martes, 27 de enero de 2015

Ahora que habló Cristina


Cristina, seguidora de Leopoldo Marechal, siempre sale de los laberintos por arriba.
Lo demostró en su mensaje del lunes 26 de enero por la cadena nacional.
De un solo plumazo limpió la guarida donde se refugiaba el espanto y propuso crear una Agencia Federal con la impronta de una democracia que cada vez más, alcanza una mejor plenitud. Avanzó cinco casilleros en el tablero de la realidad política.  Y con su decisión, hizo avanzar  la calidad de la democracia.
Las almas buenas e inocentes, la gente de buena leche digamos, pensó por un momento que esta vez  la oposición política cerraría filas, no en torno a la presidenta, sino en torno a la defensa de la república, las instituciones y el sistema democrático.  Nos equivocamos.
Los opositores no sientan cabeza ni en medio de una tragedia política y personal mayúscula.
Decía Perón hace muchos años hablando de su propio gobierno:
"En lo interno ya no tenemos oposición, solamente opositores y opositores ofuscados...a esos opositores los hemos de vencer como se vence en las democracias: con las urnas y con los votos"
Cualquier semejanza  con la actualidad, es pura Argentina.
La presidenta, con su mensaje a la nación, acomodó las piezas desordenadas luego del estampido de la pistola 22 que terminó con la vida del fiscal Nisman.
Con esa pedagogía de docente al aire libre que demuestra siempre, puso las cosas en su lugar y terminó por resolver una deuda que es tan añeja como la democracia.
“¿Por qué no lo hicieron antes?” preguntaron los radicales bien temprano.
Y los radicales, que gobernaron mucho antes que el kirchnerismo y en dos oportunidades:  ¿por qué no lo hicieron ellos?
Luego salieron Binner, Patricia Bullrich, Mauricio Macri y así siguió la cadena mediática del desencanto, todos en el mismo sin sentido de la anti-política que es el eje ordenador que los amontona al pie de la tapa de Clarín. Por las dudas y para que se entendiera, se juntaron todos y hablaron en defensa de la ex Side.
Ayer con los buitres, con la patronal rural, con la embajada, con las corporaciones mediáticas. Hoy, con el lado más oscuro de la vida.
Copian de los peronistas su condición de “incorregibles”.
Pero una cosa es ser incorregible  del lado de los intereses del pueblo y otra muy distinta, es serlo del lado de los poderes corporativos, mediáticos y mafiosos.
La oposición reafirma su condición de enajenada y exiliada de la realidad concreta.

El kirchnerismo vuelve a demostrar que es el sentido común de los argentinos y un poquito más.

domingo, 25 de enero de 2015

Vida mía, todos somos Cristina




Nos espanta la muerte y amamos la vida por sobre todas las cosas.

Pero es cierto que, como pueblo y nación que somos, esta vez le mojamos la oreja a la muerte en los últimos años y hoy nos cobra caro.

La pucha que nos cobra caro.

Quisimos tocarle el nivel de ganancias a la oligarquía.

Quisimos decirle que No al Alca en Mar del Plata en el 2005.

Quisimos decirles que No a la extorsión imperialista de los Fondos Buitres.

Quisimos recuperar soberanamente a YPF.

Quisimos recuperar soberanamente a Aerolíneas Argentinas.

Quisimos recuperar el Banco Central para la República y para los intereses de la Nación Argentina.

Quisimos recuperar los Ferrocarriles Argentinos.

Quisimos recuperar el ahorro de los trabajadores y terminar con el negociado de las AFJP (¿te acordás Vieja?).

Quisimos tener una Ley de Medios de la Democracia y denunciar al monopolio de Clarín y La Nación y la apropiación, tortura y genocidio mediante, de Papel Prensa.

Quisimos la independencia de la Patria Grande y ayudamos junto a Chávez, Néstor, Lula y Cristina a formar la UNASUR y la CELAC.

Quisimos democratizar la justicia y así nos va.

Quisimos  ganar en Ecuador, en Uruguay, en Chile, en Brasil, en Bolivia, en Venezuela.

¿Y sabes qué?... ¡Lo hicimos!

