.

No habría combustión ni chispa que encienda la voluntad imprescindible para encarar las tareas de una transformación tan gigantesca como la que se desarrolla desde el 2003, sin la convicción de que somos hoy protagonistas de una epopeya nacional y popular como pocas veces aconteció en estos 200 años de historia.

La Asignación Universal por Hijo y Tecnópolis son el fiel retrato de este paradigma.

Los adversarios ya eligieron su rol: representar los intereses que son contrarios a los del pueblo y la democracia.

Son dilectos discípulos de Bartolomé Mitre.

Sus representados, no. Esos son nuestros compatriotas. Por ellos valen nuestros desvelos y preocupaciones para que andemos juntos un ancho camino de coincidencias en torno a la justicia, la inclusión social, el desarrollo económico con valor agregado, la construcción de la Patria Grande, la defensa de nuestros recursos naturales, la inclaudicable protección de las libertades públicas de todos y para todos los ciudadanos y ciudadanas, piensen como piensen.

Nadie debería confundirse en este sentido. Las proclamas de la Revolución de Mayo, las de Belgrano y San Martín, invitaban con severa constancia a que los hombres del pueblo siempre caminen juntos. Pero no negociaban convicciones ni se quebrantaban ante las dificultades. Hablaban con sus verdades relativas.

Relativas al proyecto de país justo y soberano para el que nos necesitamos unidos.

“Inflamad en el amor de la patria a todos vuestros paisanos y si todavía queda alguno que duerma con el sueño de los esclavos, invocad acerca de su libertad y este nombre que no puede oírse sin entusiasmo, libertad, lo escuchará de vuestros labios con amor”

Proclama de San Martín en los días previos a liberar Perú.

¿Lo podrán escuchar los porteños y porteñas de este siglo XXI?

Esta es la diferencia entre el proyecto nacional y popular y los dirigentes opositores que hoy se babosean por seducir a Mauricio Macri.

Nosotros tenemos una larga historia plena de humanidad.

Ellos tienen a Clarín y a Durán Barba.

Nosotros actuamos con la verdad como herramienta política.

Ellos pinchan teléfonos y ejecutan campañas que, de tan sucias, pueden enloquecer al adversario hasta convertirlo en un despojo y llevarlo al suicidio (Goebbels-Barba dixit).

Nosotros nos reconocemos en Filmus y Tomada que se solidarizan con los pacientes del Borda aunque no encuentren allí un solo voto.

Ellos se reconocen en el gobierno del PRO que derrumbó el Borda, el Gutiérrez, el Garraham y todos los hospitales públicos. Promueven la vuelta al país del “dios Mercado” y el “sálvese quien pueda” que aprendieron con Menem.

Siempre supimos que los enemigos de la democracia y el pueblo, no se andan con medias tintas a la hora de operar suciamente, en público o en privado.

Basta repasar nuestros dolores más recientes para dar cuenta de ello.

Ahora vemos de qué manera hunden el filo de su violencia en el cuerpo herido, por ausencias y desgarros, de nuestras Abuelas y Madres de la Plaza, concientes del daño que provocan contra lo más sublime que tiene este pueblo y esta democracia recuperada.

El ataque que contra ellas vienen ejecutando, montados en la traición de Schocklender y en la investigación inconclusa de los hijos adoptados por Ernestina Herrera de Noble, es brutalmente inhumano.

Miserables y cobardes todos los que se hunden en el fango de humillar a las madres de nuestros compañeros desaparecidos por la dictadura.

¿Cómo sorprenderse, entonces, que ataquen los macristas a un artista del pueblo, a un dirigente político, Daniel Filmus, a “6,7,8”, a la radio pública y ya que estaban, al padre de Filmus, a los cartoneros y a los compatriotas de la Villa 31? ¿Cómo no advertir a tiempo que aprovecharán cualquier circunstancia desde nuestras orillas pedregosas para dar un nuevo mazazo que nos desvíe la atención?

Ellos son así. Primero golpean. Después le echan la culpa al que fue golpeado. Es la vieja táctica de los miserables.

A una semana de la segunda vuelta porteña, seguimos insistiendo con nuestra nota de la anterior edición y que no por casualidad llevaba como título: “Estamos cruzando el río”.

Y lo estamos haciendo con nuestros aciertos y errores, con virtudes y defectos, con nuestras contradicciones, con nuestras dudas y certezas.

Sólo tenemos en claro que es un momento épico, como decía Kirchner, sabiendo que la victoria de un país igualitario la construye el pueblo.

