El Clarín de ayer da risa.
Advirtieron la ausencia del canciller Héctor Timerman en la
Cumbre de Chile entre la CELAC y la Unión Europea y se mostraron preocupados,
alarmados casi.
“¿Dónde está? ¿Qué le ocurrió?”
Se preguntaron arriesgando hipótesis de conflictos internos
y hasta una enfermedad del canciller argentino.
Siempre tan “positivo” el Clarín.
La canciller alemán Ángela Merker llegó a Chile y se apuró en
declarar que quería un acuerdo de libre comercio ¡ya! con el Mercosur.
Parecía una promotora comercial vendiendo desesperada sus
productos excedentes a los países emergentes de esta parte del mundo.
“Vendo, vendo, vendo”
La oposición política local da pena. Insistió con alertar
“el aislamiento de Argentina”.
La derecha chilena más furiosa, caceroleó contra el
presidente cubano, Raúl Castro.
De pronto, ¡zás!, la realidad sacude como siempre todos los
tableros de la mentira organizada.
En pantalla y desde Etiopía, apareció Timerman mostrando el
Acuerdo entre Argentina e Irán firmado con su par iraní para avanzar en el
esclarecimiento y castigo a los autores del atentado contra la AMIA. Teléfono
para Clarín.
“Histórico: Porque Memoria, Verdad, Justicia y PAZ son
valores fundantes de nuestra política internacional de nuestras más íntimas y
profundas convicciones, y lo que es más importante, del verdadero homenaje a
las víctimas de toda violencia”, tuiteó en simultáneo, Cristina Fernández de
Kirchner.
Y además declara que acordó con Dilma Rousseff, la
presidenta de Brasil, que estudiarán profunda y detenidamente los acuerdos a
implementar con la UE.
Eso sí: se tomarán su tiempo para estudiarlo.
Merkel finalmente aceptó cambiar las reglas financieras
porque así no va más.
Y Sebastián Piñera, el anfitrión y presidente chileno, dice
en la apertura de la Cumbre que hay que ampliar el horizonte de países
latinoamericanos igualando a Brasil, Chile y Argentina que son los países de la
región que más insertos están en el mundo.
Teléfono para La Nación.
Y Raúl Castro saluda a derecha y a izquierda de la pantalla
su estrenado liderazgo institucional en el nuevo continente y los caceroleros
muerden el teflón de impotencia y rabia.
La vida es así ¿viste?
La Cumbre Europa-América, sin EE.UU., instó a resolver en
paz todas las controversias que existan entre los países. Entonces, todos
miraron de reojo a Gran Bretaña.
Cual si fuera un designio fatalista en América Latina, la
felicidad nunca puede ser completa. La muerte de centenares de jóvenes en un
boliche de Santa María, Brasil, entristece a todos. El dolor de Cromañón se
hizo presente.
La dignísima Cuba queda al timón del continente.
Cambio de época que le dicen.
El Argentino, lunes 28
de enero de 2013
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