martes, 26 de abril de 2016

Zannini



Si pudieran encarcelarnos de nuevo, lo harían con gusto, Zannini.
Si pudieran torturarnos, exiliarnos o matarnos incluso, también lo harían con ese placer que sólo sentían los verdugos de la dictadura, Zannini.
Qué pensarías Zannini cuando te acosaron primero en un estadio y horas mas tarde en un avión?
Ya se. No me digas. No hace falta. Seguramente eras vos mismo con tus 20 años y una jauría de rabiosos uniformados y civiles mordiendote los talones hasta darte caza y apresarte y matarte a golpes y picanas y vendas en los ojos y gritos de amenazas. Como los que se oían en el avión cual si fuese una mesa de tortura en la carcel de Córdoba donde fuiste a parar en tiempos de la dictadura por orden del asesino múltiple Luciano Benjamín Menéndez.
Y te la bancaste entonces y te la bancaste ahora, Zannini.
Pienso que no sólo sirve la operación del presunto "escrache" para tapar el genocidio económico de la fuga de dinero descubierta en los ya tristemente célebres Panamá Papers.
No sólo sirve esta opereta ejecutada por la cría que dejó la dictadura para tapar el descalabro social que está causando la ola de despidos, los precios de la canasta básica que se fue a las nubes, la entrega de nuestro patrimonio y el nuevo ciclo de endeudamiento con los fondos buitres del imperio.
La opereta sirve, sobre todo, para demostrarnos que las oligarquías de esta parte del mundo no volverán a tolerar un proyecto de país que se anime siquiera a intentar repetir la experiencia kirchnerista de estos últimos años.
La experiencia sirve para recordarnos que aquí manda el odio como mandó siempre que las clases dominantes gobernaron durante estos 200 años de historia.
Los siento mucho Zannini. Creeme que lo siento mucho. Que querría alas para estar con vos en ese instante y estamparles en la cara a esa derecha rabiosa que: ¡a Zannini se lo respeta carajo, como se lo respeta a Néstor, a Cristina, a Máximo, a Alicia, a Milagro, a Hebe, a todos quienes hicieron posible que vivamos un país que marchaba a ser un país de iguales como nunca antes!.
Pero en especial a vos se te respeta porque fuiste el hacedor de tan bella prosa y tan bellos poemas como los que dieron letra y corazón a la Asignación Universal por Hijo, al primer discurso de Néstor, junto a Cristina, a cinco millones de puestos de trabajo, a la recuperación de YPF y tantas otras conquistas colectivas.
A vos se te respeta, carajo. Como se respeta la vida. Como se respeta la historia. Como se respeta a los sobrevivientes del genocidio, como vos, que no devolvieron con odio tanto odio, sino con amor al pueblo. Que es al fin y al cabo nuestro único desvelo. Y es la única razón para seguir enteros pese a tanto odio nuevamente desatado desde la altura de un avión. Casi como una metáfora del poder concentrado y rapaz que hoy nos gobierna.
Y si de algo te sirve, Zannini, (deberías saberlo pero no está mal reafirmarlo en estas horas), que somos miles los compatriotas que apostamos a nuestras convicciones y que por eso cantamos y que por eso soñamos y que por eso amamos y que por eso damos testimonio de este humilde compromiso con tu compromiso de vida.
Nada más, que darte las gracias por tu ejemplo de entereza soportando dignamente el aliento de los nuevos verdugos. Y porque se acortan las palabras y se alarga el abrazo, Zannini.

