domingo, 31 de mayo de 2009

¿QUÉ PARTE DEL "NUNCA MÁS" NO ENTENDIERON?

Grupos minoritarios identificados con la oposición y la patronal rural, atacaron físicamente al Gobernador Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires y nuevamente, al Diputado Agustín Rossi en Santa Fe.
Así no va. Si no tienen propuestas ni coraje cívico para debatir democráticamente, no los reemplacen con huevazos ni agresiones físicas. Eso se llama fascismo, acá y en cualquier país del mundo.
Hay que pararlos ahora antes que sigan escalando en su beligerancia antidemocrática. Los huevos, las piedras, las rastras no entran por la boca de las urnas.
Tendrán que convencerse que el pueblo argentino recuperó la democracia de la garra de los dictadores hace 26 años y lo hizo para siempre.
¿Qué cosa no entendieron del “Nunca más”?, como reza un cartel de la juventud.
Persisten en una intolerancia rayana con el crimen.
Para colmo, ensayan por estos días una nueva versión de la “teoría de los demonios”.
Critican tibiamente a los ruralistas agresores, pero condenan con toda dureza a las víctimas de aquellas agresiones.
Flor de vivos los opositores, en especial los que estaban acostumbrados a usar al Estado a su antojo total, desde Martínez de Hoz en más.
Para ellos tiene más culpa el funcionario agredido que los cobardes agresores.
Cuando secuestraban niños, trabajadores, estudiantes, en tiempos de la dictadura, seguramente repetirían esa retahíla inhumana del “por algo será”.
No son hechos aislados. Habría que remontarse a la silbatina violenta contra el Presidente Ricardo Alfonsín en la Sociedad Rural, las declaradas armas escondidas que llevaban a los piquetes rurales en las rutas, según Alfredo De Angeli, el desabastecimiento y el desgaste al gobierno democrático confesado por Eduardo Buzzi, el dialogo protogolpista de Hugo Biolcatti, presidente de la Rural, con Mariano Grondona, los ataques reiterados a los Diputados nacionales Cantero en Córdoba, Aignasse en Tucumán, Agustín y Alejandro Rossi en Santa Fe, Patricia Vaca Narvaja, los insultos reiterados ante las visitas de la Presidenta a distintos lugares del interior del país.
Hay más, pero estos ejemplos valen como botón de muestra del caldo de cultivo que los incuba.
Es tiempo de democracia. Es tiempo de confrontación de ideas. Es tiempo de decirle la verdad a un pueblo que sólo busca construir su propio modelo de país.
¿Quiénes son los violentos en esta historia? ¿Los que gobiernan todos los días y muestran lo que hacen sin agraviar a nadie? ¿O violentos son los que ofenden la investidura oficial que, guste o no guste, es una institución de la República y por tanto pertenece a todos los argentinos?
Hay un programa tradicional de almuerzos televisivos que causa indignación por el nivel de agresividad con que tratan a cualquier invitado del oficialismo. Son monárquicos absolutistas en su manejo despótico y racial de la palabra.
¿No saben guardar respeto por las buenas costumbres ni a la hora de compartir una mesa con invitados?
Menos mal que el sistema democrático goza de buena salud al punto de ser capaz de tolerar y encauzar estos desmadres violentos. Es una buena noticia para la democracia.
Nadie podrá decir que este gobierno responde con el “ojo por ojo, diente por diente”.
Al contrario, el modelo nacional y popular que gobierna, acusó la afrenta invitándolos a reencauzar el diálogo democrático. Pero eso sí, hay que aislar a los violentos, a los soberbios, a los reaccionarios, a los que apelan a los piedrazos porque ya no tienen cuarteles para golpear las puertas.

El Plan de Viviendas del Banco Hipotecario anunciado por la Presidenta es un éxito social para compartirlo generosamente por toda la ciudadanía. Es para estar esperanzados con ese solo dato y con el que indica que el consumo interno creció más de un 20 % respecto al año anterior. ¿Por qué la agresión entonces?


¿Quizás por que ahora las encuestas coinciden en que la lista encabezada por Néstor Kirchner ganará por una marcada diferencia en la provincia de Buenos Aires y que en la ciudad de los porteños, Carlos Heller avanza vertiginosamente en las preferencias electorales?
Todos deberíamos aprender a valorar y cuidar la democracia que supimos conquistar a costa de tantos dolores. Más allá, incluso, de las próximas elecciones.
Sólo aprendiendo a convivir y compartir civilizadamente, desterraremos el odio que aún perdura en algunas minorías.






(Jorge Giles- El Argentino. 31.05.09)

Las agresiones contra el Gobernador Scioli y el diputado Rossi, son la expresión más retrógrada de un sector social minoritario, violento y autoritario. Así es el fascismo. A las ideas contrarias, responden sólo con violencia. ¿O no actuaron así a lo largo del conflicto de las patronales rurales contra el Gobierno?
Esos violentos perdieron la brújula cuando perdieron el control arbitrario del Estado en favor de sus intereses económicos. Agreden, precisamente, porque se muestran impotentes ante un modelo de desarrollo inclusivo que tiene como eje la redistribución equitativa del ingreso. No lo pueden tolerar, quienes siempre se creyeron los dueños exclusivos de un modelo de país para unos pocos.
Deberían aprender a convivir en democracia.
Las fuerzas políticas de derecha que los representan, la Coalición civica radical de Carrió y Stolbizer más el Pro de Michetti y De Narváez, atizan en cada discurso de campaña un anacrónico gorilismo que termina por ser un verdadero caldo de cultivo de conductas reaccionarias que tanto daño hicieron en este país.
En lugar de condenar sin ambigüedades estos ataques, hoy declaman una nueva versión de la “teoría de los dos demonios”.
Critican tibiamente la agresión de los ruralistas, pero condenan duramente a quienes resultan ser las victimas de la agresión. Es una vieja manera de justificar la violencia con la letanía cruel del “por algo será”, repetida durante la dictadura.
Conforman así, un coro de exegetas del viejo modelo de acumulación primaria, sin valor industrial agregado, sin trabajadores, sin producción nacional, sin mercado interno, que para hacerse notar, siguen convocando a los peores fantasmas del pasado.
No es ocioso recordar que el Gobierno jamás utilizó la represión estatal para impedir los innumerables cortes de rutas.
Habrá que estar muy atentos para evitar por todos los medios cualquier provocación.
Cierta derecha es experta en provocar violencia cuando quiere reconfigurar el cuadro de situación política. Así en el campo como en la ciudad.
Es posible que la intolerancia de estos sectores minoritarios se mantenga en tanto los indicadores nacionales sigan mostrando el crecimiento de la intención de voto para el oficialismo. “No hay que pisar el palito”, debería ser la consigna de los sectores democráticos.
La trepada de Carlos Heller en las encuestas, estaría indicando que los porteños entienden que en su ciudad, también compiten dos modelos de país. El que representa el macrismo y Prat Gay por un lado y el que encabezan Heller y Tito Nenna por otro.
La tarea entonces, es defender entre todos el derecho del pueblo a elegir su destino, en paz y en democracia.
(Jorge Giles- Miradas al Sur, 31.05.09)

viernes, 29 de mayo de 2009

LA SEGUNDA FUNDACIÓN DE LA ESPERANZA

Alguna vez fuimos plenamente felices en este país.
Y ese dato histórico es el verdadero hecho maldito para los injustos que buscan atrasar todos los relojes. Porque en algún lugar de la memoria colectiva quedó impregnado para siempre el valor del trabajo, de las vacaciones pagas, del salario familiar, de las Convenciones Colectivas, de la Salud y la Educación Pública.
Fuimos tan felices que el ingreso se repartía por partes iguales entre trabajadores y empresarios y por si fuera poco, fuimos plenamente soberanos como Nación.
No es un dato menor. Porque ese pasado nos remite al futuro que queremos construir.
Si alguna vez fuimos felices, podemos volver a serlo.
¿Cuál es la clave para lograrlo nuevamente? Son muchas, pero sin dudas que la voluntad política de los gobernantes de fundar por segunda vez la matriz de un país industrial, inclusivo, desarrollado, integrado, es la primera de esas claves.
Es la voluntad del proyecto político gobernante la que define el rumbo. El que gobierna es el que hace y guía la nave hacia buen puerto.
O como ya nos pasó, la encalla en aguas peligrosas, hasta que se hunda.
Una segunda clave es el rol que se le asigna al Estado y una tercera, es la voluntad del pueblo.
Las condiciones para cambiar la historia de desencuentros están.
Superar, como lo hicimos, la crisis del 2001 y 2002, la crisis más grave que hayamos sufrido, y emprender una ruta de navegación favorable al desarrollo nacional, es algo para compartir entre todos los argentinos, piensen como piensen políticamente.
Pero lamentablemente no ocurre así.
No todos sienten orgullo nacional por tener un gobierno que, mucho antes que Barack Obama, planteara que de la crisis causada por el neoliberalismo sólo se salía con más trabajo, más producción, más consumo.
No es un burdo chauvinismo aceptar como posible al menos, lo que dicen otros políticos y gobernantes extranjeros, de que la Argentina va camino a volver a ser uno de los diez países más desarrollados del mundo.
Si este modelo prospera, no tendrá techo en su expansión, porque precisamente su meta es el pleno empleo, la redistribución equitativa del ingreso, la sustitución de importaciones, la producción nacional.
Al contrario, otros modelos se identifican, por el corsé que imponen al crecimiento.
Por eso los opositores hablan de “enfriar la economía”, como reclamó hace un tiempo Prat Gay y Carrió. Es coherente con su mirada del mundo. La misma visión que tiene Francisco De Narváez, el candidato que fuera principal asesor de Carlos Menem en las presidenciales del 2003.
Es parte de la política de siempre, dicho con total objetividad.
La memoria les juega en contra.
Es increíble cómo malgastan sus días de campaña con ese bochorno de las impugnaciones, sin presentar propuesta alguna para poder analizarlas, compararlas, valorarlas.
¿Se habrá enterado la oposición que la Presidenta inauguró ayer la firma del Contrato de Construcción de la línea eléctrica Comahue-Cuyo, que constituye una de las obras estructurales más importantes de las últimas décadas?
Sume usted, una línea de alta tensión que lleva energía a los pueblos más lejanos a un sueño colectivo y le dará un país.
Sume además el dato que revela que las ventas en los supermercados crecieron en el último año, el 20, 6 % y agréguele una pizca de esperanzas, y tendrá una sociedad que está viva.
Sume ahora la incorporación de más de 4 millones de nuevos empleos y la incorporación de más de dos millones de nuevos jubilados con el crecimiento del turismo nacional y ahí apreciará usted que este país se ha puesto de pie nuevamente.
El contexto no es un lecho de rosas. Somos parte indisoluble de un mundo que se desploma. Y seguimos sufriendo las ondas expansivas de la crisis que dejó sin tonicidad ni representación social a muchos de los partidos políticos tradicionales.
En ese contexto, hay un proyecto político nacional, hay un modelo de desarrollo con inclusión social y hay un Estado que se puso nuevamente del lado de los humildes y de los que apuestan al mercado interno.
Ahora viene usted. Y usted. Y usted. Porque no hay magia en los asuntos del destino de una nación. Es el pueblo el que en definitiva valora lo que sus gobernantes hacen o dejaron de hacer a su debido tiempo.
En apenas cinco domingos, este pueblo que somos hablará a través de su voto.
Esa será la palabra definitiva.
(Jorge Giles- El Argentino, 28.05.09)