¿Compartiremos de una vez y para siempre que “no hay proyecto individual si no hay proyecto de país”, como dijo la Presidenta?

Ojala así sea.


Miradas al Sur, domingo 24 de julio de 2011

viernes, 22 de julio de 2011

Macri, con Durán Barba en remojo


“Fueron Durán Barba y Macri los que usaron métodos de campaña sucia”, tronó ayer con firmeza y serenidad, Carlos Tomada.

El juez federal Ariel Lijo allanó los domicilios de tres empresas en el marco de las medidas de prueba ordenadas en la causa por la campaña electoral sucia contra Daniel Filmus.

Allegados a la causa precisaron que los operativos se concretaron en las sedes de las firmas TAG Continental, Connectic SRL y NSS, con domicilios en Libertad 1.240; en Talcahuano 446 y Virrey Ceballos 422, respectivamente.

La Justicia habría investigado y encontrado los aguantaderos desde donde se realizó la encuesta trucha contra Filmus: son oficinas ligadas a Durán Barba, el consejero de Macri.

Pero no es todo: existiría un vínculo entre esta campaña sucia contra Filmus con las escuchas ilegales que motivaron el procesamiento de Macri.

La denuncia judicial es muy grave. Y por tanto, merece una reflexión ciudadana.

La porción del electorado de la Ciudad de Buenos Aires que votó por Macri en la primera vuelta se compone de aquellos que fueron usados en su buena fe por Macri-Durán Barba y quienes aún conociendo esta asociación delictiva, decidieron acompañar igual a la fórmula del PRO.

Estamos convencidos que la inmensa mayoría de los votantes del Pro fueron víctimas de la campaña sucia.

Ahora todos estamos informados.

De aquí en más nadie podrá argumentar que no sabía.

La violencia y el cinismo se dieron de la mano en una campaña cuyo autor intelectual, Durán Barba, dice textualmente: “Hay que destruir psicológicamente al adversario. Hay que nublar su mirada con la ira para que se destruya a sí mismo”.

Léalo de nuevo por favor. Lo dicen los mismos que aconsejan “ondas de amor y paz”. Cinismo puro.

Queda claro porqué no aceptan el debate democrático: porque el fuerte de sus campañas no está en la legalidad y la legitimidad de la democracia, sino en el delito.

Se mueven mejor en la clandestinidad para pinchar teléfonos y espiar ciudadanos, para reprimir a los más humildes, para infiltrarse en encuestas telefónicas de hogar, con falsas preguntas y falsas respuestas.

“A la gente, las escuchas telefónicas no le importan un carajo”, declaró Durán Barba ante Clarín, el 18 de julio de 2010.

Por igual delito, en Inglaterra se puso en jaque al Magnetto europeo: Murdoch, renunciaron jefes de policía, cerró el principal diario inglés y encontraron muerto al periodista que hizo la denuncia.

Con los argentinos no, Duran Barba.

Por esta suciedad, TN y Clarín montan su propia campaña para salvar a Macri de la hoguera. ¿Cómo lo hacen? Poniéndole soda al delito.

En una semana, los porteños emitirán su voto: por la verdad o por la mentira.


El Argentino, viernes 22 de julio de 2011

jueves, 21 de julio de 2011

La Educación es un derecho de todos


Entonces se desperezaba el año 2009.

El calor indicaba que era el mes de enero.

La blonda señora, de bronceada piel, se abrió paso con su túnica blanca y sus ojotas playeras. Cuando vio a los periodistas, soltó la lengua con decisión y frescura: “No hay ningún acuerdo político con el PRO; son muchos los problemas de gestión en el gobierno porteño, como la falta de avance en las obras del proyecto educativo”; luego advirtió sobre los "riesgos que significa tener un predio vacío y en obra" durante tanto tiempo.

Era Elisa Carrió que inauguraba aquel año electoral recorriendo el barrio porteño de Saavedra para cuestionar al jefe de gobierno, Mauricio Macri.

Los titulares de prensa rezaban: “Carrió critica la gestión de Macri en el Polo Educativo de Saavedra”.

Dos años después, la blonda señora dice que votará por Macri.

Mientras, el Polo Educativo Saavedra, el mismo que ella denunciara por su abandono, sigue allí, más abandonado que nunca.