Todo lo pudimos hacer juntos, mi vida.

Lo hicimos como nunca antes en la historia.

Lo hicimos. Lo hicimos. Lo hicimos.

Pero cuando quisimos tocar a los servicios secretos de ese viejo poder, cuando Oscar Parrilli por orden de Cristina, metió mano en la madriguera más rabiosa y oscura del poder, se levantaron en armas. Y mataron a Nisman. Y dejaron el cadáver en las puertas de Olivos.

Lo hicieron nuevamente. Lo hicieron. Ellos lo hicieron.

El misil del miedo y el terror cayó sobre nuestras cabezas.

El daño ya está hecho, dicen.

Nisman está muerto cuando debería estar hablando ante el Congreso y admitiendo que no había ni un tantito así de pruebas sobre lo que le hicieron firmar en esa falsa acusación que no aprobaría ni una prueba en el examen de ingreso de la UBA.

Y de haber hablado...otro gallo cantaría en estas horas.

Pasado el impacto, ahora vienen las preguntas sobre el daño causado con su muerte:

Los 6 de millones de argentinos que vacacionan en las playas, en las sierras, en los ríos y en los países vecinos ¿acaso se volvieron espantados de miedo a refugiar a sus casas?

NO

La onda expansiva del terror que llegó hasta Europa y los EE.UU. ¿posibilitó la derrota de Syriza en Grecia?

NO

La multitud que asiste a los Festivales folklóricos y a los Partidos de Fútbol de verano ¿Se disparó en estampida vaciando los estadios por temor a la violencia desatada en Puerto Madero?

NO 

La Plaza de Mayo y las plazas del país entero ¿se llenaron de nuevas y viejas multitudes que repudian al gobierno y aplauden a Magneto y a Lanata y a la Mirta Legrand, por ejemplo?

NO 

Esta vez no podrán, mi vida. Porque esta vez no pudieron dividir eso que se llama el "Campo Popular" y que es el mismo pueblo que en otras circunstancias de la historia cayó bajo la mentira despiadada de los poderosos y se dividió en mil pedazos, todos contra todos.

Y esta vez NO.

¿Entonces?

Impacto cero en las filas internas del proyecto nacional y popular, más que el impacto del dolor y la indignación que provoca esta muerte.

Impacto medio en las filas de una sociedad que no sale de su asombro ante la osadía tenebrosa de los que fueron siempre los dueños de la vida y la muerte y hoy están en retirada ante el avance irreversible del gobierno del pueblo.

Hay que asistir a los heridos en el campo de batalla. No hay que enojarse con ellos, sino comprenderlos y ayudarles a entender de qué lado sale el sol y en qué lado se esconde.

No podían disparar contra los millones de argentinos que colmataban las rutas rumbo a las vacaciones.

No podían admitir que debían disparar contra el crecimiento de las reservas del Banco Central que treparon en enero casi a los 32.000 millones de dólares.

No podían admitir que el único escenario electoral que se discutía socialmente era el signado por los pre-candidatos del Frente para la Victoria.

No podían admitir que debían disparar contra la gran candidata y electora de la Nación con más del 60 % de imagen positiva, es decir, Cristina.

No podían admitir que el diciembre caótico que programaron tantas veces, les pasó por la puerta de la casa sin pena ni gloria.

¿Y entonces?

Dispararon contra Nisman. O le hicieron disparar, que para el triste caso, es lo mismo.

Vida mía, el tiempo, como los vientos de la historia, sopla a favor de los pueblos en este siglo 21  que nos pertenece.

Por eso, le duela a quien le duela, hoy todos somos Cristina.

Que también es una forma de decir, que hoy todos somos Zorba, el Griego. 

lunes, 19 de enero de 2015

¿Le soltaron la mano y la mano gatilló?


