viernes, 4 de diciembre de 2009

EL ESCENARIO CAMBIÓ, EL PROYECTO SIGUE


El agua y el aceite, “el rejuntado” según Agustín Rossi, lograron el quórum en Diputados y el acuerdo opositor hizo cumbre.

Cinco minutos de fama, no se le niega a nadie.

El Frente para la Victoria se mantuvo unido contra viento y marea.

Y la vida siguió el curso de las causas justas.

La oposición hizo que por una noche, la Argentina se pareciera a Honduras.

Y que el Parlamento, por unas horas, fuese parecido al de la triste Alianza delarruista.

Los presidentes de América latina se parecen a sus pueblos, dijo la Presidenta de la Nación hace algún tiempo.

Desde ayer podríamos decir que el Congreso argentino también se le parece en las voces y en los silencios a su pueblo.

Cuando la pizarra electrónica marcó el quórum sin la presencia del Frente para la Victoria, todos entendimos que algo cambió en la Argentina y que ese algo se ponía a prueba en el período que empezó ayer.

Cuando la cadena de los monopolios mediáticos anunció que llegó la hora del triunfo parlamentario sobre el oficialismo, se hizo visible un retrato del precipicio que le espera a la justicia social si ese retrato permaneciera inmutable en el tiempo.

El gozo de los lenguaraces televisivos y radiales se conjugaba con el gozo de los legisladores más fanatizados de la oposición, que parecían en estado de gracia.

Hasta que entró Néstor Kirchner y sus compañeros y compañeras del Frente para la Victoria.

Y allí fue otro retrato, mucho más ajustado a la realidad que a los deseos y voluntarismos de su dirigencia.

Quedó claro que las fuerzas conservadoras que pugnan por recuperar el orden establecido desde el 24 de marzo de 1976, buscan el control del Parlamento para condicionar y si es posible acorralar al proyecto nacional y popular gobernante.

La tensión está en que el bloque oficialista se reconoce en las tradiciones de los que no se rinden palaciegamente ante nada ni ante nadie.

Ata su conducta responsable sólo al mandato popular que lo puso en el gobierno de los argentinos.

Es esa conducta la que rompe los antiguos códigos de la complicidad partidocrática.

Afuera del recinto, una multitud se reunió con ánimo de festejo, acompañando con sus consignas y sus pancartas al flamante diputado Kirchner.

La Juventud Peronista y La Cámpora, se nuclearon atrás de una enorme bandera que lo decía todo: “La Asignación Universal por Hijo es Justicia Social”.

Los canillitas fueron muchos esta vez, portando globos y carteles que decían “Derecho a la información o Monopolios de los Medios”.

Organizaciones sociales, sindicatos, agrupaciones barriales del conurbano, llenaron la Plaza de los Dos Congresos con mucho colorido. Paraguas con la imagen de “El Eternauta” cubrían una parte importante de la movilización. Pero sobresalían las remeras y los carteles con la leyenda “Néstor vuelve con la JP”

Las crónicas de la jornada son elocuentes en la descripción de lo sucedido en un día histórico, como fue el de ayer por muchas circunstancias.

Nos interesa resaltar en esta columna que el debate abierto entre los diputados en el Congreso, fue una pintura fiel de la Argentina en su encrucijada.

Si hubiese un tercer camino posible, la vida sería más calma.

Pero resulta que el proyecto conservador, que arrastra consigo el favor de presuntos “progresistas” como en otras ocasiones históricas, se muestra insaciable al momento de disputar espacios de poder. Precisan de esos espacios para desandar la vuelta de las jubilaciones al mercado de las extinguidas AFJP, reprivatizar Aerolíneas Argentinas, eliminar la nueva ley de Medios de Comunicación, anular la Asignación Universal por Hijo, anular los planes cooperativos de empleo, desandar la política exterior soberana de amistad jerarquizada con los países latinoamericanos, y otras de igual trascendencia.

Del otro lado, el bloque conducido por Agustín Rossi expresa la política de cambio del gobierno nacional.

O se está de un lado o se está del otro.

La ambigüedad, aunque nos pese, hace rato se fue de vacaciones.



Jorge Giles. El Argentino 4.12.09
http://www.elargentino.com/nota-68315-El-escenario-cambio-el-proyecto-sigue.html

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que triste todo lo que escribe ud Jorge, se ve realmente que ud describe un pais muy lindo y lleno de funcionarios nacionales honestos y capaces como G. Morenos y A. Fernandez, seguramente ud debe ser de los Argentinos a los que la inseguridad, la violencia, el no respeto por sus decisiones no lo afecta, si es asi, que lindo su país.

La China dijo...

Uh... sigue ladrando el anónimo. Se ve que se turna para escribir.

En qué país vivís vos(o querés vivir), "ANÓNIMO"?

En el de Carrió y sus alusinaciones?
En el de De Narváez y su efedrina? En el de Macri, su espionaje y su desprecio por la políticas públicas a jubilados, docentes, jovenes y pobres?
En el de Pino Solanas y su precaria plataforma electoral para la Ciudad, hablando de las minerías y los glaciares y estancado en el 45´?
En el de la "izquierda" que, de tan a la izquierda, se terminó bajando del caballo por derecha?

En el de los militares que están siendo juzgados después de 30 años de ineficiencia y complicidad de gobiernos democráticos?

Porque, si bien no vivimos en un país color rosa y queda mucho por hacer... hay que pensar en qué es posible y cuáles son los factores de poder que quieren impedir el avance en materia de políticas públicas y justicia social.

Si hablamos de pobreza e inseguridad, debemos pensar que cuando ÉSTE GOBIERNO (y ningún otro) quiso redistribuir la riqueza de las grandes oligarquías nacionales terratenientes, muchos se opusieron en busca de la utopía revolucionaria de quienes viven esperando que Marx caiga del cielo y se subleven "los proletarios contra la burgusía" para ser felices por siempre.

Entonces, cuando decís INSEGURIDAD y VIOLENCIA a qué te referís?

desde que lugar?

cómo colaborás para revertir la situación y los problemas estructurales de nuestro país?

con qué análisis político y de gestión decís lo que decís?

Este país no es de Jorge Giles ni tuyo ni mio. Es de TODOS.

Empecemos por hacernos cargo. Ojo, porque sino podemos pecar de andar libre y "anónimamente" por la vida murmurando por lo bajo, sin hacernos cargo de lo que decimos ni QUIÉNES somos. Anónimo, esa postura es estéril, individualista y dañina. Si esos son tus objetivos, al menos dejalo claro. Sino, humildemente, pensá en lo que te digo. Todos tenemos responsabilidades.

Orgullosamente argentina y latinoamericana,


La China

MeLi dijo...

grande china!!! nada mas que agregar!!!