jueves, 28 de mayo de 2009

SIN UTOPÍAS NO HAY MODELO DE CAMBIO POSIBLE

Ahora sí entramos en la recta final. En apenas un mes, todos seremos artífices de nuestro propio destino en la soledad de un cuarto oscuro.
Como bien grafica Néstor Kirchner, el ronroneo siniestro de un helicóptero huyendo en medio de la tragedia, rondará nuestra memoria al momento de emitir el voto.
Nuestra madurez como sociedad y la democracia que conquistamos, lo hizo posible.
Es para alegrarse si recordamos que desde hace dos siglos, estas disputas eran causa de otras tragedias mayores. Hoy se resuelven, votando.
Pero sentimos que, al compás de la movilidad social ascendente, aún nos falta ascender en nuestros sueños colectivos.
Si no hay utopías, no hay modelo de cambio.
Lo saben los exegetas de la máquina de impedir. Los que levantan muros a nuestras espaldas, para que las nuevas generaciones no vean que hay una larga historia que nos precede a todos.
Están entre nosotros. Los vemos y escuchamos todos los días. Son los que ofenden las buenas costumbres y el respeto hacia el otro. Ellos no discuten, insultan. No opinan, adoctrinan. Son intolerantes hasta con el aliento del otro. Tratan de meter miedo todo el tiempo. Corroen la confianza pública. Todo está mal. Nada sirve. Nada alcanza. Atrasan. Provocan. Deforman. Insultan. Olvidan.
Están los analfabetos políticos, que como decía Bertold Brech, son los peores analfabetos. Los que repiten mecánicamente todas las malas ondas que dispara el agrio comentario de la tele, de la radio o del diario opositor.
La muletilla es “Si lo dijeron en los medios, por algo será”.
“Por algo será”, letanía que viene de las catacumbas de la dictadura.
Están los “gatafloristas” a los que nada de lo que haga Cristina les viene bien.
Si se adelantan las elecciones, dirán que es sólo una excusa para dejar de gobernar.
Si el gobierno, en cambio, continúa sus obras, gobierna, decide, anuncia nuevas medidas en favor del pueblo, anuncia un nuevo Plan de viviendas, defiende el empleo, entonces dirán que el Gobierno está haciendo campaña electoral con las medidas de gobierno.
Si hace por que hace. Si no hace por que no hace.
Están los que extrañan el pasado neoliberal y regresan a la escena del crimen social cometido para reiterar la misma profecía. Los que son parte de la cofradía cívica proscriptora, los que festejaron la prohibición de decir “Perón y Evita”, esos, gastan los únicos cartuchos electorales que parecen tener, en impugnar, aquí, allá, acá.
Los que fueron funcionarios de la timba financiera, muestran síndrome de abstinencia con el FMI.
Prat Gay y Carrió, por ejemplo, piden volver al Fondo como parte de su campaña electoral.
Pero el huevo de la serpiente sigue anidando en nuestras derrotas culturales, como nos enseñó Nicolás Casullo. Buscan impedir cualquier intento de reunir los pedazos de este pueblo disperso, disuelto, descuartizado por los dictadores y por los neoliberales civiles que son su cría.
Las páginas de algunos medios periodísticos, delatan sólo resentimientos. Algunos parecen escribir y hablar a los latigazos, por el odio que destilan.
La historia precisa consolidar un modelo de país que se base en el trabajo, en el valor del Estado al servicio del pueblo, en los lazos de solidaridad.
Como dijo la Presidenta, hace falta una gesta, pero una que defina el perfil productivo y social del país para los próximos cien años. Un país industrializado, soberano, democrático, inclusivo e integrado socialmente, con trabajo y consumo interno.
Hay que estar atentos porque el modelo neoliberal duerme entre nosotros, en la cabeza de muchos compatriotas. Hasta allí penetraron y desde allí resisten.
¿Qué hacer entonces?
No bajar los brazos, insistir más que nunca con la pronta sanción de una nueva Ley de Medios de la democracia, ser sus apóstoles, defender la alegría y la palabra y combatir los monopolios mediáticos para que no se sigan adueñando del sentido común de los ciudadanos.
Un nuevo modelo de país no pasa solamente por variables económicas más o menos exitosas en lo social. Debiera pasar, por sobre todo, por un modelo de vida donde los argentinos empecemos a querernos, más y mejor, entre nosotros mismos.
Es esto lo que está en disputa. Y para lograr la victoria, es necesario seguir soñando con un país mejor.

(Jorge Giles . El Argentino, 28.05.09)

miércoles, 27 de mayo de 2009

LA SARTÉN POR EL MANGO

El de ayer fue un día donde se le pudo contar las costillas al modelo gobernante.
Por la mañana, Néstor Kirchner visitó a los trabajadores de la fábrica recuperada en Quilmes, la ex Papelera Massuh.
Antes, sólo la tenaz militancia de los trabajadores defendía su fuente de empleo. Hoy, es el Estado el que se ocupa, con ellos, que la crisis no la paguen sólo los trabajadores.
Allí está una maqueta vívida del modelo nacional y popular que gobierna, en esa fábrica que ha vuelto a latir nuevamente.
Allí donde el neoliberalismo sólo veía la eficiencia del libro contable, este modelo ve personas de carne y hueso, sufriendo o viviendo con dignidad.
Por la tarde, la Presidenta inauguró un complejo fabril junto al Gobernador bonaerense, Daniel Scioli y por la noche anunció un Plan de Créditos para Viviendas a través del Banco Hipotecario.
Mientras tanto, la oposición siguió hablando contra el Gobierno.
Estamos viviendo una etapa histórica y es para estar orgullosos de nuestra argentinidad, porque mientras el mundo tiembla, nuestro país recupera el crédito, defiende el empleo y nos devuelve el derecho a tener una vivienda propia.
Una sociedad se integra cuando hay trabajo y los que trabajan pueden acceder a tener una casa para su familia.

Nos fuimos a la banquina con la decisión judicial de habilitar a un preso por crímenes de lesa humanidad para ser candidato en las próximas elecciones.
¿Dijo algo la UIA? Porque es claro y sencillo entender que la legalización de la candidatura de Luís Patti, daña el espíritu de la institucionalidad democrática.
Asquea. Rebela. Indigna. Duele.
¿O sólo se escandalizan cuando les afecta el bolsillo?
Algunos opositores políticos, empresarios y medios periodísticos, parecieran creer que Caracas está ubicada geográficamente camino a Quilmes o en alguna otra localidad de una provincia argentina. El Presidente Hugo Chávez estatiza empresas allá y ellos protestan acá como si un ladrón les hubiese entrado al living de la casa.
Sin evaluar en detalle las medidas adoptadas por el Gobierno de Venezuela, nos adelantamos a afirmar que es ante todo una medida soberana de un gobierno soberano, elegido por el voto popular. Responde al período social, político y económico que vive Venezuela.
El estado caribeño, desindustrializado y empobrecido por la clase rentística y corrupta que se enriqueció con el petróleo en el último medio siglo, pareciera encaminar su rumbo a través de un modelo semejante al primer peronismo, recuperando aquellas empresas privadas y trasnacionalizadas que resulten, en su criterio, necesarias para la etapa de cambio que encaran desde la asunción del Presidente Chávez.
“Atraviesan el pre-peronismo”, afirmó el Ministro Florencio Randazzo.
Si fuese así, habría que agregar, entonces, que la oposición política en la Argentina y los sectores económicos que estuvieron acostumbrados a tomar la sartén por el mango desde siempre, también demuestran ser parte de aquella etapa predemocrática.
La Unión Industrial, llegó al colmo de reclamar la ruptura de relaciones mercosureñas con Venezuela. La UIA pareciera estar dirigida por Elisa Carrió, con afirmaciones tan desmesuradas como la que emitió anoche.
Es que la líder de la Coalición radical de derecha sigue apelando al terrorismo verbal para hacer campaña. Trata de meter miedo en una sociedad que ya lo padeció con la dictadura y, en democracia, cuando imperó el neoliberalismo expresado por el menemismo y la alianza delarruista.
La clase media va al paraíso con el modelo nacional y popular. Ya no está en el corralito ni en el corralón, ya no ve amenazados sus depósitos y ahorros, incrementó el goce merecido del turismo, aumentó el consumo interno, recuperó el crédito y ahora se ve favorecida por este Plan de Viviendas anunciado por Cristina.
Por eso Carrió y asociados disparan contra la clase media, empujándola a asociarse a los poderosos y divorciarse de los sectores populares.
Una vieja y triste historia de desencuentros que causó tragedias cuando así ocurrió.
La memoria es el antídoto contra tanto odio.
Usted podrá enojarse o enamorarse con este modelo de desarrollo, pero no podrá negar fácilmente que la realidad está indicando que ahora el mango de la sartén está sostenido por el Gobierno de la democracia. Y eso es bueno para el pueblo, mucho más allá del gobierno de turno.

(Jorge Giles - El Argentino. 27.05.09)

martes, 26 de mayo de 2009

FLOJITA DE PAPELES

¿Se imaginan a los opositores gobernando con la misma desprolijidad con que armaron sus listas en la Provincia de Buenos Aires?
Primero fue la Coalición de Carrió y Stolbizer, con el escándalo del Intendente de Pergamino, candidato de Julio Cobos, afectado por una causa de prostitución de menores. Un escándalo total para quienes impulsan el denominado “contrato moral”.
Después aconteció la situación dudosa de Francisco De Narváez, en relación a la causa del tráfico de efedrina, que sigue abierta. Otra vergüenza para la democracia.
Y ahora, los mismos que desde la lista del Pro de Macri y De Narváez atacaban al oficialismo por las llamadas “candidaturas testimoniales”, son puestos al descubierto por la Justicia, con candidatas mujeres, flojitas de papeles. El pez por la boca…
A falta de constancias domiciliarias, acusan al gobierno por no tener sus propios papeles en regla. Son sus papeles. Son sus documentos los que debieran estar en regla. No lo deberían politizar todo. Ni ponerse en víctimas de sus propios errores.
Nadie las impugnó. Fue la Justicia la que revisando los mismos requisitos que se le exigen a todos los candidatos, se encuentra con que no acreditan su domicilio en la provincia en los dos últimos años. Punto y aparte. ¿Por qué se ponen así de nerviosos? ¿No es mejor subsanar legalmente la presunta falta y salir rápidamente hacia adelante?
Tampoco nadie denunció a De Narváez desde la política. Fue él mismo el que se presentó para aclarar sobre una publicación que daba cuenta de los llamados desde su celular al “rey de la efedrina”. Allí saltó todo hacia afuera.
En tanto, el Frente para la Victoria, encabezado por Carlos Heller y Francisco Nenna, recorrió ayer la Feria de Mataderos. Dos datos significativos para remarcar. La presencia entusiasta de muchos jóvenes acompañando a los candidatos oficiales y la espontánea y masiva adhesión del público ante la presencia de Heller.
Pareciera advertirse un vertiginoso cambio en el humor político de los porteños, que en el tramo final de la campaña definen sus preferencias entre dos modelos opuestos. El representado por la candidata macrista, Gabriela Michetti y el modelo gobernante que representa Carlos Heller.