Recientemente aparecieron en el barrio carteles que decían: “Polo Educativo Saavedra. 3 años y medio de abandono. Basta de globos. La Educación es un derecho, no un negocio. Igualdad de oportunidades para nuestros pibes con capacidades especiales. Reclamamos el reinicio de las obras paralizadas desde 2008 de la Escuela Especial del Polo Educativo Saavedra”.

Lo firmaban UTE – CTERA y la Comunidad Educativa del populoso barrio.

Pese a la denuncia, Macri ganó la primera vuelta electoral.

¿No es doloroso?

Daniel Filmus y Carlos Tomada, los candidatos del Frente para la Victoria que enfrentarán en las urnas a Macri el 31 de julio, recorrieron ayer las obras abandonadas.

Denunciaron que el Gobierno del PRO firmó un documento en 2010 comprometiéndose a inaugurar la Escuela Inicial del Polo Educativo en marzo de 2011, la Escuela Especial en junio, la Escuela Técnica en julio y la Escuela de Música en agosto.

Para hacerlo, hay un presupuesto de 28, 4 millones de pesos aprobado por la Legislatura porteña.

Y sin embargo, Macri marcha a la segunda vuelta silbando bajito.

Nada responde a la denuncia de Filmus sobre la reducción del presupuesto educativo de la Ciudad y que “con los tres años que se subejecutó, se podían construir 240 escuelas”.

“Nos preocupa la situación de las escuelas especiales, para los chicos que más lo necesitan. La obra está muy retrasada”, afirmó Filmus.

¿Podrá Macri responder por este crimen educativo en el debate que prometió para la segunda vuelta?

Quizá lo acompañe aquella blonda señora, su más reciente aliada.

Juntos podrían explicar tanto desprecio a la humanidad.

¿Aceptará Macri dialogar para que lo puedan escuchar los pibes sin escuelas, sin hospitales, sin viviendas?


El Argentino, jueves 21 de julio de 2011

miércoles, 20 de julio de 2011

Tirando el carro para el mismo lado


“Queridos filósofos, queridos sociólogos progresistas, queridos sicólogos sociales:

No jodan tanto con la enajenación, aquí donde lo más jodido, es la nación ajena”

Así escribía Roque Dalton, el gran poeta latinoamericano nacido en San Salvador.

Esa pasión expresa la gran batalla cultural de este siglo por recuperar la nación desde los intereses populares.

No hay que darle muchas vueltas al asunto.

Se trata de consolidar la justicia social y el desarrollo económico conquistados desde el 2003 hasta el presente y preparar las fuerzas para profundizar el proyecto de país que posibilitó tal conquista.

Para eso hay que construir una nueva victoria nacional en octubre próximo.

Ya se lo conoce al adversario y mucho más, al enemigo de la democracia.

Pero si faltaba una prueba para conocerlos mejor, el caso Skanska descorre el último telón del escenario.

Nos permitimos recomendar la lectura íntegra de la conferencia que brindó ayer el ministro Julio De Vido.

Hágalo tranquilo. Cuídese la presión arterial.

Porque el ministro demuestra, con sobrados argumentos, el absoluto cinismo de la corporación mediática y los opositores que inventaron este caso para disparar munición gruesa contra el gobierno nacional.

¿Quiénes son los corruptos en esta y en tantas otras historias falsas transmitidas diariamente?: los que mienten al mejor estilo del nazi Goebbels; “Miente, miente que algo quedará”.

Dedicaron al denominado caso Skanska 15 tapas del Clarín, 14 tapas de La Nación, 4 tapas de Perfil, un total de 88 notas de Clarín, más 81 de La Nación y 119 notas en Perfil.

Esa denuncia fue realizada por el actual ministro de Macri, Esteban Bullrich y el procesamiento estuvo a cargo del ex juez y también ministro del PRO, Guillermo Montenegro.

Pero…los peritos de la Corte Suprema de Justicia dictaminaron que no hubo sobre precios por parte del Estado. ¿Sabe porqué? Porque esa empresa no realizó ninguna obra como contratista del Estado nacional durante los 8 años de la administración kirchnerista.

¿Pedirán perdón por semejante mentira?

Difícil que el chancho silbe.

En el estribo: una verdadera demostración de épica nacional y popular fue la que brindó ayer la Presidenta en su paso por Santa Fe.

Transmitió sus sueños de ver al país unido tras objetivos estratégicos que lo hagan crecer, sin importar banderías, a la hora de tirar el carro para el mismo lado.