Es una hipótesis válida, aunque parezca el título de un policial negro.
Lo importante en estas horas es mantener la calma, evitar provocaciones, no irse de boca por la calentura que provocan la muerte y sus caranchos interpretadores y enfrentar como siempre la mentira con la verdad.
Quien tiene la verdad no se suicida, la defiende a capa y espada.
Quien tiene la verdad, no se violenta.
Con esta muerte, la verdad, como categoría ética superior en la escala humana, pierde la gran posibilidad de mostrarse en todo su esplendor. Por eso se insistió desde el bloque de legisladores del oficialismo que la reunión en Diputados sea hoy a puerta abierta, con todo el periodismo y con los familiares de los muertos en la AMIA.
El kirchnerismo sabe que sólo se triunfa con la verdad.
Sus opositores, sólo empuñando la mentira.
El grupo monopólico mediático ya está interviniendo sobre la sangre caliente derramada. Necesitan direccionar el sentido común de la sociedad. Los mismos que lo usaron en vida, son quienes lo usarán ya muerto.
Necesitan apropiarse del muerto y de la muerte. Y entonces se lavan las manos y niegan el suicidio porque precisan afirmar que "lo mataron". Y miran al gobierno.
Por eso la escena del crimen, de aca en mas, no será el departamento del fallecido fiscal, sino los estudios en vivo y en directo de un canal de televisión.
La muerte nos conmueve, siempre. Y esta muerte pareciera hecha a medida para que conmueva a toda una sociedad. Algunos tipos son capaces de todo con tal de defender el inmenso poder del que disponen.
Si las pericias comprueban científicamente que fue un suicidio, como se sospecha, habrá que decirles a esos tipos que sembraron desde las pantallas televisivas el odio y la mentira en estos años y lo siguen haciendo en esta hora: "ustedes lo hicieron".
La verdad siempre alumbra vida.
La mentira sólo nos deja a oscuras.
Es hora de cerrar filas defendiendo la democracia, la paz social, la verdad y defender sobre todo a las únicas víctimas de esta oscura historia: los 85 muertos de la AMIA y los 40 millones de argentinos.

domingo, 18 de enero de 2015

¿Le soltarán la mano al fiscal Nisman?




Se sabe. Todo se sabe.  
En las últimas horas de este domingo 18 de enero, los capo mafias de la corporación mediática, mascullan su impotencia ante la decisión del Frente para la Victoria de asistir con sus legisladores a la reunión extraordinaria de La Comisión Penal con el Fiscal Nisman.
¿Seguirán sosteniendo el grotesco protagonizado por el fiscal? ¿O le soltarán la mano? Se preguntan.  
Es que no hay pruebas que acrediten la denuncia del fiscal Nisman contra el gobierno nacional y popular. Y no las hay, no porque sean ciertas o no  las escuchas de los 330 CD que tendría  el fiscal en su maleta; sino porque la justicia dice y la jurisprudencia avala, que ninguna cinta grabada es prueba suficiente de nada de nada.
Si la cinta fue obtenida, además, sin autorización del juez de la causa, no sirve para la causa que la motiva y puede ser, incluso, prueba de un delito mayor cometido por parte del fiscal.
El lunes 19 de enero es la cita en la Cámara de Diputados, convocada por la oposición al gobierno democrático, para que el fiscal muestre y demuestre las pruebas de su agravio a la Presidenta de la Nación y a varios de sus militantes, legisladores y ministros.
El gobierno sabe que es todo espuma.
La paradoja es que Magneto sabe lo mismo,  porque él es el  inventor de la cerveza y la espuma.  
¿Y entonces?
Este lunes 19 de enero, la tarde del Congreso se despabilará con los gritos y susurros que vengan de Diputados. 
El agua que diluye todo, lo pondrá la oposición mediocre y colonizada de Clarín para evitar, una vez más, que se llegue a la verdad verdadera.
La sal, la pimienta y el fuego lo pondrá el kirchnerismo. También una vez más.
El fiscal está acorralado y perdido. ¿Lo mandaron al frente cobrándose algún vuelto del poder? 
Quizá, quizá, quizá. 
Lo cierto es que, una vez más, la oposición está pensando en abortar esta última operación contra el gobierno de Cristina por falta de pruebas, y porque siempre supo que no había pruebas de nada de lo que se acusaba al gobierno.  
Siempre fue una operación golpista y mentirosa.   
Vayamos al contexto  (con perdón de la palabra) en que se desenvuelve esta noticia.
Récord turístico en la costa, en la montaña del sur y del norte  y en las cataratas.
Decenas de miles de vehículos  colapsando las rutas. La gente consumiendo hasta el hartazgo. Enero 2015 sobrepasa en un 15 % al enero pasado.  
No hay agua en el estanque para que intenten una nueva movida desestabilizadora.  
¿Y entonces?
Vienen de probar con el dólar blue. Fracasaron.  
Con el acoso a Boudou, fracasaron y quedaron allí, estancados.
Con la denuncia por los hoteles, fracasaron.
Con Lázaro Báez fue el peor de los finales para el Grupo Clarín: la justicia suiza terminó por absolverlo, pedirle perdón y encima devolverle 15 millones de euros incautados.
Fueron entonces a las partes íntimas y probaron con la corrida de  tampones y pañales. Y  también fracasaron.   
Bienvenidos todos al nuevo año.
Este año no habrá tregua ni descanso para nadie. El kirchnerismo demuestra ser  el último eslabón en la cadena de ADN del movimiento nacional y popular. Y como nuevo que es, prefiere caer con las botas puestas y no se rinde jamás.  Sabe que así no cae. 
Este año se decide la vida de este pueblo que somos por cien años más. Es eso lo que se pone en juego.

