martes, 28 de julio de 2009

"PROHIBIDO INGRESAR CON ARMAS DE FUEGO"


La presentación del ex comisario Jorge “Fino” Palacios, designado por Mauricio Macri al frente de la policía metropolitana y el elogio del dirigente rural, Mario Llambías, a quien fuera el máximo mentor ideológico y económico de la última dictadura cívico-militar, José Alfredo Martínez de Hoz, son dos verdaderos cachetazos contra la democracia y la memoria colectiva de los argentinos.
Ambos hechos ocurrieron ayer en esta ciudad.
¿Por qué lo hicieron? ¿Por qué semejante ofensa y provocación a las Madres, las Abuelas, los Hijos y las víctimas del genocidio iniciado por la dictadura de Videla y Massera? ¿Adonde pretendió llegar Llambías con semejante despropósito?
¿O pensará que hay tanta estupidez social como para creer su aclaración de que en realidad se refería al biceabuelo del jefe civil de la dictadura?
Llambías estaba respondiendo, precisamente, a quienes les dicen “hijos de Martinez de Hoz”; por el siniestro, no por su pariente.
Lamentable la falta de vergüenza de los dirigentes de la Federación Agraria aplaudiéndolo y los abucheos provocados por la burla de Biolcatti a funcionarios nacionales, que hicieron recordar a la humillación sufrida por el ex Presidente Alfonsín en el mismo lugar.
Otro tanto habría que reflexionar sobre la decisión del Jefe de la Ciudad, insistiendo y avanzando con la designación de una persona que, al menos, está cuestionada y sospechada de haber sido parte de la red de encubrimiento en el atentado a la AMIA. Con esa sospecha mayor más otras, también de tristes consecuencias ¿este señor será el responsable policial de la seguridad en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires?
Hay mesas en distintas esquinas porteñas invitando a la ciudadanía a firmar contra la designación dispuesta por Macri. Todos los organismos de derechos humanos están participando en actividades de repudio en la misma dirección. Hay casi una súplica de los familiares de los argentinos y argentinas asesinadas en el mayor atentado terrorista registrado en el país para que Macri desista de la decisión de nombrar a Palacios.
¿Y cómo responde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a todos esos reclamos? Presentando en un acto público al funcionario repudiado, no por “los políticos” como éste dijera, sino por los diferentes espacios sociales mencionados.
De este modo, ayer se consumaron dos movimientos convergentes desde los paladares negros de la derecha opositora, muy reñidos con esta época de dialogo democrático.
Pareciera que siguen sin entender que la democracia es ese lugar adonde los ciudadanos ingresan desarmados, para defender sus intereses económicos y sociales provistos sólo de sus convicciones y principios. Con pasión, con gritos y susurros, con vehemencia, pero no armados de amenazas como las de quienes ayer alertaron que van a la convocatoria a exigir, no a dialogar.
No pareciera ser una actitud constructiva, precisamente, la que exhibieron los dirigentes que ayer se reunieron en la Sociedad Rural.
Dispararon munición gruesa contra el Gobernador Daniel Scioli, a horas de la visita oficial que éste hiciera a la exposición de Palermo y abriera el dialogo con ruralistas bonaerenses. Parece que no valieron de nada estos gestos dialoguistas, a juzgar por los silbidos y abucheos que se escucharon en el amplio salón campero.
Quienes sí honraron el afecto de la gente en estos días, fueron los artistas populares que con mucha claridad y coraje salieron a sentar posición en defensa de la democracia. Allí están de testimonio las palabras de Leonardo Favio, de Mercedes Morán, de Federico Luppi, de Gustavo Garzón, entre otros.
Florencia Peña expresó en una frase tan ingeniosa como inteligente, lo que muchos sienten cuando se enciende el televisor y se apagan las ideas.
En el programa “678” de la televisión pública dijo ayer que a algunas declaraciones de la dirigencia de la derecha sólo le falta la imagen de una cruz esvástica, emblema de los nazis.
Para dialogar hay que saber escuchar, no imponer. Paciencia, así es la democracia.
Ya estamos grandecitos para no saberlo.


(Jorge Giles. El Argentino. 28.07.09)
http://www.elargentino.com/nota-51262-Prohibido-ingresar-con-armas.html

2 comentarios:

daniel dijo...

hola,el reconocimiento de Llambias no fue al ministro de la dictadura, sino a su abuelo el fundador de la SRA.
daniel

Chela dijo...

ja. "el abuelo"


qué miedito http://www.lanacion.com.ar/archivo/anexos/fotos/53/799753.jpg