martes, 18 de septiembre de 2012

Como el agua y el aceite




Dos noticias sacudieron ayer el ambiente político y mediático.
Dos noticias que son como el agua y el aceite. Contrapuestas. Antagónicas. Irreconciliables.  
Vayamos al grano y empecemos por la buena.
La Presidenta de la Nación propuso de candidato a integrar el Directorio de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual, AFSCA, a Martín Sabbatella.
Intendente de Morón durante dos períodos y actual diputado nacional, Sabbatella es la expresión de lo nuevo en la política argentina: claridad y honestidad en su trayectoria pública, credibilidad personal, experiencia de gestión y por sobre todo, un militante de la palabra y de la acción.    
Las suyas son cualidades imprescindibles para encabezar este tramo del proceso histórico en la democratización definitiva de los medios.
La decisión presidencial fortalece la convicción que estamos en una nueva época signada por la transparencia en la gestión de lo público.
Pero algo más: es la política quien conduce el cambio de época.
Y esta postulación lo corrobora.    
La otra noticia está llena de mugre, de miserables, fisgones, ladrones de intimidades,  espías de morondanga, falsos profetas del republicanismo y que demuestran conformar apenas, una asociación ilícita de espionaje local.
Hablamos del procesamiento dictado ayer por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado contra las personas involucradas en lo que el Fiscal Basso llamó “un microemprendimiento criminal”.
Espiaban correos electrónicos y al parecer también comunicaciones telefónicas de funcionarios del gobierno nacional, entre ellos la mismísima Presidenta de la Nación,  para luego ser utilizados como insumos básicos de información y análisis. 
El jefe de la banda, según la jueza, sería Juan Bautista Yofre, el ex jefe de la SIDE en tiempos de Menem, escritor especializado en Terrorismo de Estado y afines y lanzado a las aguas del periodismo político.
Pero hete aquí que otro de los procesados es Carlos Pagni, columnista estrella de La Nación, conocido por sus ataques permanentes al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
Y otro es Roberto García, que pasó por el diario Ámbito Financiero y actualmente se desempeña en Perfil, de Jorge Fontevecchia.
¿Le suena?
La causa maduró un tiempo largo y prudente.
Reunidas las pruebas, la justicia habló.
Le proponemos hacer este ejercicio con nosotros:
Leer la historia de vida de Martín Sabbatella y compararla después con la de estos espías disfrazados de periodistas, seudos jueces de la vida ajena, ladrones de informes que podrían afectar las relaciones externas, la economía y la seguridad de todos los argentinos.
Perdón Discepolín.
Pero esta vez los inmorales no nos han igualado.    

El Argentino, martes 18 de septiembre de 2012

1 comentario:

MIRTA dijo...

conozco a sabattella de moron, vivo ahi, el asumio siendo muy joven,nadie creia en el,pero cambio moron y ahora todos lo votamos, tengo fe en el y espero que tenga suerte en esta nueva tarea, complicada y dificil, pero si cristina confio en el es porque es un tipo honesto que no va a arreglar ni arrugar.