viernes, 22 de abril de 2016

miércoles, 20 de abril de 2016

Para la libertad sangro, lucho y pervivo


Breve crónica del encuentro de Cristina Fernández de Kirchner con artistas y comunicadores en el Instituto Patria.
Buenos Aires, 19 de abril de 2016.
Al ingresar al Instituto, nos saludaba un amplio espacio colmado de caras conocidas y un rumor en el aire como un colmenar de abejas. Sabíamos que Cristina podía demorarse, pero no importaba. Ella venía de la Isla Maciel, de reunirse con chicos de las barriadas más humildes y con curas comprometidos con su opción por los pobres. Con ellos, vale la vida.
Hasta que apareció por el frente del salón y todos se levantaron para expresarle su amor en un abrazo colectivo que se hizo canción, consignas y aplausos emocionados. Pero Cristina decidió bajarse del escenario que le habían preparado, caminó hasta el centro del espacio y desde allí nos habló como si lo hiciera sentada en la cocina de su casa, alrededor de leños encendidos que abrigaban el alma desolada de quienes la esperaban.
Fueron dos conceptos principales los que desarrolló en su amena charla: el poder de la comunicación y la defensa de la libertad.
Descarnadamente describió, citando a don Arturo Jauretche y al vicepresidente de la hermana Bolivia, Álvaro García Linera, cómo el poder económico ejerce su dominio social en el mundo y en nuestra región principalmente, penetrando en amplios sectores populares a través de sus potentes bocinas mediáticas, para desestructurar, descontextualizar y finalmente desclasar a esos sectores, logrando se aparten del proyecto colectivo que les posibilitó ascender social y culturalmente y transformarlas luego en presas fáciles y funcionales a favor del proyecto neoliberal de los sectores dominantes. Las revoluciones aprenden más de sus derrotas que de sus victorias.
“Nada de lo que aquí se publica se decide acá”, sostuvo Cristina. “Esto viene desde muy lejos”, afirmó, mientras mostraba las tapas de dos revistas de venta masiva en Brasil y Argentina que parecían un calco: Dilma y Cristina, falsamente, con el rostro crispado.
La nueva versión siglo XXI de la “operación Cóndor” estaba a la vista de todos.
El antídoto propuesto y desarrollado para enfrentar lo antedicho, es contar la verdad desde la pasión, la emoción y la experiencia concreta que vive y sufre nuestro pueblo.
Y luego habló de la libertad al desarrollar la razón de ser del “Frente Ciudadano” que propuso bajo el aguacero el 13 de Abril en las puertas donde habita el mismo diablo, allí en la Avenida Comodoro Py.
Dijo Cristina que podríamos discutir e incluso permitirnos seguir discutiendo ante la sociedad y el gobierno de turno, cualquier otro concepto, cualquier otro derecho, cualquier otro pensamiento sobre la vida y su porvenir. Discutir por ejemplo sobre la igualdad y sobre los programas de gobierno y sobre las políticas de estado según el cristal con el que se mire. Pero hay algo sobre lo que no discutimos, ni transamos, ni flexibilizamos, ni relativizamos. Y es sobre la libertad. Para rematar afirmando: “y lo que hoy está en juego y en peligro es la libertad”. Por eso un Frente Ciudadano que reúna todas las almas libres, piensen como piensen políticamente y hayan votado a quien hayan votado en las últimas elecciones.
Con un gobierno de derechas es posible resignarse a perder conquistas sociales muy valiosas, a la espera de nuevas oportunidades políticas que permitan reconquistarlas una por una. Lo único que no nos está permitido es resignarnos a perder el derecho a ser ciudadanos libres.
Era Cristina en su plenitud luminosa. Alumbrando en medio de la noche más oscura.
Y dijo: el miedo es la antesala de la pérdida de la libertad. Y empieza a ser la nuestra, triste y lamentablemente, una sociedad con miedo.
Miedo a perder el trabajo. Miedo a que te espíen el perfil personal en las redes sociales. Miedo a que te persiga la justicia injusta al servicio de los poderosos. Miedo a que te inventen causas y salgas escrachado en los grandes medios. El miedo son los medios; y viceversa. Miedo a que no te alcance el sueldo para bancar la mesa, el desayuno y la merienda de la familia.
Para defender la libertad, entonces, hay que enfrentar el miedo.
Por eso, nada más ni nada menos, es necesario construir un gran frente que nos agrupe y exprese a los millones de ciudadanos decididos a no caernos del piso que logramos conquistar en estos últimos años.
Nuestra arma es la palabra. Y la palabra organizada es nuestra convicción y es nuestro sueño de hombres libres. “Lo demás no importa nada”, diría San Martín.
Ahora dependemos de nosotros mismos para pegar la vuelta. Cristina ya volvió, para recordar lo que enseñó Belgrano: “el miedo sólo sirve perderlo todo”. Y para decirnos que nos propongamos, para la próxima, hacer inconmovibles las conquistas sociales y hacer irreversibles los movimientos populares, más allá y más acá de sus propios líderes. Estamos todos convocados.

