viernes, 4 de noviembre de 2011

Cristina y el orgullo nacional


Estamos orgullosos de nuestra Presidenta. Qué quiere que le diga.

Los argentinos todos, los de buena fe.

Los que sin importarles el carné partidario, se envuelven con la bandera cuando la patria llama.

Y estamos alegres por ese fugaz y eterno instante en que el protocolo internacional, poniendo las cosas en su lugar, la ubica al frente del retrato oficial en el G-20.

Fue ayer en Cannes.

En un primer plano, sitúan a los presidentes Hu Jintao, de China y Medvedev, de Rusia y en el medio de ellos, nuestra Presidenta.

¡Maldito aislamiento internacional!

Y para colmo la ONU difundió un trabajo que ubica a la Argentina entre los 50 mejores países para vivir.

No estamos “ensartados” como antes. Estamos insertados, que es distinto.

Como apreciarán, hoy estamos de remate. Locos de contentos.

Obama se acerca a Sarkozy y dice sin disimulos: “¡Nicolás, tenemos que aprender las lecciones de la victoria de Cristina!”.

No creemos en el cholulismo del primer mundo. Para nada.

Pero Clarín y La Nación nos vienen moliendo a palos la autoestima desde hace 8 años que no está nada mal un baño de orgullo nacional y popular de vez en cuando.

¿Alguien se imaginó alguna vez tener una Presidenta que en plena cumbre de los poderosos del mundo, decide celebrar como lo hizo, aquello que hace 6 años logró su compañero Néstor Kirchner, cuando le dijo a Bush: “No al ALCA”?

¿Alguien soñó con ese momento, cuando enérgica, vivaz e inteligente, Cristina llamó sin reparos a los neoliberales del mercado: “anarcocapitalistas financieros” y reciba una ovación de empresarios y trabajadores?

¿Alguien deliró con que días después de ser reelegida, la Presidenta se metería de lleno a transparentar las cuevas de la city, quitar subsidios a bancos y financieras, obligar a liquidar divisas en el país a las mineras y las petroleras?

“¡Claro que lo imaginamos, lo soñamos, lo deliramos!”, grita la tribuna.

Esta Argentina que encontró su rumbo honrando su propia historia, es la que provoca que la Secretaria General de la mayor Confederación Sindical Internacional aplauda a nuestra Presidenta y diga en su discurso: “Cristina es una luz de esperanza en un mar lleno de bruma”.

En tan digno lugar hay que ubicar las palabras presidenciales denunciando a los que hoy trafican con la “solución griega”, como lo hicieron en el 2001 con la “solución argentina”.

Que lo sepa el mundo entero: en este país soberano del amor y la igualdad, un gobierno vino al fin a reparar lo que quedaba y aún queda de dolor popular.

A menos subsidios, más redistribución de la riqueza.

Por eso el odio de TN, Clarín y La Nación.

Ya son, apenas, “el diario de Carrió”.

Como dice el tango: “mirá lo que quedó”.

El Argentino, viernes 4 de noviembre de 2011

3 comentarios:

Nelson de Congreso dijo...

Totalmente de acuerdo con vos, Jorge. Una vez mas estamos orgullosísimos de nuestra Presidenta. De su talento, capacidad, coraje, y mas allá de sus dotes de estadista, de lo excelente persona que es. Tal como Nestor. A él le debemos el rechazo al ALCA, del q se está conmemorando el aniversario. No quiero ni pensar lo q habría pasado si se hubiera aprobado.

Lucas dijo...

No me extraña nada de un panqueque como este que hoy hable maravillas de los EUA, cuando hasta hace poco lo llamaba "el imperio". Claro que no esta mal que nuestra presidente se reúna con Obama o con cualquier líder. Para eso son las relaciones internacionales. Además, lo del dólar suena más a cerrar caja que a otra cosa. Alguien puede creer en serio que la persona que compra 500 dólares está lavando dinero? Si se querían combatir las cuevas financieras, por qué no lo hicieron antes? Por qué no consultan con la policía que sabe dónde están todas y cada una? Dejen de tratarnos como idiotas. Ni Clarin ni La Nación pero tampoco las barrabasadas de Tiempo Argentino y Jorge Giles que ven conspiradores hasta en un jardín de infantes

jorge giles dijo...

Es tal cual lo decis Nelson, si hubiésemos estados encadenados al Alca COMO QUERIA CASI TODA LA OPOSICION, DESDE CARRIO A MACRI Y DUHALDE, IDA Y VUELTA, hoy volveríamos a ser el país del 2001, de nuevo seríamos Grecia y su drama social de hoy.
Un fuerte abrazo y gracias por tus palabras de aliento. Necesitamos seguir librando la batalla cultural contra los poderosos y contra sus cómplices. Saludos!!!
Jorge