Nosotros también tenemos un sueño Presidenta: que este proyecto liderado por Usted, de un país para todos, donde se cuide la salud y la educación como pidieron los artistas populares que apoyan la fórmula Filmus-Tomada en la Ciudad, siga avanzando a lo largo y ancho del país de los argentinos.


El Argentino, miercoles 20 de julio de 2011

martes, 19 de julio de 2011

¡Con los pibes no, miserables!


El río suena. Los vientos soplan fuerte.

Los miserables no descansan. La dictadura dejó sus huevos esparcidos.

Pero la democracia manda. Ahora y siempre.

Líbrame Dios, cualquiera sea tu nombre, de un exabrupto, de una destemplanza, de una mala palabra. Recuérdame con poner la otra mejilla cuando de mi se trate.

Pero no me libres de sentir vergüenza ni sentirme ofendido cuando de mi no se trate.

No me libres de la indiferencia cuando el agraviado no soy yo, sino un pibe, una madre o una abuela.

O un paciente en el Borda tirado en el piso, muerto de frío y desesperanza.

No me libres de pedir justicia por los 85 argentinos asesinados en la AMIA y que me llene de dolor y rabia con el gobernante que impunemente barrió el expediente para que no se investigue. Y no me libres del profundo rechazo al funcionario que mandó un espía a vigilar las víctimas.

Uno se llama Menem. El otro, Mauricio Macri.

Las Abuelas de Plaza de Mayo hicieron oír ayer su indignación: “Con las Abuelas no, Clarín”.

Allí está la noticia en todos los medios que no forman parte de la corporación.

30.000 desaparecidos y 400 pibes secuestrados por la dictadura que no aparecen.

Los ADN tampoco.

Y todo sucede aquí, en el mismo territorio donde otro pibe casi muere aplastado, en el Parque Chacabuco.

Dijo Macri en la inauguración, meses atrás: “Cada plaza, cada espacio público recuperado significa reparar una herida y avanzar en el diseño de una ciudad que en vez de expulsar, incorpora y esa es la mejor manera de ponerle freno a los que nos quieren meter miedo con la violencia”

¿Lo habrá escuchado Salvador con sus cinco añitos?

La única violencia, la única herida es la de Salvador, con fractura de cráneo y cuidados de por vida, según cuenta su mamá.

Líbrame Salvador de un exabrupto cualquiera por lo que te hicieron.

Y líbrame Zahira Morales, la niña de 6 años herida gravemente en la Plaza Almagro, con secuelas que aún desmayan su cuerpito dolorido.

Y líbrame Benjamín, el niño muerto entre las llamas en un hogar de La Boca.

Y los 1200 pibes confinados en hogares contratados por el gobierno del PRO.

Y líbrame Luisito, el bebé de 25 días que murió de pulmonía mientras dormía junto a su familia, en Cochabamba y Pichincha. Y Ludmila, en pleno centro de la Ciudad, con pocos meses de vida.

Cuando la prosa pierde la capacidad de sentir indignación, se vuelve cínica.

Cuando la política no siente indignación, se vuelve mercancía.

Hay que honrar la vida.

Hay que votar, como dice Ricardo Monti, brillante ser, con el dolor ajeno entre las manos.

No importa ganar por ganar, enseñaba Néstor Kirchner.

Sólo importa estar allí donde el dolor humano hace sonar sus campanas.


El Argentino, martes 19 de julio de 2011

lunes, 18 de julio de 2011

En la radio de las Madres

Hoy, lunes 18 de julio, de 20 a 21 hs Jorge Giles estará con Hebe de Bonafini en la Radio de las Madres AM 570

domingo, 17 de julio de 2011

La República de Tecnópolis


Si aún no visitaron Tecnópolis, háganos caso, no se demoren y concurran cuanto antes. Abre de martes a domingos.

Mire que esto no se consigue en Europa. Tampoco en otro país del continente. Y encima, es gratis.

Que ayer hayan concurrido más de 120.000 personas, es un récord histórico en este tipo de eventos.

Allí se puede ver, en vivo y en directo, la Argentina real en formato “República de Tecnópolis”, palpando el futuro con la palma de las manos, pisando fuerte el país que construimos juntos en estos 200 años.

Esto somos nosotros, los argentinos. Este es el país real.

No importa que no salga en la tapa de los grandes diarios y que TN no cubra la mayor muestra de Ciencia, Tecnología y Arte de la historia.

No se haga mala sangre por eso. Lo importante es hacer. Y seguir soñando con hacer y hacer cada vez más y mejor.