Magneto lo sabe y la embajada también. Es preciso que los hombres y las mujeres del pueblo lo comprendan y lo asuman. Estamos en las vísperas de una nueva victoria: la verdad volverá a triunfar contra la mentira. Es para festejar. Será un lunes para alquilar balcones. Estamos todos invitados. 

miércoles, 14 de enero de 2015

Si “todos somos Charlie”… ¿quién es Nisman?

  
Estamos atravesando una nueva fase de la operación destituyente contra el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Ni más ni menos.
Esta vez la cabecera de playa para el desembarco golpista lo constituye la grotesca denuncia del fiscal Nisman por un presunto encubrimiento kirchnerista a favor de Irán.    
Para la oposición conducida por el monopolio mediático, con tal de pegarle al gobierno nacional,  vale todo, hasta el ridículo.
Pero no por eso hay que tomarse en broma lo que está ocurriendo. Hay que saber quién es quién en esta historia para saber en qué fase estamos.
De Clarín y Magnetto sabemos mucho. Aunque aún no sabemos todo el poder local e internacional  que representa. 
Pero de Nisman, para conocerlo, hay que repasar el libro de Santiago O’Donell (“PolitiLeaks”) con los cables descifrados de la embajada de los EE.UU. en la Argentina.  
Allí se demuestra el papel de la embajada en la  investigación sobre la llamada “pista iraní” y a Nisman como el instrumento ejecutor de la línea que le bajaba la embajada; Nisman les consultaba hasta los puntos y las comas de lo que escribía en cada decisión judicial.  
Pero hay un dato recién revelado públicamente y que sorprende por su contundencia: Nisman se hizo acompañar por el famoso espía Jaime Stiusso, (sí, el mismo que hace pocos días fuera apartado de la SI (ex Side) por el nuevo titular del organismo de inteligencia, Dr. Oscar Parrilli), para convencer a legisladores kirchneristas de la no conveniencia de firmar el memorándum con Irán que permita a la justicia argentina tomar declaración a los sospechosos de los atentados en la Argentina y mucho más, señalar  la inconveniencia de viajar a Irán con tal propósito.
¿Acaso el espía sigue operando desde afuera de las oficinas gubernamentales?
¿Acaso esta operación de Nisman fue orquestada por el verdadero jefe de la campaña opositora, Magnetto?
¿Acaso fue ordenada también por la embajada?  
¿Acaso es un lanzamiento electoral del propio Nisman?
¿Acaso es parte, consciente o inconsciente, de una operación de inteligencia global que así como asesina a humoristas en Francia no duda en atacar la máxima figura institucional de la República Argentina?  
Si  “todos somos Charlie” como reza el cartel que portaban los manifestantes en Paris  solidarios con las víctimas del atentado terrorista contra la revista “Charlie Hebdo”, ¿quién es verdaderamente Nisman? ¿Y quién es Stiusso? ¿Y quién es en verdad el grupo Clarín?
Sólo sabemos quién es nuestra presidenta y el gobierno democrático que encabeza.   