viernes, 15 de abril de 2016

El mismo amor, la misma lluvia



Este 13 de Abril fuimos miles de voces en las calles. Fuimos miles de miradas llorosas de emoción. Fuimos miles y miles de almas bajo la lluvia y el viento en los alrededores de los Tribunales de Comodoro Py para estar junto a Cristina. Junto a la lider. Junto a la Presidenta de todos y de todas, la que al igual que Néstor, no dejó a nadie en la banquina; más que a los fondos buitres de adentro y de afuera.
Un puñado de militantes de la generación diezmada fuimos una modesta parte de esas almas. Y no cabíamos de la emoción y la gratitud a la vida por brindarnos esta oportunidad de ser una pequeña parte de esta historia colectiva.
Nos acordamos más que nunca de nuestros amados compañeros y compañeras ausentes para siempre. Y que estuvieron presentes nuevamente.
Hoy volvió la política al centro del escenario y habló del futuro y de las asignaturas pendientes para poder construir, más temprano que tarde, un frente tan amplio y ciudadano que sea capaz de abarcar a todos los perdedores y agredidos del gobierno neoliberal vigente.
En un momento se me dio por recordar que el 14 de abril es mi cumpleaños y el de mi hija Sol. Pero faltaba un día. Y entonces, soñador al fin, volé muy alto imaginando que esa multitud de pueblo celebraba con nosotros un nuevo año de vida. Muy pronto entendí que junto a esa multitud que nos contenía, celebrábamos la vuelta de Cristina y celebrábamos la vida haciendo historia, como acostumbran los pueblos cuando ganan las calles.
Con eficaz disimulo, por semejante vuelo, me dije por lo bajo: "Salú".
Y nos fuimos cantando. Como en aquel lejano 17 de noviembre cuando volvió Perón y nos animaba, igual que ahora, el mismo amor, la misma lluvia.