Cuando alguien nos pregunte cuál es el nombre del nuevo paradigma de los argentinos, habrá que responder: Tecnópolis.

Cuando alguien pregunte hacia donde va el país, respondamos convencidos: hacia Tecnópolis.

Cuando quieran conocer qué fuimos capaces de hacer en el Bicentenario, qué cosas inventamos, qué construimos, qué fabricamos, qué proyectamos hacia el futuro, digámosles simplemente: vayan a ver Tecnópolis.

Allí está la mejor respuesta.

Lo importante, sin embargo, es que puedan ir hasta Villa Martelli. Mezclarse y amucharse entre todos y todas, apropiarse del lugar público, sentirse más argentino que nunca, sabiendo que lo que allí se muestra es lo que supo hacer este pueblo.

Permítase vivir la sensación de plenitud.

Usted, nosotros, ellos, todos lo hicimos.

Tenía razón Oscar Parrilli, el Secretario General de la Presidencia, cuando afirmó ayer en Conferencia: “Tecnópolis es la mejor respuesta a los que viven crispados, envidiosos de lo que ocurre en otros países, sin valorar jamás lo que somos capaces los argentinos”.

Y esto es así no sólo por el volumen de la muestra en marcha, sino fundamentalmente por el clima familiar que se respira allí.

Lo nacional y popular en su máxima expresión, eso es Tecnópolis.

Macri prohibió que se realice en la Ciudad “para no dificultar el transito”.

Mentira.

Les privó a los porteños el orgullo de tener Tecnópolis porque él apuesta al pasado. Y porque sabe que un futuro venturoso sólo es posible con un modelo de desarrollo inclusivo, como el que lidera Cristina.

Sabe además que mientras se esté mostrando semejante avance tecnológico y productivo, la Ciudad quedará al desnudo con sus hospitales destruidos, con la basura en las calles, con su pobreza creciente.

Cuando a Macri le hablaron de hacer Tecnópolis en la Ciudad, seguro que respondió:

“Vayan a lavar los platos”.


El Argentino, lunes 18 de julio de 2011

Estamos cruzando el río

Hay gustos y placeres que sólo son permitidos a la historia, construida a imagen y semejanza de la voluntad de los hombres. Y las mujeres.

Veamos.

En un puñado de días se impuso la derecha más rancia y voraz representada por Mauricio Macri; fueron condenados los genocidas que desaparecieron en El Vesubio a tres dignos representantes de la cultura popular, Haroldo Conti, Héctor Oesterheld y Raymundo Gleyzer y la Presidenta inauguró Tecnópolis.

El pasado, condenado pero amenazante. El presente con memoria, verdad y justicia. Y el futuro al alcance de las manos.

Con la historia en vista panorámica, la Argentina late mientras tiembla de pavor el viejo mundo.

En este marco, el primer resultado favorable a Macri permitió a la derecha conservadora y al poder mediático elaborar una realidad virtual de segunda vuelta a nivel nacional.

Con esta falacia tienden una alfombra más ventajosa para los candidatos que representan a la corporación del Grupo Clarín que, en el intento, desplegará toda su artillería camino a Octubre. A prepararse pues.

Se viene Santa Fe y luego la última batalla por la Ciudad de Buenos Aires, donde competirá el representante más genuino y conservador del poder económico, Macri, con el candidato de las fuerzas nacionales, populares y progresistas, Daniel Filmus.

Las fuerzas nacionales no tienen más tiempo que perder. Deben atravesar el río y provocar que salga para afuera el grito de aquellos que no quieren padecer cuatro años más de gobierno macrista. Le quedan dos semanas para intentarlo.

El macrismo buscará seguir durmiendo sin barullos.

Las fuerzas populares deberán dar la pelea a cielo abierto. No hay alargues ni penales.

Después del 31 podrán venir las críticas y autocríticas, las catarsis de distintos colores, los premios y castigos. Pero ahora están cruzando el río. Y deben llegar a la otra orilla, dignos y victoriosos.

La mejor balsa que tienen es la alegría de saber que están peleando por la justicia, la igualdad y la inclusión social.

En la primera semana rumbo al balotaje, el tiempo se deslizó como arena entre los dedos. La gran aldea se tiró a dormir con la panza llena después del banquete que ofreciera Macri.

La calma se rompió cuando el exquisito autor de “Quién dijo que todo está perdido” salió por las callecitas de Buenos Aires a cantar su indignación, en nombre propio.