Atenti muchachos: el mundo está en llamas y está buscando una salida. Evitemos que sea  “la puerta 12” que ofrece la derecha.   

domingo, 11 de enero de 2015

Después no digamos que no nos avisó

Después no digamos que no nos avisó.
Cortó la cinta de inauguración en la feria de expo-agro de Clarín y La Nación junto a la mesa de enlace de la patronal rural, los generales, coroneles y sargentos de Magnetto y de Bartolomé Mitre y Marcela Noble Herrera, sabiendo, porque lo sabe, que la disputa en este tramo histórico que atraviesa la Argentina, no sólo el kirchnerismo, se expresa en la disputa entre democracia versus corporaciones. Y el tipo sabe que Clarín es la nave insignia de todas ellas juntas o separadas.
Después no digamos que no nos avisó.
Se abrazó con la tropa de Clarín en su espacio farandulero y actuó junto a la rubia imitadora que desde el programa de Lanata humilla, ofende y basurea a la presidenta de los 40 millones de argentinos.
Después no digamos que no nos avisó.
Fue al programa de una señora despreciable de la televisión de Magnetto y a cuanto programa golpista del grupo corporativo mediático lo haya convocado.
Claro que una foto no es la causa de su diferencia con el kirchnerismo. Pero la foto es la consecuencia, el reflejo y el aviso amplificado de esa enorme diferencia que mantiene con el kirchnerismo desde siempre. 
¿O acaso una imagen no vale más que mil palabras?  
Con el ánimo de seguir invitando respetuosamente a que hagamos un análisis concreto de la realidad concreta, nos preguntamos: ¿Podría ser acaso garantía de la continuidad y profundización del proyecto transformador del kirchnerismo si su hermano Pepe y su equipo de campaña le aconsejaran hoy mismo no sacarse en adelante ni una foto más?
Definitivamente no, porque la razón primera es que él ya avisó lo que quería avisar.
La política se compone de acciones y contenidos concretos, pero también de gestos. Y una foto es un gesto. Un silencio indolente cuando esa señora despreciable comparó ante sus narices al gobierno democrático actual con una dictadura, es un gesto sciolista que equivale a colgar nuevamente los cuadros de los dictadores que el presidente Kirchner descolgó. Mirá lo que te digo. Así como una miradita sonriente cuando esa señora aplaudió la trompada a Carlos Kunkel por parte de la esposa de Luis Barrionuevo, la diputada Camaño, es otro gesto mayor que marca diferencias.
Después no digamos que no nos avisó.
Porque si tiene estos gestos y se saca estas fotos ahora y aparece como apareció junto a su equipo en el programa de la señora Legrand, no quieran imaginarse los lugares que frecuentará, los nuevos-viejos personajes que empezarán a desfilar amablemente por la Casa Rosada, el consensualismo al palo junto a Macri, Massa y Magnetto y el restablecimiento de las relaciones carnales cuando estime que ha llegado la hora de recomponer con el imperio desde una posición colonizada y obediente. 
El kirchnerismo demostró ser en estos doce años una mirada integral, inclusiva y estratégica del país federal y de la Patria Grande y no tan solo una sumatoria de aciertos económicos. En tanto expresión cultural de los sectores populares, el kirchnerismo rompe con los moldes atávicos del país de las corporaciones. Y vaya si los programas televisivos de la corporación son partes mayúsculas de esos moldes. Por lo tanto el candidato kirchnerista no sólo debe asegurar la permanencia y la profundización del proyecto nacional en lo económico, con la enorme importancia que ello tiene, sino además y por sobre todo, debe encarnar la gigantesca batalla cultural que venimos dando como pueblo en todos estos años. Y la primera condición es que sea creible encarnando tamaña proeza histórica que lo liga y nos liga como pueblo en esta hora con los Caudillos federales, con San Martín, con Belgrano, con Perón, con Evita y don Hipólito Yrigoyen, con Néstor y Cristina, con Chávez y con Lula. O sea. Con una mano en el corazón: ¿se lo imaginan a Scioli hablando de estas huellas dignas que nos honran y constituyen y que son la antítesis de su programa de gobierno que, según dijo, se resume en una frase propia de su propio cuño: "yo no me peleo con nadie"?
Es difícil que el chancho silbe. Si ya se muestra condescendiente con los poderosos y con el poder que representan, que nadie le pida después que resista a los fondos buitres como lo hizo Cristina o que avance con la ley de medios hasta que Clarín se ajuste a la ley y a la democracia. No es tan difícil darse cuenta. Sólo hay que saber mirar para no errarle al vizcachazo a la hora de votar.  Empieza a ser la hora de alisar el terreno donde empezar a construir la próxima victoria. "Ni un paso atrás" es la consigna, ahora que tenemos patria. 
Estamos todos avisados.