La Presidenta, acompañada por sus Ministros y varios Gobernadores, celebró la Fiesta Patria en Iguazú, Misiones, en la puerta de la Patria Grande, allí donde la naturaleza estremece con sus bellezas. Allí donde la tierra roja llega hasta Yapeyú, cuna del Libertador José de San Martín. Por donde anduvo Artigas y el Comandante Andrecito Guacurarí que lo acompañaba al frente de su pueblo guaraní. Donde estuvieron las Misiones Jesuísticas con su profundo valor histórico. Por allí cerca anduvo Manuel Belgrano y sus Campañas al Paraguay.
A 199 años del 25 de Mayo de 1810, es una Presidenta argentina quien llama a construir una nueva Gesta nacional, desde ese territorio de la patria. No es casualidad que lo haga allí donde la Patria huele a selva, se oye en el bramido de los saltos de las Cataratas y llena los ojos con su paisaje de flores y tucanes.
La Patria se hizo gesta cuando Belgrano fue para el Norte a defender con el cuero sus ideas. Igual que Castelli. Igual que Moreno, escribiendo con la pluma del sueño revolucionario, su Plan de Operaciones.
Todos ellos se adelantaron 200 años en alumbrar los mismos caminos que, con sus matices de época, hoy seguimos recorriendo. Fueron ellos los que promovían la construcción de escuelas y fábricas, los que no se conformaban con ser parte de una comarca de estancieros y terratenientes sin la preocupación de agregar valor agregado a la producción primaria.
Esa primera Gesta patria fue interrumpida una y otra vez por quienes tienen su interés en hacer de este territorio un país para pocos, de materias primas a secas, sin industrias, sin producción nacional, sin empleo, sin consumo interno. En las antípodas del pensamiento y la acción de nuestros próceres.
Esa historia es la que fundamenta la percepción que el 28 de junio próximo no se vota por una lista de candidatos, sino por un modelo de país.
En las huellas de la historia, está escrito una parte del futuro. La otra parte, aún está por escribirse.



(Jorge Giles - El Argentino. 26.05.09)

jueves, 21 de mayo de 2009

EL OLVIDO ESTÁ LLENO DE MEMORIA

Así sentenció en un bello y profundo poema ese poeta mayor que fue y será Mario Benedetti. Alguien lo recordó ayer a propósito de la asunción de Jorge Rivas a su banca legislativa. Todo era memoria en ese recinto. Y era también un niño saltando de alegría por la vuelta de Jorge, conmoviendo a todos porque era la imagen perfecta de la alegría en estado de pureza y las ganas de un futuro mejor para todos.
La presencia de Néstor Kirchner, acompañando a Rivas, completó la trascendencia política de tan emotivo acto en la Cámara de Diputados de la Nación.
Volvió Jorge Rivas y fueron muchos los que coincidieron en la sensación de estar asistiendo a un nuevo milagro de la vida.
Otro hecho de trascendencia, aunque muy diferente, lo constituyó el rechazo judicial a las impugnaciones de la oposición a las candidaturas de la lista encabezada por Néstor Kirchner. ¿Qué respondió la Coalición cívica radical? Que van a seguir adelante con la apelación ante tribunales superiores.
Uno se pregunta azorado ¿no les da vergüenza? ¿No pueden superar de una buena vez al pasado de proscripción y destierro contra el movimiento popular que marcan su historia partidaria? ¿No les alcanzó? ¿No es más coherente para quienes se dicen “demócratas” dejar que sea la voluntad popular y democrática la que decida con su voto?
Pareciera que conciente o inconcientemente, apuestan al regreso del voto calificado. Es lamentable, pero no aprendieron nada de su propia historia.
Desde que se supo que sería el propio Néstor Kirchner, acompañado por el Gobernador Daniel Scioli, quien se presentaría a la compulsa electoral próxima, se le volaron todos los pájaros a los opositores. ¿No eran sinceras entonces las declaraciones altisonantes de muchos de ellos cuando alegremente afirmaban que “preferían enfrentar al propio Kirchner en las urnas”? Lo decimos por si se olvidaron. Está documentado, además, en los archivos periodísticos.
No nos corresponde entrar en los argumentos ponderados desde el campo estrictamente legal. Estamos convencidos, por otra parte, que esta es una cuestión absolutamente política y que la principal víctima es la democracia. Porque la democracia, cuando es plena, siempre tiende a ensanchar su camino, a profundizarlo, a enriquecerlo, a liberarlo. Está en su naturaleza. Mientras que las proscripciones, van en sentido contrario. Allí se ubican los que se rasgan las vestiduras contra los políticos de la democracia que sólo ejercen el elemental derecho a elegir y ser elegidos.
El movimiento nacional y popular nunca proscribió a nadie. No hay registros de ello. Lo hicieron siempre los fascistas y los dictadores. Eso sí, con al acompañamiento dócil de los “republicanos” que en horas de decisión siempre ponen la luz de giro hacia la derecha. Que proscriba Carrió que fue funcionaria de la dictadura, se comprende. Pero que lo hagan los radicales que precisan vencer su propia culpa histórica de haber gobernado proscribiendo a Perón y al peronismo, no es entendible.
Ni que decir de la proscripción no judicial, pero tan artera y difamante como la otra, por parte del macrismo y su socio De Narváez.
El mensaje de los candidatos del oficialismo, pone a consideración de la sociedad lo que hace el Gobierno de Cristina mientras que los opositores sólo se enredan en los ataques arteros y agresivos contra el oficialismo.
Toda una manera de entender el concepto de “democracia de bajas calorías” o de “baja intensidad” o simplemente, una democracia restringida, como la concibieron y ejercieron cuando fueron gobierno.
Los argentinos juzgarán el 28 de junio y dirán con su voto si prefieren un país donde un par de piratas se quedaban con los ahorros de los trabajadores activos y jubilados a través de las AFJP o un país donde el Estado, a través de la ANSES, por ejemplo, invierte en la creación de nuevas fuentes de empleo y producción.
La oposición dispara contra Amado Boudou como si fuera el enemigo público número uno, por las mismas razones con que callaron durante la larga y penosa noche del neoliberalismo privatizador.
Si pudieran desterrar este modelo de Estado inclusivo, sin dudas que lo harían.
Por eso pugnan por reproducirse en el Parlamento, para tirar por la borda todo lo que este país reconquistó desde el 2003 hasta el presente.
Que la memoria le gane al olvido, hoy, mañana y siempre.

(Jorge Giles. El Argentino. 21.05.09)

miércoles, 20 de mayo de 2009

CON JORGE RIVAS, VUELVE LA VIDA AL PARLAMENTO


Está volviendo Jorge Rivas al Congreso de la Nación.
El dirigente socialista, asumirá hoy la banca que le otorgó el mandato popular que lo eligió diputado hace ya dos años, después de luchar con la voluntad de un gigante, contra las gravísimas lesiones que le ocasionaran un par de ladrones la noche del 13 de noviembre de 2007.
El primer parte médico hablaba de un “paciente en coma, con un traumatismo craneoencefálico, asociado a hemorragia cerebral”.
Enterados de la tragedia, sus amigos y compañeros, corrieron a estar a su lado, acompañando a su esposa, a sus hijos, a sus padres.
A pasado un buen tiempo desde aquellos días donde el estupor se mezclaba con la impotencia y la angustia de no saber cómo terminaría finalmente su calvario, Jorge Rivas.
Por eso emociona y conmueve que esté volviendo para felicidad de todos los que lo aman, respetan y valoran, aunque no compartan todas sus ideas. Pero con su vuelta, nadie podrá negar que la política recupera a un militante, un tipo lleno de sueños y convicciones que supo deleitar a propios y extraños con sus discursos encendidos y poéticos, esas palabras justas y precisas que llenaron de orgullo a su maestro mayor, Alfredo Bravo.
Está volviendo Jorge Rivas y se hace inevitable no recordar el día que volvió a la Cámara de Diputados, Germán Abdala, aquel otro militante que nos sigue alumbrando desde un más que merecido lugar de la historia popular, guiándonos con su conducta de vida y su enorme claridad y luminosidad política.
Jorge Rivas vuelve para quedarse entre los suyos y si él nos permite, entre todos nosotros.
Es hora que la política se llene de tipos así, capaces de nutrir con su propio ejemplo de vida cada decisión que afecte la suerte del pueblo argentino. Jorge Rivas vuelve a sus afectos. Vuelve a su vocación.
La mariposa le ganó a la escafandra, Jorge.
No vuelve para sobrevivir en soledad. No vuelve lleno de resentimientos y odios. Vuelve lleno de amor y lucidez, con sus ojos bien abiertos para decirle que sí a una lucha que vale la pena, esa que busca la justicia social, la soberanía, el trabajo, la producción. Vuelve para seguir viviendo de la única forma que concibe la vida, dignificándola.
Quizás no sea casualidad que vuelva justo ahora que el destino de este país está en debate. Quizás, su regreso a la actividad política y parlamentaria, sea también una señal. Para que aprendamos qué cosa es la constancia, la apertura de ideas, la tolerancia, la voluntad, la virtud.
La tragedia duró apenas un segundo. Pero la reconstrucción de su vida, la que logró él solito, con la ayuda de médicos, enfermeros, familiares y amigos, duró casi dos años.
Inaugura un tiempo inédito en el Parlamento. Sus ojos, su mano, el equipo que lo acompañará hablarán con él. Y será maravilloso recuperar su brillante pensamiento para todos.
Hoy quisimos acompañar desde acá su vuelta. Mostrar como un hombre que viene de ser jirones, pudo sobreponerse al dolor y seguir el camino que eligió en su vida. Nadie debería tomar esta vuelta como un suceso más, como parte de un anecdotario frágil y fugaz, y por tanto, muy pronto olvidable. Creemos que con su vuelta, es la vida la que vuelve al recinto. Allí donde con aciertos y errores, los políticos como él, saben defender sin dobleces sus convicciones. Así lo conocimos y aprendimos a querer.
Y con este ejemplo, seguro que se lo podrá conocer y querer mucho más.
Estarán con él más cerca que nunca, Ariel Basteiro y ese otro hombre bueno llamado Oscar González, sus amigos de siempre. Estará su compañera.
Y nos imaginamos que también estará desde algún lugar la risa ancha del Viejo Alfredo Bravo, diciéndole “¿viste pibe que podías?”
Que ningún odio de los que sólo saben odiar, lo roce en este tiempo de su mandato, que aprendan de su mirada y de su ejemplo, ahora que el coraje y la bondad de Jorge Rivas, vuelven a ocupar legítimamente la banca que el pueblo le otorgó en las urnas.



