“Libertad a
Videla y a todos los presos del kirchnerismo”
Faltaba ese
cartel en los cacerolazos de la semana pasada.
¿Se
animarán a llevarlo la próxima vez?
¿O algún
desprevenido puede creer a esta altura del camino que el lockout de la patronal
rural, la sedición del Grupo Clarín y los cacerolazos de Cecilia Pando no
tienen como meta el indulto final a los genocidas?
Hay que
decir las cosas como son. Al pan, pan y al vino, vino.
El diario
mitrista La Nación publicó ayer la violencia explícita de los patrones rurales
que responden a la mesa de enlace encabezada por Hugo Biolcati y Eduardo Buzzi.
Pararon los camiones en la ruta, los estacionaron en la banquina y a renglón
seguido, a los camioneros que solicitaban seguir su marcha, les abrieron la
boquilla de la carga y tiraron los granos sobre el asfalto.
Esta medida
extremista fue resuelta por dirigentes de la Federación Agraria.
¿Cómo se
llama esto, Buzzi? ¿No es violencia? ¿No es saqueo? ¿No son asaltadores de caminos
los que actúan así?
Esta nueva
oligarquía representa el 2 % de la población rural, el 2 % de lo que recauda el
fisco, el 2 % de la opinión pública, pero sin embargo, ganan 2.000 % más que
cualquier ciudadano de a pie.
Los motivos
de este nuevo lockout no pasan por un pliego de reivindicaciones sectoriales
sino por querer voltear este modelo de país inclusivo que gobierna el país
desde el 2003, reemplazándolo por otro que libere al dólar, las exportaciones,
las importaciones y ya que estamos, a los civiles y militares de la última
dictadura.
No pasará
absolutamente nada mientras la ciudadanía sea capaz de construirse en
democracia, curarse en democracia, educarse en democracia, batallar ideas en
democracia.
Ni habrá
decreto de ningún gobierno, por poderoso que sea, que nos ponga a salvo de esta
casta social tan odiosa, violenta, egoísta y excluyente.
Somos
nosotros, los argentinos y argentinas de bien, los que tenemos el derecho y el
deber de defender la democracia inclusiva que conquistamos después del horror
sufrido con el neoliberalismo.
Nadie lo
hará mejor que nosotros mismos.
Ayer la
Argentina vivió ese contraste brutal entre los dos modelos de país: el del lanzamiento
del lockout rural, por un lado y el de la normalización definitiva de nuestra
YPF, por el otro.
Unos quieren
desabastecer el país y excluir socialmente y otros, como Miguel Galuccio, el
flamante presidente de YPF, aumentar la producción, incluir socialmente y
asegurar la soberanía energética.
Que nadie
pise el palito.
La mejor
manera de responder a los provocadores es garantizando más alimentos, más
energía, más conocimiento y más democracia.
Lo dijo la
Presidenta. Y nos enseña la historia.
El Argentino, miércoles 6 de junio de 2012
3 comentarios:
juan es hijo de productores agropecuarios, vive en recoleta con la platita de papi y sale con la cacerolita porque papi va a tener que pagar mas impuesto por el campo que por la chata, por primera vez en decadas.
Y para colmo, cuando tiene la guita en negro que obtuvo por la cosecha (ya que esta anotado como monotributista) la montonera de mierda no llo deja comprar dolares para blanquearla! un desastre che!
Ah, y esta contra la corrupcion, claro, porque evadir impuestos y vender produccion en negro no son corrupcion, son hechos de justicia.
Hay cada tarado dando vueltas. Y si, su lugar es exactamente donde esta: en contra del pueblo, caceroleando para ganar mas plata cagando a todo el mundo, como corresponde a un buen garca.
En esta semana voy a transitar varias rutas, al que se le
ocurra parar un camión a mi vista, más vale que tenga la
chapa de la chata tapada, porque de ahí voy derecho al
juzgado federal más próximo.
Nada Más.
Agresiones de palabra o agresiones de hecho. en vez de juicios razonados.
Si se les salta la cadena es porque el plato está descentrado o porque se gastaron los dientes del piñón. No hay otra.
Policarpo Cuaresma.
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