sábado, 9 de abril de 2016

Reflexiones desde la calle




La supuesta "imputación judicial" a CFK se llama mediática, política y técnicamente: "Contragolpe": Se descubrió la madriguera fiscal de Macri (vía Panamá) y entonces contragolpean atacando directamente a Cristina.
Un escándalo ficticio tapa un escándalo real. Es de manual.
Hagamos docencia con lo aprendido en nuestros años de estudiantes de Derecho: un fiscal acusa y pide investigar; sólo un juez puede imputar. ¿Se animará su señoría? 
Ahora bien: esto demuestra que están decididos a todo, incluso a meter presa a CFK. Seamos concientes que en las relaciones de fuerzas palaciegas el pueblo lleva todas las de perder: no tiene un partido judicial ni al gobierno ni al poder económico ni a los grandes medios de su lado. Su única fortaleza es la calle.
Por eso, el 13 de Abril debería dejar de ser un simple acompañamiento solidario a la Presidenta a Comodoro Py para convertirse, necesariamente, en una pueblada que desde allí debería marchar a Plaza de Mayo y a todas las plazas del país para quedarse acampando hasta que Cristina hable a la multitud orientando el futuro.
O lo nuevo termina de nacer y lo viejo termina de morir; o lo viejo nos lleva nuevamente a todos puestos.
El golpe palaciego contra el pueblo está en marcha.
La llamada "imputación" del fiscal es un anzuelo con carnada podrida (harina de fariña, por ejemplo), para ver qué pasa.
Si los empoderados se quedan en su casa, si no hay reacción popular, seguramente se impondrán los injustos de la historia. Pero al revés, por eso y sólo por eso, si los empoderados, no sólo la militancia organizada, llenan multitudinariamente las calles el próximo 13 de Abril, la democracia (y no la dictadura) es la que impondrá su propio orden. La historia se aceleró. Los tiempistas del buen gusto y lo políticamente correcto, abstenerse.
Es hora de definiciones drásticas. El tiempo no lo pone sólo el pueblo. Los puso el enemigo contra la voluntad del pueblo. O se responde rápidamente o el tarifazo, el ajuste, la devaluación, la inflación, los buitres, la desaparición de la Causa Malvinas,la prisión de Cristina, se convertirán en los modernos fusilamientos contra el pueblo argentino.
Es ahora o nunca. Y lo dice un pobre y viejo periodista, maestro de escuela, militante peronista de dos siglos, con casi cien años de vida, que desconoce la presunta sabiduría de los ancianos y no apuesta a la prudente espera que aconsejan los huesos maltratados, sino que sigue creyendo en la rebeldía que imponen las convicciones.
Todos con Cristina el 13 de Abril. Todos con nosotros mismos.
Viva la Patria!

sábado, 2 de abril de 2016

Gloria y Honor a nuestros Caídos en Malvinas, ahora y siempre!



Hace apenas un año la Presidenta de la Nación encendía el Faro de la Soberanía en el Espacio de la Memoria y los Derechos Humanos.
Es, desde entonces, la luz del Museo Malvinas, el digno lugar que representa la Causa mayor del pueblo argentino.
El Museo Malvinas fue inaugurado por esa misma Presidenta en 2014.
Esa misma Presidenta había elevado a Secretaría de Estado de la Cancillería al ámbito institucional que se ocupaba de la Causa en el plano de nuestra política exterior.
Esa misma Presidenta viajó antes a Londres junto a un grupo de Ex Combatientes y Veteranos para rendirles homenaje a ellos y a nuestros héroes caídos en suelo malvinense.
Desde el primer 2 de Abril como Presidente, en el 2004, Néstor Kirchner asistió siempre a los Homenajes oficiales de este Día magno. Cristina siguió el mismo camino. Siempre.
Ambos Presidentes repararon los derechos negados durante años a los Veteranos y Ex Combatientes.
Cristina ordenó la desclasificación del Informe Rattenbach y lo hizo público. Está en el Museo.
Cristina ordenó la impresión y circulación de billetes de curso legal, con la imágen de las Islas, de su fauna y flora, del Gaucho Rivero, del Crucero General Belgrano, del Cementerio de Darwin, de los albatros y las gaviotas, como fiel Homenaje a nuestras Islas usurpadas.
Durante los gobiernos de Néstor y Cristina se impulsó el trabajo diplomático para que Naciones Unidas reconozca la verdaera extensión de nuestra plataforma continental. Hoy la patria es más grande en su extensión gracias a esas políticas. Y Malvinas está reconocida por la ONU como territorio argentino.
Habría mucho más para apuntar. Sólo queríamos reafirmar, a modo de Homenaje en días tan dramáticos como los que hoy sufrimos, que el 2 de Abril se debe recordar liberando la Patria de cualquier yugo opresor contra su pueblo. Siempre.
Lo demás es verso y es cinismo.
Hay que evitar que se vacíe de contenido esta fecha.
Hay que condenar a la dictadura cívico-militar que provocó la guerra.
Hay que honrar a nuestros muertos y heridos en combate.
Hay que denunciar al cipayo que privilegia su amistad con los piratas antes que con sus compatriotas.
El 2 de Abril debe recordarse haciendo ejercicio de la Memoria y con el Pueblo adentro.
Esa es la mejor manera de honrar a los dignos soldados que quedaron para siempre en nuestras Islas soberanas.
Hasta las Malvinas, siempre!