(Jorge Giles. El Argentino. 20.05.09)

martes, 19 de mayo de 2009

LA ASTUCIA DE LA COMADREJA

La Presidenta anunciando obras en Chos Malal; el nítido mensaje de Néstor Kirchner en Malvinas Argentinas y la Anses destinando el dinero del ahorro nacional en beneficio del pueblo, a la inversa de lo ocurrido durante los gobiernos anteriores al 2003, están expresando la esencia del modelo gobernante.
Pero cuidado, los sectores del privilegio, agazapados durante un buen tiempo, salieron fuera de la madriguera y están en operaciones. Son como la comadreja que roba en nidos ajenos, sigilosa para atacar y astuta para simular que está moribunda y confundir al adversario.
El país sigue creciendo, pese a la crisis más grave del mundo moderno.
Sin embargo, hay una oposición política y mediática que actúa en defensa de los factores de poder, ansiosos por seguir gozando de un país para pocos, como lo hicieron antes. Algunos pertenecen al entramado de ese poder y otros terminan haciéndoles el juego, por mezquindad y oportunismo de la peor especie.
Desde que Cristina asumió la Presidencia, iniciaron las acciones para recuperar el poder de decisión que perdieron durante el mandato de Néstor Kirchner. Venían de hacerse las víctimas moribundas, pero era tan sólo parte de la astucia de las comadrejas. Estaban más vivas que nunca. Los patrones rurales fueron la infantería del proceso de restauración neoliberal, aunque en verdad son el estado mayor conjunto de la oposición. Cuando el Gobierno adelantó las elecciones al 28 de junio, repusieron rápidamente esa astucia, empleando todas las maniobras posibles para frustrar el modelo gobernante, basado en el trabajo y la producción nacional.
La primera astucia: negar a rajatabla que en estas elecciones se dirimen dos modelos de país.
Segunda: machacar y bastardear sobre las llamadas “candidaturas testimoniales”. Tercera: instalar mediáticamente que aunque el oficialismo gane en las urnas, “perderá” en el resultado final.
Cuarta: difundir que la provincia de Buenos Aires está partida en tres en lo que hace a las preferencias de los bonaerenses; Kirchner, De Narváez y Stolbizer.
Quinta: convencer que los porteños deberán elegir entre Gabriela Michetti y Prat Gay y que allá debajo de la tabla, se disputen el tercer lugar el pelotón de minorías progresistas entre las cuales están quienes se identifican con el Gobierno de Cristina.
Sexta: bombardear a la población a través de títulos catástrofes en los principales diarios capitalinos, y de igual forma en programas de radio y televisión.
Veamos brevemente cada una de estas falacias y pretendidas astucias.
1) La realidad política fue marcando la cancha y hoy todos saben que habrá un voto para el modelo neoliberal, representado por cualquiera de sus variantes partidarias o habrá un voto para el modelo de inclusión social, de trabajo, producción y consumo interno, de unidad latinoamericana, que expresan los candidatos identificados con el Gobierno nacional. Esos son los dos modelos que se enfrentan en esta coyuntura.
2) Las candidaturas no son “testimoniales”, son reales. Existen. Son hombres y mujeres de carne y hueso. Ellos son la expresión del compromiso político con un proyecto nacional y popular.
3) Como en los partidos de fútbol, si su equipo gana por cinco goles o por un gol de diferencia, ganó el partido. Todo lo que se diga después, es pura cháchara.
4) En la provincia de Buenos Aires, el modelo neoliberal que sustentó los gobiernos de Menem, Duhalde y De la Rúa, está representado por los candidatos de De Narváez y el de la Coalición radical de Carrió. Entre ellos se disputan el segundo lugar del electorado del centro derecha. Enfrente de ellos, aparece Néstor Kirchner y Daniel Scioli representando el modelo de país que expresa el Gobierno nacional y provincial. Por eso no hay tres partes en disputa. Son solamente dos los modelos para elegir.
5) En la Capital, sucede algo semejante. Tanto los candidatos de Macri como los de Carrió son parte del modelo que estalló en diciembre de 2001. Mientras que el modelo de inclusión, está representado por Carlos Heller. Esta es la disputa real y no falsamente leída por quienes manipulan a la opinión pública.
O se vota a Carlos Heller o se vota a Michetti-Prat Gay.
6) Todas las notas periodísticas que anunciaban la hecatombe para el país, fueron y son desmentidas por los propios hechos cotidianos.

La única verdad es la realidad. Mal que les pese a las comadrejas.


(Jorge Giles. El Argentino. 19.05.09)

lunes, 18 de mayo de 2009

GRACIAS POR EL FUEGO

Estamos tristes y no queremos ocultarlo. Murió Mario Benedetti, un poeta mayor, un sobreviviente, una voz de ternura en el combate, un madero flotando en el naufragio de una generación. Algunos amigos tuvieron el privilegio de escucharlo por última vez el día que sorpresivamente lo vieron entrar a la Carpa Blanca docente, en el final del menemismo, y en el saludo dijo algo así: “Buenas tardes, soy Mario Benedetti y vengo a tomar unos mates con ustedes”. Era él. Con su voz de uruguayo universal y mágico empleado de oficina, trayendo su humildad y su solidaridad con los maestros argentinos. Gracias por el fuego, una de sus obras más bellas y los Poemas de Otros, cuidaron nuestras noches y nuestros días más tristes. Pero también acompañaron nuestras más profundas alegrías personales y colectivas. Hasta pronto Poeta. Se lo va extrañar mucho. Y usted sabe por qué.
Lejos de la belleza, los periódicos del domingo no tienen desperdicios.
Los diarios tradicionales de circulación masiva, Clarín y La Nación, reafirmaron su rol de pasquines opositores, titulando catástrofes que pocas horas después fueron denunciadas y desmentidas por fuentes autorizadas.
Destacamos la contundente declaración de la diputada Diana Conti denunciando a Joaquín Morales Sola de mentiroso, directamente.
Las nuevas denuncias periodísticas sobre los negocios mal habidos de uno de los principales referentes de la oposición, Francisco De Narváez,
la aparición, a su lado, de personajes tristemente célebres durante la década menemista, el escándalo que rodea la causa sobre el trafico de la efedrina, la participación en esa causa de los narcos colombianos, todo, todo es de terror en esta Argentina a la que amamos tanto.
La investigación relativa a Alfonso Prat Gay, el candidato de Carrio y el radicalismo para el electorado porteño, indicando la fuga de dinero que habría realizado y la concentración de fortunas en la época del corralito de Cavallo, por parte de quien se presenta como el mascaron de proa de un espacio asentado sobre las banderas de la ética y la moral, todo, todo da temor en esta Argentina nuestra.
La aparición de Gabriela Michetti, considerada como una presunta “cara nueva y fresca” de la derecha comandada por Mauricio Macri, al lado de De Narváez, indica que el menemismo y el duhaldismo están quemando las naves para ganar las próximas elecciones legislativas.
A escasos seis domingos de las cruciales elecciones del 28 de junio próximo, es necesario reflexionar desde la ciudadanía sobre la imperiosa necesidad de no desmemoriar nuestra decisión política.
Sabrá usted seguramente que el que acuñó la frase que sirvió de titulo al formidable libro de Horacio Verbitsky sobre la etapa menemista, “Robo para la corona”, fue el ex Ministro de Carlos Menem, José Luís Manzano. Ese mismo señor aparece hoy como socio y asesor principal de De Narváez. Igual que Mariano Cúneo Libarona, aquel abogado mediático de esa década infame.
Por lo tanto y como decimos en el barrio “ojo al piojo”. Por que no nos merecemos como pueblo que somos, con la historia de luchas, victorias, frustraciones y traiciones que tenemos grabadas en el cuero, volver a soportar a los mismos que nos esquilmaron en el reciente pasado.
No se trata de elegir entre los apóstoles de la moral pública. Ni de optar entre un abanico de calidades posibles sobre políticas de empleo. Tendremos que elegir entre quienes sostienen un modelo que busca el pleno empleo y la redistribución equitativa del ingreso, por un lado y por otro, entre quienes añoran los tiempos políticos y económicos que nos sepultaron en la crisis más grave de nuestra historia hace apenas siete años atrás y por si fuera poco, están al menos sospechados de ser gente de muy mala calaña.
No es el gobierno ni mucho menos el kirchnerismo el que juega su suerte en las próximas elecciones. Es el modelo de país. Es el trabajo. Es el rol activo del Estado en el mercado interno y en la política de unidad latinoamericana.
Esos personajes del pasado son causa y efecto del modelo neoliberal que debemos dejar atrás para siempre. Se trata, entonces, de meter un voto lleno de memoria en las urnas.
Para que no vuelvan a ganarnos los portadores del odio y la intolerancia.

(Jorge Giles - El Argentino. 18.05.09)

domingo, 17 de mayo de 2009

CUANDO OFENDEN A EVITA NOS OFENDEN A TODOS

Se llama Hugo Biolcatti, presidente de la Sociedad Rural Argentina, el poderoso empresario que dijo hace un par de días que “Eva Perón no puede asumir porque está muerta y cuando la quieran hacer asumir, se van a dar cuenta de que es Nacha Guevara disfrazada”. Quiso aclarar después y oscureció más aún, afirmando que en el oficialismo “usan la memoria de Eva Perón para, a través de una artista disfrazada, engañar a una parte de la población y provocarle sentimientos fuera de lugar en una campaña”.
Eso es Biolcatti, el patrón rural de esa Mesa de enlace a la que rinden pleitesía los opositores como Francisco De Narváez, Elisa Carrió, Mauricio Macri, Margarita Stolbizer y Gabriela Michetti. Es el mismo que hace poco declaró, en vivo y en directo, junto a su amigo Mariano Grondona, que si el oficialismo pierde las próximas elecciones, la noche del 28 de junio habrá un nuevo gobierno, con Julio Cleto Cobos dando el golpe final. Es el mismo Biolcatti que presidió clases de adoctrinamiento de los ruralistas teniendo como instructores a personajes como Vicente Massot, el fascista ex vice ministro de Defensa de Menem, que defendió públicamente el empleo de la tortura durante la dictadura. El mismo Biolcatti que de manera racista y xenófoba supo decir que había piquetes blancos y piquetes negros y que el de ellos, los realizados contra el Gobierno durante el conflicto sojero junto a Eduardo Buzzi y Alfredo De Angelis, eran piquetes blancos. Obvio.
El es parte de la clase social más retrógrada, intolerante, violenta y egoísta de este país que nos duele tanto a veces. Y es esa clase social, precisamente, la que causó los mayores dolores que llevamos a cuesta, desde que somos una nación.
Es Biolcatti, sucesor de Alfredo Martinez de Hoz, el prócer de los patrones rurales, el que insulta con desprecio y sorna a este pueblo manso, tratándolo de bruto, ignorante, manipulable.
El dirigente rural no está en condiciones de entender que Eva Perón está más viva que nunca en la memoria colectiva, mucho más después que toda una generación recogiera su nombre y lo llevara hasta el final como bandera, pagando por ello con la vida de los 30.000 argentinos que desapareció la dictadura genocida apoyada por la misma entidad que hoy preside Hugo Biolcatti.
No hay casualidad sino causalidad histórica en ese maridaje siniestro.
Tampoco son exabruptos sus palabras. Ellos son así. Pero además dicen lo que dicen por que están convocando a lo más rancio y nefasto de la sociedad para juntar fuerzas contra el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y contra los candidatos del proyecto nacional y popular que preside junto a ella, Néstor Kirchner.