*Jorge Giles. 














sábado, 10 de enero de 2015

Con el corazón mirando al sur



Al sólo efecto de ser  bien educado y no irme sin saludar, quiero comunicar  a todos y  todas quienes seguían mis prosas domingueras en Miradas al Sur, que he sido notificado por sus accionistas que no podré escribir más en ese medio.
Estoy, lo saben, desde la fundación de Miradas como columnista fijo.
Eso se terminó por decisión de los nuevos dueños, según me informaron.
Ya está.
Nada de lágrimas ni reproches, aunque no voy a negar que estoy triste.
Me seguirán encontrando en las redes y en mi blog personal; algo más modesto sin dudas, pero si supimos inventar prosas y canciones en los crueles silencios de otros tiempos, ¿cómo poder evitar que sigamos enarbolando nuestra palabra de hombres dignos y libres?    
Por último y para que nadie se  confunda: Cristina es la única conducción en este hermoso lío que los argentinos  iniciamos con Néstor hace ya 12 años.
Por eso a ellos dos, a Néstor y Cristina, que volvieron a darle un sentido de pertenencia a nuestra militancia nacional y popular, les digo eternamente: ¡Gracias!  
Y gracias a Ustedes, los que esperaban mis columnas de cada domingo con un mate en la mano.  
Hasta siempre!