Lo detectó el comando mayor del “Séptimo de Caballería” y a la orden de “fuego” dispararon los flashes contra su cuerpo flaco y desgarbado, un Cristo del siglo XXI.

Cuando cayó lo envolvieron con papel prensa de Clarín y La Nación y TN entró en cadena. Mostraban la imagen de un hombre cantando, no al temible provocador inventado por el monopolio.

Una vez crucificado, había que terminar la faena del trovador nacional y popular que no dejaba de cantar, mientras sangraba de dolor: “y dale alegría, alegría a mi corazón, es lo único que te pido, al menos hoy”.

Con estos tipos no se jode, Fito.

Tendieron las emboscadas en la TV y la radio, disciplinando conductas. Que todos se abstengan de levantar al caído y repitan una y mil veces “yo no escucho a Fito Páez”.

Desde la madriguera pusieron la mira en varios blancos posibles.

A Hebe y a las Madres las vienen fusilando desde hace un buen rato.

Miserables.

Ahora eligieron a Fito por su repercusión. Y de paso le cobran el cierre de los festejos del Bicentenario.

“Fuimos millones… ¡ningún incidente!” dijo aquella vez. No le perdonaron nunca.

Si algunas almas buenas excusan piadosamente a Fito porque, al fin de cuentas, “es sólo un artista”, como quien dice “es un tipo raro”, uno tiene el derecho a dar un paso al frente y gritar a pecho descamisado: “yo también soy un artista”.

Quizá la culpa la tengan esos pingüinos que vinieron desde el sur, acalorados de pasión, desabrigados de miedos, sin importarles que los escrachen en una o cien tapas de Clarín.

Dijo Néstor: “yo no vine a dejar mis convicciones en la puerta de la casa de gobierno”. Y provocó este revuelo.

Son ocho años viviendo más libres. Es tarde para volver atrás. Nos acostumbramos a decir, pensar y escribir lo que se nos venga en ganas.

¿O gracias a quién venimos bien? ¿A Macri, a cada uno de nosotros individualmente, a Carrió, a Duhalde, a Alfonsín, a De Narváez?

¿A los que votaron en contra de todas las medidas que nos hacen sentir que venimos bien y cada vez mejor con Cristina al frente?

Leemos que “la gente vota oficialismo”. El pueblo en las provincias vota kirchnerismo y sus aliados, que no es lo mismo. Las grandes obras de Buenos Aires las hizo el oficialismo nacional. ¿O alguien puede nombrar una obra importante hecha por el oficialismo de Macri?

Leemos que “hay que articular con buena onda la ciudad con la nación”. ¿Es posible articular un proyecto de exclusión social, como el de Macri, con un proyecto de inclusión, de reparación, de derechos humanos, como el que lidera Cristina?

Leemos “la ciudad nos une”. Claro que sí; siempre y cuando esté integrada a la nación de la que se es parte. De lo contrario, la ciudad nos aísla, nos fragmenta, nos divide del país de los argentinos.

No sabemos si la relación de fuerzas permite ser optimistas en la Ciudad.

¿Pero alguien es optimista sólo cuando gana? O mejor: ¿sólo se gana o se pierde en una elección, por importante que sea?

Es en la oscuridad cuando nos encendemos más.

Habrá que abrazar a todos los que se sienten indignados pensando que, según como se vote, vendrán o no otros cuatro años con pibes que se mueren bajo el fuego en un conventillo, con hospitales que no tienen pediatras ni gas ni salarios decentes; con escuelas que se caen a pedazos y falta de viviendas.

El espacio político e institucional conquistado por el Frente para la Victoria en la Ciudad es muy importante para el proyecto de país en curso. Ahí están sus Comuneros para demostrarlo.

Además, si para los poderosos y los conservadores, la política es sólo una cuestión de caja, para los pueblos en cambio, es un asunto que atañe a la pasión humana.

Si eso sigue en pie, hay que seguir avanzando.


Miradas al Sur, domingo 17 de julio de 2011

viernes, 15 de julio de 2011


Cómo transformar en realidad el sueño de

Reconquistar la Ciudad para el Proyecto Nacional y Popular

Charla/Debate a cargo de:

Víctor Ego Ducrot, Carlos Benítez, Jorge Giles y Norberto Galasso.

Centro Cultural Enrique Santos Discépolo

Pasaje Rivarola 154 (CABA)

(a la altura de Juan D. Perón al 1300)

Para contactarse por mail con el Centro Cultural info@discepolo.org.ar

Teléfono: 4372-2358