Precisan delimitar los campos que disputan el modelo de país para los próximos años.
Por eso Francisco De Narváez confesó hace unos días que hubiese preferido una tercera presidencia de Menem antes que la primera de Néstor Kirchner.
Por eso Mauricio Macri reivindicó en la semana que pasó al Estado mínimo del neoliberalismo de los noventa, reclamando que Aerolíneas y las AFJP vuelvan a manos privadas y convocó a organizar la despedida del gobierno.
Por eso Elisa Carrió defiende a capa y espada a su candidato Prat Gay que reclama la vuelta de Argentina a las “relaciones carnales” con el FMI.
Por eso Gabriela Michetti se suma a la campaña junto a De Narváez
para intentar ponerle una cuota de mínima “ternura” a la más cruel máquina del pasado, la que pretende volver a gobernar para arruinar la vida de los argentinos. Michetti comparte el mismo proyecto político que a fuerza de puro marketing, busca seducir invocando la desmemoria de los argentinos.
¿Vieron que era nomás una disputa sobre el modelo de país?
Ya no lo pueden negar los opositores escudándose en la crítica sobre los modales de Cristina o de Néstor.
La mejor plataforma de los candidatos que se identifican con el Gobierno nacional es mostrar todo lo hecho desde la presidencia de Néstor Kirchner y profundizado por Cristina.
Mejor que decir es hacer, decía Perón hace muchos años y lo recordamos aquí días atrás. Esta vez será más difícil que confundan al ciudadano de a pie.
Porque entre volver al país de la desocupación y la tristeza, siempre será mejor defender y profundizar este modelo de trabajo y de inclusión social.
Sólo el trabajo es la fuente de nuestras alegrías colectivas y personales.


(El Argentino. 17.05.09)

IMPRESIONES SOBRE LA COYUNTURA POLÍTICA

Hay tres cuestiones centrales que condicionan fuertemente el rumbo de la actual coyuntura política.
1) El Gobierno nacional logró instalar la idea de que en esta contienda electoral se pone en juego el modelo de país. Esta afirmación era negada por la oposición, partidaria y mediática, que pretendía imponer el concepto de una mera elección legislativa, calentada por la presunta “crispación” del oficialismo. Son pocos los que niegan hoy que en estas elecciones, se dirime el proyecto de nación y sociedad para los argentinos.
2) Este avance conceptual, requiere a su vez que todos los actores expliciten el fondo de la cuestión, ya que los opositores discurrieron hasta ahora acerca de los modales personales de Cristina y Néstor Kirchner, evitando debatir justamente el meollo del modelo que defienden, que no es otro que el neoliberalismo de los noventa. Seguirán con esta táctica, posiblemente, porque se les hace imposible exponer un modelo económico alternativo que sea beneficioso para los intereses populares y que implique la defensa del trabajo, de la producción y del rol activo del Estado en el mercado interno.
3) El Gobierno se consolidó en la defensa del proyecto nacional y popular, profundizando su política interna y su política exterior. Prueba de ello, la próxima Ley de Medios y los últimos acuerdos con Venezuela.
Los procesos populares se resignan o profundizan en función de sus políticas estratégicas, no del envoltorio que las revisten.
El desenlace sigue abierto, pero los preparativos del 28 de junio, ya ponen al trasluz a los contendientes centrales. Se muestran como son, sin dar lugar a considerar como exabruptos lo que en verdad son concepciones antagónicas entre unos y otros.
Hugo Biolcatti
agravia a Evita y se desnuda en cámara con Mariano Grondona, por que está convocando a su clase social a seguir enfrentando al gobierno.
En oposición a las políticas oficiales, que no ceden un palmo en alcanzar más temprano que tarde una plena redistribución del ingreso, muestran, en su esencia, el pensamiento reaccionario.
Francisco De Narváez, acosado por el escándalo que lo salpica con la causa del tráfico de efedrina, busca convencer que él es claramente la continuidad del menemismo, con el apoyo de Eduardo Duhalde.
El Acuerdo radical de Carrió, ofrece con Alfonso Prat Gay, defensor del FMI, las mismas recetas, conductas y personajes que actuaron con la Alianza de De la Rúa.
Mauricio Macri reafirmando el concepto del Estado mínimo del Consenso de Washington, hace cierto aquello de que esta vez la oposición está representada por los dueños del poder económico.
La derecha neoliberal sabe que el “poskirchnerismo” sólo será posible si derrota al campo popular. Algunas franjas de la militancia podrán equivocarse respecto a la caracterización del gobierno; la derecha no.
En este marco se debería entender, el tono coloquial y pedagógico de Néstor Kirchner en La Plata, defendiendo el modelo de país inclusivo que representa el Gobierno de Cristina e identificando en el modelo neoliberal, el adversario a derrotar en las urnas.

(Miradas al Sur 17.05.09)

viernes, 15 de mayo de 2009

AQUÍ ESTÁN, ÉSTOS SON...

El Teatro Argentino de La Plata volvió a ser ayer el lugar donde el proyecto nacional y popular iniciado por Néstor Kirchner en el 2003, se reúne en los momentos de encrucijada. Allí articularon la alegría bulliciosa de la militancia bonaerense con la convicción colectiva de que en estas elecciones se juega el modelo de país, de cara al Bicentenario patrio.
Horas antes del inicio oficial del Acto organizado para presentar la lista electoral que encabeza Néstor Kirchner, los pasillos del teatro platense eran un solo murmullo, tejiendo y destejiendo perspectivas políticas para cada distrito y sección, para la provincia, para la nación.
Podríamos sintetizar afirmando que esa alegría se mezcló con la bronca que desataron las declaraciones del presidente de la Sociedad Rural, Hugo Biolcatti. El tufillo reaccionario del dirigente rural diciendo que “Eva Perón no puede asumir porque está muerta y cuando la quieran hacer asumir se van a dar cuenta de que es Nacha Guevara disfrazada”, mereció la reprobación indignada de todos los presentes. Los gestos adustos constituían la antípoda de las carcajadas del público que en Córdoba aplaudió al dirigente rural de la Mesa de enlace, en presencia del gobernador Schiaretti y Carlos Reutemann.
El valor de un acto político está en el contexto. Son los oradores del escenario y son los que escriben la otra parte de la trama desde las tribunas. Por eso relatamos las cálidas y las ácidas dedicatorias de las consignas cantadas, antes y durante todo el acto.
Por cierto que De Narváez y Macri tuvieron lo suyo, en relación al escándalo del tráfico de efedrina que envuelve al candidato de la derecha.
Otros cánticos destacables fueron los que se referían, con mucha gracia, al contraste de los descuentos salariales efectuados por la alianza radical y el aumento del 15,5 % que el actual gobierno otorgó a los estatales. Una ovación recibió a Hebe de Bonafini y las Madres y las Abuelas que la acompañaban. A las 19 y 25, comenzó el despliegue de banderas de la JP y de La Cámpora, de agrupaciones de distintos municipios, y en todas sobresalía el rostro de Evita. Una ancha bandera argentina transformó por un instante el teatro en un estadio de fútbol. En sus pliegues se leía “Seremos millones para que Evita vuelva”.
Cuando el escenario se iluminó a pleno, los nombres de los dos primeros candidatos, franjeaban una bandera argentina. Los otros candidatos allí sentados, daban la imagen de un equipo formado a la hora del arranque.
Apareció Cristina y el teatro pareció temblar. Una voz femenina anunció luego a Hector Recalde, Sergio Massa, Nacha Guevara, Alberto Balestrini, Daniel Scioli y finalmente a Néstor Kirchner.
Eran las 19 y 40 y la locutora anunció que “ahora sí, aquí están, estos son, los candidatos del proyecto nacional y popular”.
Mientras cantaban el Himno Nacional, Cristina lo hacía emocionada al lado de su hijo Máximo.
“Patria sí, Colonia no”, subscribió la popular, antes de empezar a hablar Scioli.
Muchos coincidieron después en que el Gobernador brindó quizá el mejor discurso de su vida política, apelando a defender sin dobleces el modelo de inclusión social gobernante, ejemplificando con datos precisos lo que rezaba el cartel principal: “Nosotros hacemos”.
Nacha conmovió a todos hablando de los sueños y el compromiso con el derecho a ser felices.
Un Kirchner muy emocionado por las consignas de la juventud, no pudo hablar durante varios minutos.
Hasta que empezó a desgranar un discurso donde habló de las convicciones y desde allí pidió un aplauso de desagravio para Evita, por las odiosas palabras proferidas por Biolcatti. Agradeció la compañía solidaria de sus hijos y de su compañera de toda la vida. Marcó con nitidez la política de Derechos Humanos como el principal factor desencadenante de la agresión de la derecha neoliberal. Reivindicó los principales logros tanto de su gobierno como el de Cristina. Lo hizo de un modo coloquial, reflexivo, intimista.
Su propósito fue reafirmar con toda elocuencia, que está en disputa, como pocas veces en la historia, el modelo de país: O se reafirma y profundiza el modelo del trabajo, producción y consumo interno que encarna el Gobierno nacional. O se regresa al modelo neoliberal que nos hundió en la peor crisis de la historia argentina.
Cuando terminó de hablar, todos sabían que la batalla de la democracia había comenzado. Y sobre todo, que esa batalla vale la pena.



(El Argentino. 15.05.09)

jueves, 14 de mayo de 2009

TODO ESTÁ GUARDADO EN LA MEMORIA...

