martes, 29 de enero de 2013

Un vagón abandonado es un crimen



Hoy queríamos hablar del giro copernicano que se vivió del otro lado de los Andes, en Santiago de Chile.
Hablar del profundo significado y la trascendencia histórica que entraña la asunción de Cuba al frente de la CELAC.
Hablar de los anuncios de la Presidenta: que baja la desocupación, aumentan los salarios por la suba del mínimo no imponible a las ganancias y aumentan las jubilaciones, los créditos para la producción, las viviendas, las cooperativas de trabajo. 
Pero un vagón abandonado en Buenos Aires y una antena pública clausurada en Córdoba son la expresión del programa de gobierno que impone la derecha.
Entremos en alerta, además de indignarnos.  
Un vagón de la línea A abandonado a su suerte, no es tan sólo un vagón abandonado.
Hay historias que pujan en su interior.
Un siéntese señora.
Lo que les voy a ofrecer es apto para toda la familia.
Vamos a interpretar un carnavalito esperando que sea del agrado de todos ustedes. ¿Falta mucho para llegar a Loria?
Hay tantas historias allí. Como ese encuentro casual que terminó en noviazgo y luego en matrimonio y después en hijos y recordar que en ese vagón de madera empezó la vida.
Hay historias de fugas y contrafugas, de quedarse dormido de punta a punta de su recorrido por no tener dónde ir, de viajar temprano rumbo a la facultad y volver lleno de sueños y promesas por la noche, de perder trabajo y de encontrar trabajo.
¿Y qué sabe el capitalismo parasitario de estas historias?
Y si las sabe ¿qué corno les  importa la vida que transportaron esos vagones durante casi un siglo?
Un vagón abandonado a la intemperie es un crimen de lesa cultura.  
Allí está la prueba de la desidia del macrismo por las grandes y pequeñas cosas que hacen nuestro paso por la vida.
¿Acaso no abandonaron a una madre que acudió a la justicia pidiendo un techo para ella y su hijo discapacitado?
¿Acaso no vetaron un subsidio para ex combatientes de Malvinas y abandonaron a los pibes asistidos por el servicio de Zooterapia?
Su amigo De la Sota, gobernador de Córdoba, no se quedó atrás en el nivel de crueldad. Y ordenó clausurar la tercera antena de la TV Digital Abierta, libre, pública y gratuita, que permitiría a los cordobeses, en especial a los más humildes, disfrutar de Paka-Paka, Telesur, INCAA-TV, Canal Público y otros canales más.
Más de medio millón de personas quedaron sin la señal del Estado. Pero lo que resulta criminal es que los dejaron sin el derecho humano básico de la comunicación en tiempos de plena democracia.  
Terminó la CELAC con un pleno apoyo a nuestra soberanía: Las Malvinas son argentinas.
Los vagones abandonados por Macri y la comunicación clausurada por De la Sota, también.

El Argentino, martes 29 de enero de 2013


1 comentario:

Tilo, 71 años dijo...

La troupe de empresarios neoliberales disfrazada de Piñón Fijo que te sonríe con su careta simulando paz y amor y por detrás te caga a palos, te excluye, te espía, te delata y hace negocios para los amigotes, no se preocupa demasiado por los porteños, especialmente si residen de Rivadavia al sur. ¿Vos pretendés que muestren algún cuidado con vagones de subte de 100 años? Recordá que la primera humorada que se le ocurrió al Jefe de Gabinete Rodríguez Larreta para "sacarse de encima" a esas reliquias fue utilizar su madera para hacer un asadito.
Y lo más jodido de todo ésto es QUE LOS VOTARON 2 VECES!!!!!

Saludos