Jorge Giles



domingo, 4 de enero de 2015

Argentina en la tierra, como en el cielo


Las guerras del futuro se definirán en el espacio, dicen los que saben.
Y la guerra por la apropiación del agua y los recursos naturales es su preludio, dicen otros que también saben.
Pues bien, la Argentina tomó sus recaudos pacíficos al respecto y puso en órbita a 36.000 km de altura al primer satélite de telecomunicaciones enteramente argentino, el ARSAT-1.
Y además, resistió el embate de los fondos buitres de afuera y sus serviles de adentro, logrando entrar al 2015 en óptimas condiciones y sin clausula RUFO, para defender su programa de desendeudamiento externo e impidiendo que se hipotequen sus reservas de petróleo y de agua dulce.
Así en la tierra como en el cielo, el país de los argentinos garantiza de este modo cien años de paz con inclusión para adelante.
Claro, hay una sola condición para que eso ocurra: que el proyecto de país que lideraCristina Fernández de Kirchner, permanezca gobernando y conduciendo nuestro destino de nación soberana.
Así de sencillo como de complejo.
Todo fin de año conlleva el impulso de realizar balances y autocríticas. Permítannos abreviar al sólo afecto de aprovechar el breve espacio en que no estas (¡salú Pablo Milanés!) y porque queremos entrarle a las perspectivas más que al repaso nominal de los logros de este año que se fue.
Los dos hechos que mencionamos (el ARSAT-1 y la batalla ganada contra los buitres) resumen, a nuestro modesto entender, el piso firme sobre el que estamos parados.
La lista de logros alcanzados por los tres gobiernos del kirchnerismo es tan interminable como la lista de asignaturas pendientes que quedan por delante en lo social, en lo cultural, en lo político, en lo económico, en lo internacional.
No estamos, definitivamente, ante una mera gestión exitosa que sortea a los ponchazos la cola del vendaval que azota al mundo. Si fuera así, cualquier descuido tiraría por la borda desde hace rato los logros obtenidos en estos años. Estamos viviendo, por primera vez en la historia, un ciclo largo de predominio del Estado soberano y democrático por sobre los intereses antisociales de las corporaciones privadas. Con otros tres rasgos  peculiares de importancia estratégica:
1.- Hay conciencia en el gobierno nacional de estar cabalgando una nueva época y que esta vez no habrá rendición ni retorno al pasado. La cañonera y el helicóptero son objetos de estudios antropológicos.
2.- La Argentina está ubicada como nunca antes en las coordenadas correctas del nuevo mundo que emerge desde América Latina.
3.- Tenemos un gobierno que resignificó la ley de gravedad de la vieja política: desde animarse a encarar las transformaciones profundas que reclamaba el pueblo en la crisis letal del 2001 y  decirle No al Alca con apenas el 22 % de votos, hasta hacerle pito catalán a un juez municipal del imperio, un tal Griesa, que nos declaró en “default” y encima en “desacato”.
Los medios monopólicos locales y sus voceros de la oposición mediática entre gritos y susurros suplicaban al gobierno de Cristina: “ríndanse”. Y Cristina, sin faltar el respeto a nadie, no atinaba a responder: “Mirá como tiemblo”, sino orgullosamente: “Tenemos patria”.
La única lesionada en esta historia es la presidenta con su fractura en el pie izquierdo. Al famoso “pato rengo” habrá que buscarlo en las granjas anodinas de la oposición.
En este marco de grandes victorias políticas, y diríamos incluso morales, cerramos el 2014 y entramos de lleno al 2015.
Y agárrate Catalina.
Porque se viene un año donde los presagios de laureles soplan para un solo lado: para el lado de los justos, es decir, para el Frente para la Victoria.
Y eso tiene sus esperanzas, pero también sus acechanzas.    
Mientras los opositores políticos no den pie con bola, el poder corporativo saldrá de caza con escopetas de grueso calibre a crear zozobras por aquí y por allá. Cada tapa de Clarín y la Nación será un fallo judicial contra los hombres y mujeres que no se rindan a los deseos de la corporación mediática- judicial. Lo estamos viendo todos los días.
Lejos de bajar un cambio, querrán acelerar el ataque a mansalva a medida que se desaceleren las chances electorales de sus políticos de turno. 
Nada nunca nos fue fácil. Menos lo será ahora que saben que perderán más privilegios y puede ser para siempre.
No estamos solos. Además de la región y los gobiernos amigos, la vieja Europa empieza a despertar y lo hace por izquierda nacional y popular,   como corresponde.
En Grecia puede llegar a vencer el kirchnerismo griego de Syriza y en España, el del partido Podemos.
Al diablo con la teoría neoliberal del fin del Estado nación. Los argentinos nos hicimos fuertes defendiendo el valor de que somos un pueblo y una nación en marcha.
¿O no es ese el principal legado del kirchnerismo?  
En el siglo pasado se ensayó la idea, con Perón en el exilio, de restaurar los privilegios de las clases dominantes y derrotar al peronismo, imponiendo un “peronismo sin Perón”. Hoy no son pocos los desmemoriados que apuestan a un “kirchnerismo sin Kirchner”.
Sépanlo propios y ajenos: este proyecto y este modelo de país tiene marca registrada en la conducción de Cristina Fernández de Kirchner. Pero para que nadie se confunda, diremos por ahora que no se trata de ambicionar una presidencia paralela o una candidatura de amianto contra el fuego enemigo. Se trata de fortalecer y profundizar un proyecto que asegure la felicidad del pueblo y la grandeza de la nación. Y para eso, quienes vayan a suceder a Cristina deberán trabajar la misma cantidad de horas que trabaja ella y compartir espacios políticos donde, además de las responsabilidades institucionales que prevé la Constitución, haya una sola jefatura política que represente al pueblo: la de Cristina.
Esta columna se reserva el derecho a no guardar silencio. Sólo le cabrá decir y trabajar desde el lugar que ocupe, que todos sus desvelos estarán puestos en defender la alegría, la belleza, la inclusión social y la soberanía.
Y eso es defender a la Argentina y a Cristina para este humilde escriba.
Feliz Año para todos y todas.


Miradas al Sur, domingo 4 de enero de 2015