Hoy estará Néstor Kirchner en la ciudad de La Plata presentando oficialmente la lista electoral que encabeza junto a Daniel Scioli.
Si las tareas de gobierno se lo permiten, allí estará también, acompañándolos, Cristina Fernández de Kirchner.
No faltarán ni las Abuelas ni las Madres que acostumbran estar en momentos cruciales para la suerte del país de los argentinos.
Allí estarán los Intendentes y los Concejales que decidieron sumarse a esta patriada en defensa de un modelo de nación.
Estarán los militantes de antes y los de la nueva generación. Todos procurarán estar presentes.
Es la conducta genética del movimiento nacional y popular. Acudir al llamado, no borrarse, no especular, sino por el contrario, jugarse hasta el final, salvándose con todos y no en soledad.
Los que crecieron arriesgando solamente las acciones de sus empresas en la timba financiera; los que nacieron en el egoísmo de una cuna de oro; los herederos del despojo de la tierra nuestra; los que arriesgan el cuero y la piel solamente en una cama solar, esos, jamás podrán entender el valor de la gesta y la épica militante.
Seguirán creyendo que la historia llegó a su fin con Fukuyama.
Son los que alientan un republicanismo sin república, una nación sin pueblo, una sociedad sin patria. Conciben a las instituciones como un mobiliario barnizado con el sudor de la frente ajena. Son los desamparados de Menem y De la Rúa.
En cambio, para la orilla popular, las instituciones de la democracia son la fuente inagotable que permite tener más trabajo y producción, más educación, más soberanía.
Por eso los opositores no pueden entender el valor del testimonio, de aquellos que en su memoria llevan el desgarro de la compañera y del compañero desaparecidos, asesinados, torturados, presos, exiliados, perseguidos por dar, acertada o equivocadamente, testimonio de su compromiso con los más humildes.
Allí, en La Plata, andará Evita con su eterno ejemplo, luminosa por los siglos de los siglos, como la más bella síntesis que nos legó esta historia que aún está inconclusa. Hay que recuperar las calles nuevamente para reclamar que se vayan todos los intolerantes, los que vaciaron la política de contenido, de sustancia humana, de proyectos, de utopías. Hay que aferrarse fuerte al timón de mando para que nunca más se desvíe esta barca que nos pertenece a todos. Al laburante, al profesional, al cooperativista, al artista, al campesino, al empresario nacional, al que se siente pueblo en el lugar más lejano de la patria.
Allí estará esta tarde Néstor Kirchner anunciando a propios y extraños, que esta vez no podrán pasar fácilmente. Es mucho lo recorrido en estos seis últimos años, pero muchísimo más lo que falta para ser felices en un país que lo tiene todo para serlo.
En la voluntad, en las victorias, en las derrotas y en la memoria colectiva, reside la sabiduría que hace fuerte a un pueblo.
En la mística que atravesó Los Andes, con San Martín enfermo y con llagas que dolían a cada paso de mula. Al General le dolía mucho más la Patria que su propio cuerpo.
La mística que enarboló Manuel Belgrano creando escuelas y batiendo al colonialista como pudo y supo, a los ponchazos. La de Mariano Moreno encendiendo su lámpara para iluminarnos para siempre este camino. La de José Gervasio Artigas, otro padre de la Patria Grande de los argentinos. La de Don Hipólito Irigoyen abriendo las puertas del siglo XX al movimiento nacional para que pase Perón con sus descamisados y la justicia social, mutilada después por los dictadores y sus secuaces cívicos.
Todo está cargado en la memoria, como dice el Maestro León Gieco.
Con el último voto contado en la noche del 28 de junio, el mundo sabrá que esta nación quiere ser primavera y no quiere dar ni un paso atrás en su destino de libre, justa y soberana, democrática y solidaria.
En eso andará pensando esta tarde Néstor Kirchner, mucho más ahora que la oposición sinceró su afán golpista, una vez más.
Como si no aprendieran todavía que esta democracia que supimos conseguir, le pertenece al pueblo, al que tendrán que respetar de una vez y para siempre.


(El Argentino. 14. 05.09)

miércoles, 13 de mayo de 2009

MEJOR QUE DECIR ES HACER


Los opositores empezaron sus respectivas campañas electorales. Expusieron un discurso que se muestra inalterable con el paso del tiempo. Se muestran tal cual son, con sus verdaderos rostros, pese a las máscaras que visten para la ocasión.
La palabra es así. Te eleva o te hunde. Te acaricia o castiga. Pero eso sí, como es generosa, más tarde o más temprano te devuelve con creces cada vocablo, cada oración, cada sentencia. ¿Sabe por qué? Por que no se habla en soledad, sino en sociedad.
Los opositores terminan siendo y haciendo todo lo malo que endilgaron a los candidatos oficialistas. Es lo que comúnmente se dice “el pez por la boca muere”.
Veamos algunos ejemplos transcurridos en las últimas horas.
Gabriela Michetti, la candidata porteña de la dupla De Narváez y Mauricio Macri, se despachó con que el Gobierno nacional tiene “secuestrados a los porteños y avasalló a las instituciones desde el Congreso de la Nación”. Todo un botón de muestra de lo que se denomina campaña sucia y que sigue así:
El referente duhaldista “Chicho” Basile, que lleva al genocida Luis Patti de candidato, calificó de “insano” a Néstor Kirchner.
Eduardo Mondino, candidato del gobernador cordobés Schiaretti, dijo que “hay que meterle una trompada a los Kirchner”.
Francisco De Narváez señaló que hay que mandar de vuelta a El Calafate al ex presidente Kirchner mientras su socio, Mauricio Macri, declaró que “era un mentiroso”.
¿Quiénes son los crispados entonces? ¿El gobierno o ellos?
Elisa Carrió presentó a sus candidatos del Acuerdo de derecha que conformó con los radicales, desandando “el asco” que declaró sentir por este tipo de alianzas hace un par de meses atrás. Fue un acto con toda la liturgia de un radicalismo que se cuelga desvergonzadamente de glorias pasadas que, además, nunca fueron tales.
El frío discurso del ex funcionario de la banca Morgan, Alfonso Prat Gay, sinceró que el próximo 28 de junio la meta es la derrota del actual modelo de inclusión social que conduce la Presidenta de la Nación. Anótelo para no olvidarse después.
Hay más, pero alcanza con estas citas para reafirmar algunos conceptos.
Los opositores deberían demostrar que si hoy están unidos electoralmente, no lo están sólo por conveniencia. Muestran capacidad de daño, pero no se muestran muy afectos para levantar ladrillos que ayuden a una construcción colectiva y solidaria.
Es el caso testigo de la dupla De Narváez – Felipe Solá.
Hasta no hace mucho tiempo atrás, ambos protagonizaron peleas encarnizadas por cuestiones de fondo. Hoy están juntos y la ciudadanía merece, por respeto, saber por qué hay que creer ahora en ellos. Saber por ejemplo, por qué De Narváez se presentó hace apenas dos años diciendo que era cabeza de “mi espacio Unión Popular es un frente independiente de centro derecha”, según dijo textualmente, y hoy es parte de un espacio partidario, no independiente, sino claramente duhaldista y menemista.
La oposición está en la cancha. El partido comenzó. Pero ya sabemos con claridad qué es lo que buscan. Ya no lo disimulan y es bueno que así sea. Buscan, ni más ni menos, que desandar todas las conquistas logradas en estos últimos años. Ayer lo dijeron con toda elocuencia. Quieren derrotar este modelo de redistribución del ingreso. Y para lograrlo van con los patrones rurales en sus listas, con millonarios y banqueros. Allí la vimos a Carrió y Stolbizer defendiendo sin ruborizarse a la dirigencia de la Mesa de enlace. Se mostraron profundamente reaccionarios en cada discurso. Vienen por la revancha. Por fin reconocieron que es el modelo lo que los perturba.
En la otra orilla del mapa político, Néstor Kirchner anduvo esta vez por la populosa y humilde Matanza, entre los abrazos de una multitud que se fue sumando en las calles al ritmo de su paso.
“Mejor que decir es hacer”, pensó, mientras transmitía con emoción, el saludo de su esposa, la Presidenta de todos los argentinos, que denunciaba por la noche a los “gobiernos tornillos”, esos que, como en los tiempos del menemismo y la alianza radical, ajustaron para abajo y aflojaron para arriba.
(El Argentino. 13.05.09)




martes, 12 de mayo de 2009

NO CORRAN, NO TEMAN, NO IMPUGNEN

La Argentina bulle porque está construyendo su verdadera identidad como nación.
Y en ese marco, se desarrolla la pugna entre dos modelos de país.
El modelo que defiende el empleo y la producción y el que truncó el país hasta explotar en 2001 y 2002.
¿Hacia donde vamos ahora? Hacia donde proponga el Gobierno y decida la sociedad.
Porque esta construcción de identidad nacional, se asienta sobre una determinada relación de poder y de fuerzas que están en disputa permanente.
Serán las urnas de la democracia, el campo de batalla y decisión final.
El Gobierna explicita su proyecto en lo que viene haciendo y en lo que busca hacer.
¿Y la oposición, qué propone?
Se esperaba que luego de la presentación de las listas de candidatos, los opositores presentaran sus programas, propuestas e ideas para empezar a debatir en serio. Pero no fue así.
Los dirigentes de la alianza radical se ocuparon de impugnar las principales candidaturas del oficialismo llamadas, aviesamente, “testimoniales”. Los motivos son conocidos.
¿No es hora que los opositores se dediquen a presentar a la sociedad sus proyectos políticos? ¿Por qué no se preocupan por decirle a la sociedad qué harán desde las bancas que pretenden ganar? ¿Y qué proponen como medidas de gobierno en medio de la crisis internacional que azota al mundo? ¿Volverían a reprivatizar el sistema jubilatorio y a reconstituir las AFJP? ¿Pugnarán por volver al FMI y aplicarán los ajustes y descuentos a los salarios que supieron ejecutar cuando fueron gobierno con Menem y De la Rúa?
Provoca hastío observar una y mil veces a una oposición que no puede o no sabe o no quiere superar esa actitud negativa, no positiva, no propositiva que la caracteriza.
¿Por qué no impugnaron a Luis Patti, un hombre preso por violar los derechos humanos y que aparece como candidato por una lista de signo duhaldista? ¿Por qué no impugnaron a tiempo y denunciaron penalmente a Hector Gutierrez, el ex candidato de Cobos, acusado por prostitución de menores en Pergamino? ¿Por qué no impugnan a Francisco De Narváez por estar involucrado en una causa relacionada con el llamado “rey de la efedrina”? ¿No son éstas causas muchísimo más serias para ser impugnadas?
De todos modos, la campaña empezó.
Néstor Kirchner recorrió Quilmes, mezclándose en abrazos con las barriadas más humildes, Luis Barrionuevo encabezó una marcha contra el Gobierno y la alianza radical se presentó a la justicia para las impugnaciones ya comentadas.
Un primer traspié lo sufrió la lista apadrinada por Mauricio Macri y Eduardo Duhalde con la renuncia a la candidatura de la actual esposa de Felipe Solá.
Un verdadero papelón para los que pregonan ser “la nueva política”.
Mientras tanto, en Merlo, en el conurbano bonaerense, la Presidenta Cristina Fernández volvió a contagiar su emoción, esta vez, a quienes asistieron al acto organizado por el Intendente local, Raúl Othacehé, reafirmando el férreo compromiso con el modelo de inclusión social que lleva adelante su gobierno.
En sus palabras se expresan las ideas centrales de la plataforma que exponen los candidatos identificados con el proyecto político que encabeza junto a Néstor Kirchner.
Más trabajo, más producción industrial, más consumo interno, más crecimiento económico con desarrollo social, más soberanía nacional. Es esa la base de un modelo que propone a la sociedad la profundización de este rumbo en medio de la crisis mundial.
El drama de la oposición es que, felizmente para la Argentina, no se cumplieron las profecías con que anunciaban el derrumbe de nuestra economía. Nada de eso sucedió. Sino todo lo contrario. Y el otro inconveniente es que se les hace difícil seducir votantes oponiéndose, por ejemplo, a las políticas de más empleo que desarrolla el Gobierno nacional.
Es comprensible su desamparo.
Pero no es bueno para la democracia ni para ellos mismos que corran asustados temiendo una derrota electoral o escondiéndose atrás de vanas impugnaciones que, en realidad, buscan disimular sus propias debilidades.La democracia brinda oportunidades para todos. Deberían saber aprovecharlas mejor.