viernes, 1 de abril de 2016

Derechos Humanos y Malvinas


Avivar boludos



La restauración conservadora y fascista avanza en todo el continente. 
Los poderes económicos, locales e internacionales, se proponen iniciar un nuevo ciclo de endeudamiento externo y empobrecimiento general y para ello intentan eliminar las conquistas sociales y culturales alcanzadas en los últimos años por gobiernos populares en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina y Brasil. Se valen para ello de sus secuaces en el poder judicial, de sus serviles en el poder legislativo y todo bien regadito con la banca del poder financiero más rapaz y más buitre. Pero esta vez la infantería demoledora ya no son las fuerzas militares, sino el poder mediático de los grandes medios "periodísticos" que aturden a la población editando la realidad con sus mentiras y conspiraciones a mansalva. 
¿Quiénes no son permeables a este ametrallamiento mediático?: Los sectores mas avanzados en la conciencia social, los militantes políticos populares y sindicalistas honestos y consecuentes, los artistas comprometidos con su pueblo, como Chico Buarque en Brasil y Teresa Parodi en la Argentina, las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y seguramente muchos más. Pero un sector importante de las clases medias, los sectores sin conciencia de clase ni de pertenencia identitaria nacional, aquellos a los que Bertold Brecht llamó "analfabetos políticos", se tragan todo el veneno que reciben a través de los grandes medios y la basura dispersa en las redes como si fuese un jarabe contra la "corrupción" y otros males previamente configurados en gabinetes psicologicos y usinas que definen las grandes operaciones políticas de estos días. Así es que circulan "videos", "notas" "grabaciones armadas", etc. La persona honesta y conciente reacciona así: "Que mentira total lo que transmiten". Pero hay otros millones que expresan escandalizados: "Qué vergüenza Dilma, qué vergüenza Cristina, qué vergüenza Lula" creyendo todo lo que le hacen consumir.
Pues bien, allí está la tarea pedagógica de este tiempo: avivar boludos. Porque son ellos los que finalmente hacen de tropa de la derecha salvaje. En el mercadito del barrio, en el colectivo, en el subte, en el banco, en la plaza, desefundá tu verdad y por cada boludo que convenzas diariamente, la victoria estará más cerca. Porque si hay algo que aprendimos después de tantos dolores es que las revoluciones sólo la hacen los pueblos.

Querida Mary



Prefiero recordarte así por los días y los meses y los años que vendrán. Así como te vimos siempre: de pie, alentando a los compañeros, enseñando siempre con tu palabra y tu ejemplo de lucha. Por eso no voy a despedirme en tu partida. Siento que tenemos el derecho de llorarte pero mucho más el deber de intentar reemplazarte en el camino. Hay tanto enemigo enfrente que no podemos ni debemos aflojar. Te enojarías mucho, además, querida Mary.
Antes de nuestra última derrota, hace muy poco, nos dimos el placer de recorrer juntos el Museo Malvinas y trazamos allí planes para el futuro y volvimos a soñar con llenarlo de pueblo y de gurises haciendo de cada lugar que fuimos construyendo con Néstor y Cristina, verdaderas escuelas de la patria. Pero ya ves, Mary querida, tendremos que hacer un paréntesis, por ahora. El viento de la historia, como alguna vez escribimos juntos, nos irá llevando y trayendo según las circunstancias. Hoy prefiero verte así, tan luminosa y potente en esa humanidad que desbordaba tu cuerpito de gorrión. Y cantarte al oido para siempre aquella canción tan nuestra: "La historia se hace a fuego lento y el pueblo sabe que el maestro es el viento". El viento sos vos, Mary querida. Gracias por todo y hasta pronto, compañera amada.

Posdata: no te olvides de llevar tu guardapolvo blanco y un puñadito de tizas para seguir escribiendo en el cielo de los justos.