(El Argentino. 12.05.09)

lunes, 11 de mayo de 2009

UNA CARTA DE AMOR EN CAMPAÑA

Ahora vendrán por nosotros nuevamente, prometiendo el oro y el moro y la patria sin memoria ni principios. Se vestirán de santos y santurronas, cruzados millonarios de la seguridad, o inocentes muchachitas que dieron un mal paso y buscan redimirse en una banca. No temas mi amor, le dirá el docente porteño a su mujer también docente, cansados después de un día entre carpetas y cuadernos para corregir. Hay un digno maestro en la lista y es suficiente para dignificar la lucha de tantos años que supimos compartir con él. Y hay un cooperativista que siempre estuvo del lado de los que viven y desviven por alumbrar un mundo más justo para todos. Y está un compañero judicial que lleva en su cuerpo las marcas del genocidio y otras más recientes por enfrentarse a cara descubierta contra los ajustadores.
Ahora vendrán por nosotros nuevamente, con la cantinela de los poderosos a regalarnos su atención por unos días, creyendo que no entendemos de qué se trata esta parada, que sólo somos un par de desmemorias andando sin rumbo por la vida. No importa mi amor, le dirá el obrero a su esposa desconfiada, no hay nada que temer porque ya los conocemos, ya los sufrimos tiempo atrás. Prometerán más balas para los ángeles de alas rotas que andan por el barrio, y un manual sobre la moral escrito por Elisa Carrió en la ciudad de Pergamino y un instructivo para efectuar llamados a un capo narco y negarlo después con la ley del gallinero. Esta vez es más difícil confundirse. La carpa de Ali Baba está atendida grotescamente por sus propios dueños. Llevan los nombres y los apellidos de quienes nos saquearon en los noventa y están asesorados por quienes descontaron la jubilación a los abuelos.
Ahora vendrán por nosotros nuevamente, los que se resignaron a ser minorías para siempre, resignados a no crecer y a sufrir y parir con el pueblo, los que desertaron, abandonando la batalla por la justicia y la verdad que no se rinde ni resigna. Vendrán los mentirosos y atildados que prometen la buena nueva con el sacrificio ajeno. No hay nada que temer. Los conocemos a todos. Y ellos quizás no nos conocen del mismo modo, le dirá el poeta a su amada, murmurándole algún poema de amor que ayude a llegar enteros hasta la próxima primavera.
Los diarios dicen a veces lo que no quieren decir. Es la primera vez en la historia que los propios capitanes salen de frente a la pelea por la causa de un pueblo, sin esconderse bajo la mesa de arena de los gabinetes.
Se llaman Néstor Kirchner y Daniel Scioli los que invitan hoy a no claudicar ni a temer en plena tormenta. Podrán creerles o no, votarlos o no, seguirlos, acompañarlos, cantar con ellos, pelear con ellos o no. Pero ya es tarde para negarles la honesta osadía de poner el cuerpo. ¿Quién lo podrá hacer? ¿Quién podrá explicar el futuro después de negarse a acompañar la recuperación de Aerolíneas y Aguas y las Jubilaciones y el fondo sojero y la vuelta del Estado para los humildes? ¿Con qué autoridad moral se pararán ante la historia que escribió ese militante que llegó a ser Presidente y que ayudó a enarbolar en alto la Memoria mientras descolgaba los cuadros de los represores? ¿Quién le dirá que estuvo mal recuperar 70 mil millones de la deuda externa y decirle adiós al FMI que tanto veneraron cuando fueron gobierno los opositores?
Esos opositores son los que tocarán el timbre de tu casa para traerte la palabra hueca, la del bache eterno y la vereda rota, la del hospital porteño vacío de gasa y salarios justos, la de las escuelas a la intemperie sólo cobijadas por el amor que anida en los pizarrones. Te sonreirán casi con ternura. Te harán dudar un instante con tanta dulzura. Pero son los mismos que vienen a desandar las conquistas de estos últimos años. Los que votaron contra la redistribución del ingreso y a favor de los señores feudales de la mesa de enlace, los que se opusieron a todos y a cada uno de los proyectos que envío la Presidenta.
Se llamen De Narváez, Macri, Michetti, Stolbizer o Juan de los palotes.
Esta vez no podrán engañarnos
, mi amor, esta vez no. Lo dirá el artista y el pequeño empresario y el laburante y el ama de casa al amor de su vida.
Esta vez no podrán, te lo aseguro.
Porque hay una vez en la vida en que cualquiera puede ser casi un héroe por un día. Un simple y mortal humano que decide por todos y con todos.
Esa oportunidad empieza hoy. Y hasta el próximo 28 de junio habrá tiempo para pensarlo.
(El Argentino. 11.05.09)

domingo, 10 de mayo de 2009

AHORA SÍ, EMPEZÓ LA CARRERA ELECTORAL

Todo está en orden. Las listas de candidatos fueron presentadas, con buenos modales o con empujones, sudando la gota gorda, abriendo o alambrando, muriendo o fornicando, riendo o llorando. Pero ya está. Largaron.
“Leguisamo solo, gritan los nenes de la popular”
No será nada fácil. Porque enfrente del Gobierno no hay carmelitas descalzas ni nenes de pecho. Saben que esta vez va en serio, que hay una Presidenta como Cristina que cuando más la castigan, más se aferra al modelo de redistribución del ingreso y de inclusión social que defiende. Y es una macana para la derecha. Porque ya no están los blindados de los dictadores para defenderlos, ya no está el “partido militar” para cubrir las debilidades de los cívicos y politiqueros que sólo sirven para la rosca de comité. Tendrán que arreglárselas solos, como puedan.
Quizás por eso mismo son más peligrosos.
¿Quién provocó y estimuló y organizó el ataque a la Intendencia Municipal de Lanús?
Piedra libre a los que empujan a los ocupas de terrenos fiscales y privados. Esos canallas sí que usan las angustias de los más pobres.
Cuando vemos y escuchamos al Intendente de ese distrito del conurbano bonaerense, Darío Díaz Perez, comparando tamaña violencia con las lamentables y dramáticas situaciones de saqueos ocurridas durante el 2001 y 2002.
Cuando entendemos que De Angeli y los patrones rurales que entraron en tropel a la pista aérea de Paraná para encarar a la Presidenta sabían lo que hacían y los peligros que provocaban.
Cuando uno lee en los diarios que la cabeza de lista que responde a Mauricio Macri y Eduardo Duhalde, el millonario colombiano Francisco De Narváez, está involucrado en una causa donde se investiga al catalogado como “rey de la efedrina”, por llamadas detectadas desde su celular.
Cuando uno ve por la televisión que el mayor representante de Julio Cleto Cobos, debe borrarse de las filas de la coalición cívica radical de Elisa Carrio, por presunta participación en la prostitución de menores.
Cuando uno escucha y ve por la tele la conversación entre Mariano Grondona y Hugo Biolcatti, el presidente de la Sociedad Rural, preanunciando un golpe de estado para la noche del 28 de junio en caso de una derrota kirchnerista.
Cuando uno oye a Gabriela Michetti y lee que estuvieron al borde las trompadas, entre los pesados que lideran su espacio.
Cuando uno escucha las declaraciones últimas de Domingo Cavallo afirmando que Eduardo Duhalde podría estar tramando un golpe contra el Gobierno, en consonancia con las afirmaciones de Elisa Carrio respecto al plan golpista abortado el año pasado.
Cuando uno junta todos estos escombros de la realidad, los arrima cual si fuesen piezas de un rompecabezas, los olfatea y articula entre si, cae en la cuenta que no hay que dramatizar nada para saber que el drama argentino sigue en cartelera.
Está en la historia mancillada después de 1976; lo que antes la derecha no podía lograr con los votos, lo pudieron con la traición de Ménem y luego con el helicóptero de De la Rúa y luego con la emboscada en el puente que costó la vida de Kosteki y Santillán.
Entonces, que no insistan más con que es un exabrupto afirmar que si las filas que se identifican con el proyecto nacional y popular liderado por Néstor Kirchner son derrotadas, el caos de la injusticia estará nuevamente entre nosotros.
Algo aprendimos y maduramos en estos últimos años como para darnos cuenta lo que está en juego en estas elecciones próximas.
Los violentos debieran ser desterrados para siempre de la vida que elegimos los argentinos. Y esto sólo lo puede garantizar un modelo de inclusión social.
Este domingo queremos irnos cantando un himno a la alegría y la esperanza. ¿Sabe porqué? Porque la democracia está del lado de los justos. Y del pueblo. Y entonces no habrá nada que temer sino mucho por festejar. Porque esta vez, armados de memoria, los ciudadanos de a pie podrán reafirmar el camino que vienen construyendo en defensa del empleo, de la producción, de los derechos humanos, de la unidad latinoamericana.
Y porque además, ya están los candidatos en la cancha.
Con eso solo, vaya si tenemos pilas para estar contentos.
(El Argentino. 10.05.09)

CON LAS LISTAS CERRADAS, ES LA HORA DE DISCUTIR PROYECTOS

NI UN SOLO PASO ATRÁS
Con el cierre y presentación de las listas partidarias, finalizó la instancia preliminar del acto electoral del 28 de junio próximo. Ahora empieza un corto y fecundo momento donde los candidatos expondrán sus ideas y proyectos y los ciudadanos juzgarán, evaluarán y decidirán su voto.
No serán unas elecciones más. Tendrán el carácter plebiscitario que surgió del largo y agudo enfrentamiento entre las decisiones del Gobierno y la resistencia política activa de los patrones rurales y de los sectores partidarios, económicos y mediáticos afines a sus intereses. Allí está el origen de esta instancia crucial. En la confrontación inconclusa de los dos modelos de país en pugna desde hace 200 años. Y que esta vez se expresó en un gobierno que en el arranque de su gestión, cumplió cabalmente con su lema de “el cambio recién empieza” y una oposición que logró cuajar un frente común convocado por el más viejo y poderoso de los sujetos sociales argentinos: la patronal rural; a la que en otras épocas llamábamos simplemente, “la oligarquía”.
La historia de nuestra sociedad está marcada por los procesos genuinamente nacionales y populares abortados violentamente con la razón de los tanques y las metrallas golpistas que supieron servir de partido blindado de la derecha nativa.
Todo intento de escribir y ejercer un nuevo cuerpo de leyes que respondiera doctrinariamente a los intereses populares, terminó licuándose por defección y por debilidad propia, pero la determinación última siempre corrió por cuenta de las bayonetas destituyentes.
¿Qué cambió entonces ahora? Que ya no está “el partido militar” y por el contrario, hay una voluntad inalterable del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner de no dar ni un paso atrás en el desarrollo de un modelo de país que se sustenta en la redistribución del ingreso. Por eso mismo, precisa consolidarse democráticamente en las urnas.
Mientras tanto, la derecha agitará hechos violentos como los ocurridos contra el Municipio de Lanús o la irrupción belicosa contra la Presidenta en Paraná, por parte de la guardia rural de Alfredo De Angelis.
Habrá que acumular mucha fuerza y representatividad popular para poder profundizar el modelo gobernante y superar así la etapa de los procesos populares interrumpidos.
Los poderosos nunca conceden nada, y el Gobierno lo sabe. No es un dato menor.
Por eso la derecha tira la toalla del “consenso”, advertida que el Gobierno concibe la construcción del futuro como la consecuencia de una lucha permanente y necesaria para conquistar los derechos de las mayorías y que para librarla, se ubica en uno de los campos en pugna, el que contiene a los trabajadores y amplios sectores de la clase media.
¿Estarán todos los actores democráticos a la altura de la historia? Ojala.
De todos modos, el que finalmente decidirá, será el pueblo en su conjunto.
(Miradas al Sur, 10.05.09)

viernes, 8 de mayo de 2009

USTED PREGUNTARÁ PORQUÉ CANTAMOS

Se cierran las listas electorales y se abre paso la verdad sobre el modelo de país que vamos a elegir. Todos saben que no será una elección más. Todos saben que se fortalecerá el modelo que defiende el empleo y la producción, o se lo debilitará a costa del regreso de los que gobernaron en los noventa y provocaron la crisis más cruel de nuestra historia en el 2001 y 2002.
La disyuntiva electoral vuelve a estar partida en dos, como en otras circunstancias históricas trascendentes para la nación y el pueblo.
Del lado de quienes se identifican con el gobierno nacional, las cosas aparecen más claras. Se podrá coincidir con ellos o no. Pero tienen una gestión de seis años para someterla al juicio democrático del voto popular. Exhiben con orgullo la realidad de un país que salió del abismo, que enfrenta quizás la peor crisis mundial de la historia y que sigue creciendo pese a ello.
Dan todos los días muestras claras que, con este modelo, el Estado volvió para recuperar el trabajo, la educación, el salario, la redistribución del ingreso.
Del lado de los opositores, las dos ofertas de la derecha llegan con la cara amoratada por los escándalos que sacuden tanto a las listas de la alianza radical de Elisa Carrió como a la de Francisco De Narváez.
Por sendas causas relacionadas con el tráfico de efedrina y con la prostitución de menores. Así como leyó.

La lista encabezada por Francisco De Narváez tiene pendiente judicialmente una presunta participación suya en llamadas efectuadas desde su celular a quien es considerado un jefe del narcotráfico y la lista encabezada por Margarita Stolbizer es sacudida por una causa por prostitución de menores, que afecta particularmente al Intendente de Pergamino, el referente de Julio Cleto Cobos, Héctor Cachi Gutiérrez.
Así se llega a este día de cierre.
En el cuerpo de los diarios encontrará los detalles. Aquí sólo diremos que nos causan asco y vergüenza las acusaciones que se cruzan entre los mismos opositores.
¿Cómo no tener miedo a caer nuevamente en manos de este tipo de políticos? ¿Cómo no temer a que vuelva a ser posible la alianza entre millonarios sospechados de relaciones con el narcotráfico, poderosos y violentos patrones rurales y corruptos de la peor calaña?
No hacemos una imputación penal, porque no nos corresponde. Ya hablará la justicia como atañe en un estado de derecho.
Pero sí transmitimos algo tan o más grave, como son estas acusaciones de inmoralidad que hoy pesan públicamente sobre importantes referentes de la oposición.
La Argentina real está desnuda. Somos nosotros mismos. Con virtudes y miserias a cuestas. Todos la podemos ver. Muestra sus bellezas y sus fealdades, sus alegrías y sus cicatrices, sus dolores viejos y sus dolores nuevos. Nadie podrá mirar para el costado sin un dejo de culpa. Hay que hacerse cargo de su suerte. No es una opción graciosa sino un deber patriótico. Y ahora que viene la hora de la ciudadanía, el momento crucial de juzgar con el voto popular, es conveniente que abramos bien los ojos para conocer por dónde pasa la verdad y por dónde las mentiras.
Si al cierre de las listas electorales se abre paso la verdad, la democracia debería ponerse contenta. También es bueno para la salud de la democracia que los que gobiernan le pongan el cuerpo a la convicción de que se juega el destino del modelo de inclusión social, evitando la hipocresía de los políticos que se esconden atrás del cortinado de la especulación personal.
Los candidatos ya están en la cancha. Ahora juega la sociedad.
Para irnos cantando, llenos de esperanza en el futuro, vaya nuestro homenaje al querido poeta Mario Benedetti, respondiendo con él que cantamos por el niño y porque todo y porque algún futuro y porque el pueblo, cantamos porque los sobrevivientes y nuestros muertos quieren que cantemos. Cantamos porque el grito no es bastante y no es bastante el llanto ni la bronca, cantamos porque creemos en la gente y porque venceremos la derrota; cantamos porque llueve sobre el surco y somos militantes de la vida y porque no podemos ni queremos dejar que la canción se haga ceniza.

Que así sea.

(El Argentino. 08.05.09)

jueves, 7 de mayo de 2009

LA FERIA DE LAS VANIDADES

El sector de la oposición que sigue aferrada a la sombra de la triste figura de Julio Cleto Cobos, acaba de darle un cachetazo a la Coalición radical de Elisa Carrió.
“¿Y ahora qué hacemos?” Se preguntaban de un lado y del otro de la llamada “alianza residual”. Consultados algunos referentes del cobismo bonaerense, dispararon con munición gruesa contra sus hasta ahora socios de la UCR y la Coalición cívica.
Los cobistas, concientes que sus chances electorales caerán en picada hasta desdibujar por completo el sueño de llegar a las presidenciales, no dudan en adjudicar las principales responsabilidades de esta ruptura a Elisa Carrió.
Ven frustradas sus aspiraciones aún teniendo para exhibir al único personaje mutante de la política criolla.
Cleto Cobos, ese invento argentino que, a diferencia del dulce de leche, nos amarga y avergüenza, hoy está bebiendo de su propio veneno.
Por responsabilidad editorial y por buen gusto, preferimos no reproducir las acusaciones proferidas contra la platinada dirigente chaqueña.
Algunos radicales cívicos contraatacaron después contra los radicales cobistas, hasta hacerlos aparecer como unos angurrientos de poder que no cuentan ni con la mínima representatividad para exigir un concejal.
Convengamos, no obstante, que hay un avance respecto a la etapa aliancista fugada en diciembre del 2001 y es bueno para la salud democrática que esto suceda. En esta oportunidad, los aliancistas se rompen antes de los comicios y evitan de ese modo, que la ciudadanía quede a merced de sus desavenencias. Habrá que reconocer el favor que acaban de producir a los ciudadanos. Porque de no haber mostrado la hilacha ahora, se corría el riesgo que la desmemoria confunda a una importante porción de la sociedad, creyendo que las voces que adelantaban que esta alianza era sólo un matrimonio por conveniencia, verbalizaban una acusación sin fundamentos. Podrán incluso recomponer algunas líneas de acuerdo. Pero el papelón está hecho. Ya no son el promocionado “Acuerdo”; ahora serán objetivamente el “Desacuerdo Cívico y radical”.
Pasen y vean. Abrió sus puertas la feria que suele anteceder a los cierres de listas electorales.
La vanidad cotiza en alza cuando de aferrarse a una baldosa partidaria y legislativa se trata. La vanidad de los que no saben abrir con generosidad los espacios de integración y la de aquellos que con tal de obtener un lugar expectante en una lista, son capaces de entregar hasta el bastón dorado de la abuela.
¿Qué es lo grave de estas sociedades mediáticas y politiqueras? Que no están unidas por un proyecto común, que no comulgan entre ellos una pertenencia o identidad con un plan estratégico, más allá del modelo neoliberal que defienden. Es exactamente igual lo que ocurre con la otra porción de la oposición, la que encabeza Francisco De Narváez, Mauricio Macri y Eduardo Duhalde. Acuerdan en el modelo de ajuste, pero están a los mordiscones entre ellos.
Es el peligro que debería evitar la sociedad democrática para que no vuelva el pasado oprobioso que trajo tanto dolor a los argentinos.
No es una dato menor este, porque las diferencias y chisporroteos también ocurren en las orillas de quienes comulgan con el modelo de inclusión social gobernante. Pero en este caso, el modelo actúa como un gran articulador que procesa políticamente las diferencias que legítimamente puedan suscitarse. Y es un reaseguro para la sociedad saber que atrás de los hombres y mujeres que encarnan un proyecto, hay un modelo de país que defiende el empleo y garantiza la unidad.
Los principales opositores que sí habrá que seguir muy de cerca, son los grandes medios de desinformación. Se desvelan con sus titulares diarios en reemplazar la labor que les correspondería realizar a sus socios partidarios. Se terminarán transformando, definitivamente, en un simple y mentiroso panfleto opositor.
El futuro se abre paso pese a ellos.
Como afirmaron anoche el Intendente de Quilmes, Francisco Barba Gutiérrez y el ex Presidente Néstor Kirchner, llegó la hora de probar la templanza y la convicción en la construcción colectiva de un país justo, soberano y solidario. Y ésta es una epopeya nacional y popular que debería comprometer a todos los argentinos bien nacidos, más allá de banderías partidarias.
(El Argentino. 07.05.09)